Luis Mu?oz, un capit¨¢n muy se?alado

La amarga y dolorosa derrota sumada por el M¨¢laga en Albacete deja muchos se?alados, pero especialmente uno, el capit¨¢n Luis Mu?oz. Su autoexpulsi¨®n antes del descanso con el marcador a favor (1-2) en una cita casi definitiva para tratar de engancharse a la pelea por la salvaci¨®n, conden¨® al equipo blanquiazul a la derrota y le deja con pie y medio en Primera RFEF. Un comportamiento intolerable en la figura de quien debe ejercer como l¨ªder y referente en el vestuario, cosa que no ha hecho en ning¨²n momento estas ¨²ltimas temporadas.

Su estatus dentro del c¨¦sped y, por supuesto, en el vestuario, queda tocad¨ªsimo. El cabreo de Sergio Pellicer era monumental, no es para menos, y se presume una sanci¨®n ejemplar para el ¡®8¡ä del M¨¢laga. Esteban Burgos, otro de los veteranos y llamados a ser l¨ªderes, cometi¨® el mismo error ante el Oviedo. Ahora ha sido Luis Mu?oz el que ha cortado las alas a su propio equipo. El club debe ser implacable con este tipo de actitudes que cuestan partidos y puntos y que tienen al M¨¢laga al borde del abismo.

Luis Mu?oz ha pedido perd¨®n p¨²blicamente por su garrafal error. Pero dej¨® pasar unas cuantas horas, para muchos demasiado tiempo, antes de emitir un comunicado a trav¨¦s de sus redes sociales entonando el ¡®mea culpa¡¯. ¡°Despu¨¦s de haber pasado unas horas tras el partido, sigo sin quitarme de la cabeza lo que ha ocurrido hoy y quiero pedir disculpas. A mis compa?eros, al cuerpo t¨¦cnico, al club y a todos los aficionados que son el verdadero coraz¨®n de esta entidad. Todos sabemos que las emociones aumentan una vez metidos de lleno en el terreno de juego y aunque esto no justifique lo de hoy, a veces en el campo uno piensa m¨¢s con el coraz¨®n que con la cabeza. Soy el primero que est¨¢ sufriendo la situaci¨®n actual del equipo, siendo de M¨¢laga, malaguista y en el club de mi vida. No teng¨¢is ninguna duda que mientras tengamos vida vamos a luchar por este escudo hasta el final¡±, escribi¨® el capit¨¢n del M¨¢laga este domingo por la noche.

Lo cierto es que el M¨¢laga se qued¨® con diez y acab¨® sumando una derrota que le deja a¨²n m¨¢s lejos de la permanencia. Para colmo, tras el pitido final, algunos jugadores que acudieron a saludar a los casi 400 malaguistas desplazados al Carlos Belmonte, entre ellos N¡¯diaye y Manolo Reina, acabaron encar¨¢ndose con varios aficionados. El clima no puede ser m¨¢s hostil en torno al equipo, que se desangra y al que no lo reconducen ni los cambios de entrenador ni los movimientos en las alineaciones.