Fractura total entre la afici¨®n del Lugo y la SAD

El CD Lugo va a perder la categor¨ªa y lo va a hacer dando una imagen impropia de un club profesional. Incapaz de ganar un partido en todo 2023, descendido antes de finalizar el mes de abril y dando imagen de impotencia en cada partido. Adem¨¢s, la calamitosa gesti¨®n deportiva y la falta de sensibilidad con la grada ha hecho que la afici¨®n, harta de estar harta, haya dicho basta. El partido del pasado domingo ante el Andorra supuso la escenificaci¨®n de la fractura total que, ahora mismo, existe entre la parroquia albivermella y la SAD. Desde el mismo inicio del partido hasta la finalizaci¨®n del mismo la afici¨®n mostr¨® su enfado en un ambiente enrarecido que dej¨® en segundo plano lo (poco) que ocurr¨ªa dentro del terreno de juego.

La salida de los jugadores fue recibida por los pocos m¨¢s de 2000 espectadores que se acercaron al Anxo Carro con una pa?olada y el grito mayoritario de ¡°Tino Vaite Xa¡±, algo que ya se empieza a convertir en un cl¨¢sico en el feudo albivermello en protesta por la gesti¨®n del due?o del club. Tambi¨¦n hubo c¨¢nticos para Wagner Molina en su faceta de director deportivo y para el resto de la Junta Directiva, a la que se pidi¨® la dimisi¨®n.

Pero hubo m¨¢s. En el Fondo Norte se desplegaron pancartas con leyendas como ¡°Non nos representades¡±, ¡°Fora Todos¡± o ¡°Limpeza Total¡±. El momento m¨¢s delicado se vivi¨® cuando la seguridad privada del club acudi¨® a retirarlas, siendo abucheados por gran parte del estadio. Tambi¨¦n hubo tensi¨®n entre los aficionados m¨¢s animosos del Fondo Norte y Javi Avil¨¦s, que se encar¨® con ellos recibiendo a cambio una lluvia de insultos. Para terminar, aficionados se reunieron a la salida del partido delante de la entrada al palco de autoridades para protestar contra el accionista mayoritario.

Todos estos incidentes sirven para corroborar la ruptura absoluta que hay entre la masa social del Lugo y la SAD, m¨¢s evidente que nunca tras una temporada tan nefasta como la actual. Un distanciamiento que en las ¨²ltimas temporadas fue creciendo pero que no ha sido hasta el curso actual cuando se ha hecho mayoritaria dentro del sentir de la afici¨®n. Un da?o colateral m¨¢s dentro de la desgracia del descenso y que amenaza con seguir tensando las relaciones entre aficionados y propiedad.