Decidido: Ramis no seguir¨¢
Aunque no es oficial a¨²n, el todav¨ªa entrenador del Tenerife ya le ha manifestado a los directivos del club su intenci¨®n de no renovar su contrato.
Es un secreto a voces y desde hace semanas se especula con esta posibilidad. Y si bien a¨²n no es oficial, Luis Miguel Ramis ya le ha notificado a los dirigentes del Tenerife su decisi¨®n de no continuar en el banquillo del equipo la pr¨®xima temporada. As¨ª, se pondr¨¢ fin a un ciclo al segundo entrenador con m¨¢s partidos en la historia de la entidad.
Al de Tarragona se le pregunta en cada rueda de prensa por esta circunstancia y siempre responde lo mismo. ¡°Cuando se tenga que saber, se enterar¨¢n¡±. Y parece que, con el equipo virtualmente salvado, seg¨²n informa el portal Relevo, el t¨¦cnico ya se habr¨ªa decantado por algo que muchos sospechaban, a pesar de, en su momento, tener en la mesa una oferta de renovaci¨®n.
La marcha de Juan Carlos Cordero, el extra?o mercado de fichajes de invierno, la poca discreci¨®n de algunos directivos y la llegada de Mauro P¨¦rez -con quien no tiene relaci¨®n-, son algunos de los argumentos del m¨ªster para haber decantado la balanza en favor de su salida. Quiz¨¢s de cara a la galer¨ªa, desde el club siempre ha manifestado que Ramis es su prioridad.
Se termina una etapa que empez¨® en noviembre de 2020 cuando fich¨® para reemplazar a Fran Fern¨¢ndez. Esa primera temporada, consigui¨® la permanencia lo que le vali¨® para renovar por otras dos campa?as. En la siguiente lleg¨® a la final del Playoff por el ascenso a Primera perdiendo ante el Girona en el Heliodoro (1-3). Y este a?o, con muchos cambios institucionales y con el list¨®n muy alto, nunca se enganch¨® a los puestos altos.
Esto le vali¨® para situarse detr¨¢s de Jos¨¦ Luis Oltra como el segundo entrenador con m¨¢s partidos en la historia del club. De momento suma 118 (llegar¨¢ a 124 al acabar el campeonato) con un balance de 47 triunfos, 32 empates y 39 derrotas. Ha dotado al equipo de un estilo bien definido que a un sector de los aficionados no termina de gustar.