Cazorla es nostalgia en Butarque

Hubo un tiempo en el que Butarque fue vitrina de estrellas. A?os de gloria con alguna ausencia en la colecci¨®n. Porque durante el periodo en el que Legan¨¦s se visti¨® como urbe de Primera (cuatro temporadas, una menos de las que ya suma en Segunda tras el descenso), era atractivo frecuente lo de gozar con el fulgor de gal¨¢cticos mundiales all¨¢ donde lo habitual antes consist¨ªa en aplaudir a jornaleros del bal¨®n. Que si un Messi por aqu¨ª, que si un Iniesta por all¨¢. Tambi¨¦n Koke, Griezmann, Modric, Kroos, Ramos¡­ Por cierto, Cristiano Ronaldo, jam¨¢s jug¨® en la avenida de los Once Leones. S¨®lo una vez Santi Cazorla. Hoy (21:00, sigue en directo el partido en As.com) el asturiano rememorar¨¢ aquellos tiempos, eso s¨ª, un pelda?o por debajo del Olimpo y con la zamarra del Oviedo enfundada. Nostalgia amenazante. Nadie dijo que fuera sencillo desafiar a los mejores.

Cazorla lo es. As¨ª, en presente de indicativo. Presente casi continuo. In crescendo. Su aterrizaje en el Tartiere fue caso de estudio. Un terremoto de celebridad para su club y la categor¨ªa que romp¨ªa, adem¨¢s, la deuda que arrastraba por jam¨¢s haber jugado de profesional como carbay¨®n. Pero m¨¢s all¨¢ del relato, quedaba la realidad. Sus dudas. ?Rendir¨ªa bien a sus 38 a?os? ?Estar¨ªa a la altura f¨ªsica y competitiva? S¨ª y por supuesto que s¨ª. Poco a poco, este ex de Villarreal (de amarillo gole¨® 0-3 al Lega) o Arsenal, entre otros, empieza a comandar un Oviedo que aterriza en Butarque tras proclamar el estado de optimismo.

Carri¨®n fue opci¨®n pepinera

La culpa es, en parte, de Carri¨®n. El catal¨¢n (uno de los firmes candidatos a ser entrenador del Legan¨¦s el verano pasado) ha logrado cambiarle la cara a un equipo que en los ¨²ltimos estertores de la era Cervera parec¨ªa mustio. Sin ¨¢nimo. Ahora el Oviedo cree en s¨ª mismo. Pero sobre todo, cree en Cazorla, que ya empieza a dejar su marca sobre el terreno de juego. Los dos triunfos seguidos, en Elda y contra el Huesca, han servido para recuperar la confianza y, de paso, sacar al equipo de los puestos de descenso. Chute de tranquilidad en el alma.

Para la cita en Legan¨¦s, Carri¨®n no alterar¨¢ sus planes. Ya ha anunciado en cada intervenci¨®n p¨²blica que este Oviedo saldr¨¢ a ganar. Ambici¨®n. Tampoco su estilo se negocia. Un modelo esf¨¦rico. Bal¨®n, bal¨®n y bal¨®n. As¨ª, apostar¨¢ el entrenador por el 4-2-3-1 que tan buena imagen ha mostrado en las ¨²ltimas citas. El equipo inicial, salvo sorpresa, se parecer¨¢ tambi¨¦n al de esos dos precedentes, aunque podr¨ªa haber alguna novedad.

Sebas Moyano, autor del tanto del triunfo ante el Huesca, oposita seriamente a colarse en el once. Y est¨¢, adem¨¢s, el recurso de Cazorla que previsiblemente empezar¨¢ en el banquillo (se sigue un plan progresivo con ¨¦l) pero que podr¨ªa tener impacto seg¨²n se vaya desarrollando el partido. La gran novedad en la lista de Carri¨®n es la presencia de un V¨ªctor Camarasa que sigue en pleno proceso de recuperaci¨®n de sus problemas de salud mental. El entrenador, tras consensuarlo con los servicios m¨¦dicos, ha decidido incluirlo en la lista y si el partido lo demanda podr¨ªa incluso disponer de algunos minutos. No participa desde la tercera jornada, en Burgos. Su mera presencia ya es una victoria para el Oviedo.

Cornada arbitral

La que necesita el Legan¨¦s es aritm¨¦tica, obsesionado como vive el club por amarrar cuanto antes los 50 puntos que deber¨ªan garantizar la permanencia. Y a partir de ah¨ª, a so?ar. Si le dejan, claro. En Burgos el anhelo on¨ªrico tuvo algo de pesadilla pragm¨¢tica. Y vest¨ªa de rojo sangr¨ªa. El arbitraje de Caparr¨®s Hern¨¢ndez y, sobre todo, el de Guzm¨¢n Mansilla desde el VAR (neverazo para los dos una jornada despu¨¦s) priv¨® al Lega de puntuar. Y a¨²n as¨ª, y pese a la roja a Ciss¨¦, los madrile?os dejaron en El Plant¨ªo sensaci¨®n de equipo cuajado y serio. Amenazante con diez.

¡®This is the way¡¯, que insiste en ¡®mandaloriano¡¯ un Borja Jim¨¦nez al que el partido le supondr¨¢ un desaf¨ªo de rotaciones (se intuyen cambios) y estilo para seguir la senda gloriosa en su estadio: tres victoria seguidas y en todas sensaci¨®n de equipo incontestable. Sin Miram¨®n, ni Arambarri a¨²n tocados, ni Ciss¨¦, sancionado la defensa apunta a la ¨²nica l¨ªnea sin cambios. Perea y Djouahra podr¨ªan tener, presencia en un Legan¨¦s de discurso bajo que, con todo, ans¨ªa hacer de nuevo de Butarque una vitrina de estrellas.

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