100 A?OS DE MESTALLA (EPISODIO VII)
Mestalla es nombre de mujer
Seis pioneras por diferentes razones en la historia del Valencia y de Mestalla relatan el papel de la mujer y sus propias experiencias en un estadio centenario.
Con motivo del centenario de Mestalla, AS va a realizar un serial de diez episodios que cada d¨ªa, a las 16:00 horas, publicar¨¢ en as.com. Ser¨¢ a la misma hora en la que el bal¨®n ech¨® a rodar en Mestalla aquel 20 de mayo de 1923, en el primer duelo ante el Levante.
EPISODIO 1 (El primer d¨ªa de Mestalla) // EPISODIO 2 (El pueblo de Mestalla) // EPISODIO 3 (Mestalla, puerta a Espa?a de los dioses del f¨²tbol) // EPISODIO 4 (Mestalla, la casa de la Selecci¨®n) // EPISODIO 5 (Mi vecino es Mestalla) // EPISODIO 6 (El respeto de Mestalla)
Al estadio del Valencia le da nombre la acequia que cruza por debajo suyo: Mestalla. Un nombre femenino para un recinto donde siempre la presencia de hombres ha sido m¨¢s numerosa, pero donde la mujer ha tenido tambi¨¦n su espacio, su voz y su relevancia. Hoy el asiento principal del palco lo ocupa Lay Hoon Chan, la primera presidenta en los 104 a?os de historia del club y en los 100 que cumplir¨¢ Mestalla el pr¨®ximo 20 de mayo.
La evoluci¨®n del papel de la mujer en los 100 a?os de vida de Mestalla es un reflejo de la transformaci¨®n de la propia sociedad. Si bien todav¨ªa queda mucho camino por recorrer en cuanto a la igualdad en el mundo del f¨²tbol, dado que solo el 16% de los abonados son mujeres y los partidos del equipo femenino del Valencia siguen celebr¨¢ndose en el estadio a cuentagotas, Mestalla puede presumir de ser hist¨®ricamente un espacio ¡°abierto¡± y ¡°tolerante¡± en el que la mujer ha sido ¡°respetada¡±.
Los entrecomillados son de mujeres que son historia del Valencia y de Mestalla por pioneras y por su sentimiento de pertenencia, como Vicenta Carrasco, abonada m¨¢s longeva; Carmen Lluch, sobrina de un socio fundador; Mari Tere Berenguer, aficionada icono de la Liga de 1971; Bego?a Abraldes, primera periodista acreditada en Mestalla; Merchina Peris, autora del primer gol de una mujer en el estadio, o Mariola Hoyos, primera vicepresidenta del club.
El ¡®boom¡¯ de presencia de mujeres en las gradas de Mestalla coincide con la llegada de la Democracia a Espa?a. Pero a lo largo de toda su historia, como se comprueba en fotograf¨ªas de d¨¦cadas anteriores, como la que ilustra este reportaje, hubo asistencia femenina en los partidos del Valencia. ¡°En Tribuna siempre hab¨ªa muchas mujeres, en los primeros a?os la mayor¨ªa acud¨ªa con sus padres o maridos, pero con el tiempo empezaron a ir solas o con amigas. Mi madre, por ejemplo, con 18 a?os iba con sus primas. En Mestalla, a diferencia de lo que pasaba en otros espacios p¨²blicos, la mujer era independiente y ten¨ªa opini¨®n¡±, comenta Merchina Peris.
¡°En Mestalla, a diferencia de lo que pasaba en otros espacios p¨²blicos, la mujer era independiente y ten¨ªa opini¨®n¡±
¡°Llevo m¨¢s de 70 a?os yendo a Mestalla y nunca me he sentido observada por ser mujer, aunque a mis amigas del colegio les extra?aba mi pasi¨®n por el f¨²tbol, algo que a mi hija ya no le pas¨®¡±, dice Carmen Lluch, una reflexi¨®n que comparte Vicenta Carrasco: ¡°Nunca necesite el permiso de nadie para poder acceder a Mestalla¡±. Mari Tere Berenguer, por su parte, recuerda que ¡°empec¨¦ a ir a Mestalla en los 70 y en los descansos yo me iba sola a tomar mi cortado al bar; y aunque sol¨ªa ser la ¨²nica mujer, nunca tuve ning¨²n problema¡±. La periodista Bego?a Abraldes recalca: ¡°La presencia de mujeres era m¨¢s numerosa aqu¨ª que en otros estadios, como tambi¨¦n lo era en San Mam¨¦s¡±. O como reflexiona Mariola Hoyos: ¡°Quiz¨¢s sea por el car¨¢cter abierto, afable y festivo de los valencianos, pero siempre vio un gran n¨²mero de mujeres en Mestalla¡±.
Vicenta Carrasco: abono n¨²mero 15, la socia m¨¢s longeva
Apunten una fecha: 1 de julio de 1958. Piensen en todas las cosas que han pasado desde entonces en Mestalla. Pues hay una que no ha cambiado: Vicenta Carrasco Boluda sigue siendo abonada del Valencia. Lo es desde ese d¨ªa, es decir, desde hace 65 a?os, lo que le hace tener el abono n¨²mero 15 del club y le hace ser la socia m¨¢s longeva del Valencia. Ninguna otra mujer lleva tantos a?os de fidelidad y con asiento propio en Mestalla.
Vicenta, a sus 93 a?os, recuerda con ternura a Puchades, de quien tiene una peque?a escultura en su sal¨®n. Su pasi¨®n por el f¨²tbol le viene de su padre y de las cr¨®nicas de los partidos que le¨ªa de ni?a en los peri¨®dicos. ¡°Empec¨¦ a ir al f¨²tbol con 16 a?os, con unos amigos, era la ¨¦poca de la Delantera El¨¦ctrica e ir a Mestalla era el mayor entretenimiento de la semana¡±, comenta Vicenta, que con el paso de los a?os confes¨® al c¨ªrculo familiar qu¨¦ triqui?uela hac¨ªan ella y sus amigos para poder entrar al estadio.
¡°Empec¨¦ a ir al f¨²tbol con 16 a?os, con unos amigos, era la ¨¦poca de la Delantera El¨¦ctrica¡±
¡°Al f¨²tbol sol¨ªa ir con otros tres amigos, aunque solo ten¨ªan dinero para comprar una o dos entradas; pero como uno dibujaba muy bien y adem¨¢s ten¨ªa una imprenta, falsificaba las que les faltaban y as¨ª entraban todos¡±, confiesa con ternura y jocosidad su hijo Javier. Uno de esos amigos acab¨® siendo su marido, Francisco Fabregat, que lleg¨® a tener el carn¨¦ de abonado n¨²mero 17 del Valencia y que durante a?os fue la voz de Mestalla, el hombre que informaba de las alineaciones, cambios, goles e incidencias por megafon¨ªa.
Bego?a Abraldes: la pionera de las periodistas en Mestalla
El periodismo es parte del f¨²tbol y lo es tambi¨¦n de Mestalla, donde pasan cosas desde hace 100 a?os y los medios de comunicaci¨®n siempre han estado ah¨ª para contarlas. La prensa deportiva dista a¨²n hoy en d¨ªa de una total equidad de g¨¦nero, aunque las mujeres est¨¢n cada vez m¨¢s presentes en las cabinas, pupitres y sala de prensa del estadio. Pero hubo un tiempo en el que todo eran hombres. ¡°Hasta que lleg¨® a Mestalla desde Bilbao Bego?a Abraldes¡±, hace memoria para este art¨ªculo el periodista Paco Lloret.
Bego?a es disc¨ªpula de Sara Est¨¦vez, la primera periodista deportiva de Espa?a, como Mar¨ªa Izquierdo, Olga Viza y otras tantas mujeres que se decantaron por la informaci¨®n deportiva en una ¨¦poca que era coto masculino. ¡°Yo siempre quise ser escritora y para escribir ten¨ªa antes que tener algo que contar, por eso empec¨¦ en el periodismo. ?Por qu¨¦ en deportes? Por romanticismo, soy hija de inmigrantes en Suiza, mi padre de Bilbao y muy del Athletic, mi madre de Zamora, as¨ª que el Athletic era una conexi¨®n con mis ra¨ªces¡±.
¡°Cuando yo empec¨¦ a ir a los entrenamientos de Paterna, no iba ning¨²n periodista¡±
Ten¨ªa 16 a?os cuando llam¨® a la revista Don Bal¨®n. Le dijeron que les presentara alg¨²n art¨ªculo de prueba. ¡°As¨ª que me plant¨¦ en un entrenamiento del Athletic, pens¨¦ qu¨¦ jugador pod¨ªa interesar a m¨¢s gente, le par¨¦ y le hice una entrevista¡±. Ese futbolista era una leyenda: Jos¨¦ ?ngel Iribar. Ah¨ª comenz¨® una carrera profesional que le llev¨® despu¨¦s a ser corresponsal del Sport, El Correo, Levante, Deporte Valenciano y, entre otros medios, Canal 9.
Bego?a lleg¨® a Valencia con 19 a?os, cuando la ciudad se preparaba para ser sede del Mundial de 1982. ¡°En la zona de prensa de Mestalla me sent¨ªa extra?a porque era la ¨²nica mujer, aunque todos mis compa?eros siempre me cuidaron y fui tratada con respeto por los futbolistas, los entrenadores, los dirigentes y por el p¨²blico¡±, comenta Bego?a, quien hoy reside en Bilbao, donde escribe novelas tras dar por cumplido su ciclo como periodista.
¡°De Mestalla recuerdo que la zona de prensa estaba en una especie de entresuelo, donde la visi¨®n no era, digamos, la mejor¡±, apunta. A¨²n tiene presente la sala de prensa, el cuarto de los tel¨¦fonos desde donde se recitaban las cr¨®nicas y el t¨²nel de acceso a los vestuarios, donde se realizaban las entrevistas despu¨¦s de los partidos. Pero Bego?a tiene m¨¢s presente la Ciudad Deportiva de Paterna, donde tambi¨¦n fue pionera y no solo entre mujeres.
¡°Cuando yo empec¨¦ a ir a los entrenamientos, no iba ning¨²n otro periodista. A veces Tito (Vicente) Bau y en ocasiones Miguel ?ngel Murcia, pero yo no me perd¨ªa pr¨¢cticamente ninguno, ven¨ªa con esa costumbre de mis d¨ªas con el Athletic y la mantuve en Valencia, porque a m¨ª no me gustaba hablar por tel¨¦fono, era m¨¢s del cara a cara, que es como realmente puedes conocer el lado personal de los protagonistas¡±, indica Bego?a, que muchos d¨ªas acud¨ªa a Paterna ¡°gracias a Ricardo Arias, porque yo no ten¨ªa coche¡±.
Bego?a empez¨® informando de un Valencia al que entrenaba Di St¨¦fano y regres¨® a Bilbao tras una rueda de prensa de Jorge Valdano. ¡°Ese d¨ªa tuve que ir con mi hijo, porque no ten¨ªa con qui¨¦n dejarlo, y mientras yo trabajaba, se qued¨® jugando al f¨²tbol con Mazinho, su hijo (Thiago) y su sobrino (Rodrigo); esas cosas hoy en d¨ªa son impensables, quiz¨¢s por esa p¨¦rdida de normalidad y trato personal dej¨¦ la profesi¨®n¡±. Lo confiesa la comunicadora pionera de Mestalla, una periodista que logr¨® que Bern Schuster rompiera su silencio con la prensa, gan¨¢ndole adem¨¢s gracias a esa entrevista que public¨® en Levante-EMV una apuesta a Nicol¨¢s Casaus. ¡°Si Bego?a se propone hacerle una entrevista, se la har¨¢ Nicol¨¢s, ver¨¢s como se la hace¡±, le avis¨® Arturo Tuz¨®n al dirigente azulgrana mientras ella esperaba al jugador alem¨¢n en el hall del hotel de concentraci¨®n del Barcelona en Valencia la ma?ana de un partido.
Carmen Lluch: sobrina de un socio fundador del Valencia
Carmen descuelga el tel¨¦fono con voz en¨¦rgica, aunque se vuelve angelical cuando habla de Mestalla. ¡°Soy abonada desde hace 56 a?os, aunque desde muchos antes ya iba al campo con mis padres y mi t¨ªo, sent¨¢ndome encima de ellos en las sillas de enea y despu¨¦s con un carn¨¦ infantil, as¨ª que si te digo que es mi casa no te miento¡±, comenta la socia con n¨²mero de carn¨¦ 97 del Valencia. Su t¨ªo Alfredo Mart¨ªnez Ibarra fue portero y socio fundador del Valencia, con carn¨¦ n¨²mero 0 acreditado por el club.
Carmen, a sus 77 a?os, sigue yendo al f¨²tbol a la zona de Tribuna baja, detr¨¢s de los banquillos (¡°veo el f¨²tbol en silencio, aunque a veces pongo a caldo al cuarto ¨¢rbitro¡±), por lo que su familia lleva ocupando esa zona de asientos en Mestalla desde hace un Siglo. Ahora va con sus hijos y sus nietos. Estuvo presente en la final de Copa en la que Quique se subi¨® al larguero del Bernab¨¦u (1954), en Bruselas el d¨ªa de la Recopa (1980) y en las dos ¨²ltimas de Sevilla (2019 y 2022). ¡°Este a?o hemos tenido que apretar m¨¢s y apoyar con todo a los chavales, por eso me fui tambi¨¦n al partido de Elche¡±, enfatiza.
¡°El gol de M¡¯Bia me destroz¨®, aunque lo compens¨¦ la noche del Getafe con Marcelino¡±
¡°Ninguno como Puchades, qu¨¦ futbolista m¨¢s honesto, aunque tambi¨¦n me emocionaba mucho ver jugar a Kempes y de los recientes me quedo con Albelda y Parejo¡±, enumera Carmen, que confiesa que ¡°nunca¡± olvidara el d¨ªa que falleci¨® Vicente Peris (¡°me impact¨® mucho su p¨¦rdida¡±) ni tampoco el del gol de M¡¯Bia (¡°ese chico del Sevilla me destroz¨®¡±), aunque asegura que compens¨® tanto dolor ¡°la noche del Getafe con Marcelino¡±. Porque lo de Carmen es valencianismo en vena y adn blanco y negro: ¡°Mi hermano era de Segu¨ª, pues yo de Ma?¨®; mi marido de Ca?izares, pues yo de Palop¡±.
Carmen guarda como un tesoro la insignia que le entreg¨® el Valencia por 50 a?os de socia, como tambi¨¦n una camiseta que le regal¨® Rub¨¦n Baraja y unos guantes de Bermell que el portero ¡°lanz¨® a la grada el d¨ªa del gol de Tendillo al Real Madrid con el que nos salvamos en el 83¡å. Del f¨²tbol moderno odia los horarios, ¡°porque antes ten¨ªamos el ritual de comer en familia para irnos todos juntos despu¨¦s a Mestalla, pero ahora no puedes hacer planes¡±. Echa de menos ¡°las tracas¡±, el lanzamiento de ¡°papelitos¡± y los ¡°tifos en Champions¡±, aunque ¡°soy feliz cada vez que voy a Mestalla¡±.
La voz de Carmen vuelve a ser en¨¦rgica a la hora de despedirse. Lo hace con un ¡°Amunt¡± y, de nuevo con tono angelical, un mensaje: ¡°Tranquilo, que los buenos tiempos volver¨¢n¡±.
Mari Tere Berenguer: la Chica de Sarri¨¤
A Mari Tere Berenguer le estaba buscando mucha gente y ella no lo sab¨ªa. Unos le llamaban Noelia, por la canci¨®n de Nino Bravo, y otros La Chica de Sarri¨¤. Nadie sab¨ªa c¨®mo se llamaba, si bien, muchos la conoc¨ªan. Su imagen dando saltos de alegr¨ªa con una camiseta del Valencia en las gradas de Sarri¨¤ es icono de la Liga de 1971, la que conquist¨® el equipo de Di St¨¦fano y el de Pep Claramunt. Fue a ra¨ªz del programa Conexi¨®n Vintage de Televisi¨®n Espa?ola cuando el periodista Paco Grande inici¨® una b¨²squeda que acab¨® d¨¢ndole respuesta su colega Paco Lloret. La Chicha de Sarri¨¤ no se llamaba Noelia sino Mari Tere.
¡°Aquel fue mi primer partido en Espa?a, yo viv¨ª hasta los 18 a?os en Brasil y ese a?o vine a estar con mi padre, que era valencianista y me llev¨® ese d¨ªa a Barcelona¡±, comenta Mari Tere. Su pasi¨®n por el f¨²tbol le ven¨ªa de su pa¨ªs de origen y lo vivido aquel d¨ªa le hizo ser del Valencia de por vida. ¡°Fui 43 a?os abonada de Mestalla, ¨ªbamos al estadio un grupo amigos y nos lo pas¨¢bamos en grande, aunque el f¨²tbol empez¨® a convertirse en un negocio televisivo a partir de la ¨¦poca de Paco Roig, se le daba cada vez menos importancia al socio, y los horarios raros acabaron por cansarme; lo dej¨¦ en la ¨¦poca de Juan Soler¡±, sentencia.
¡°Los horarios raros de los partidos acabaron por cansarme; dej¨¦ de ser abonada en la ¨¦poca de Juan Soler¡±
Mari Tere lleg¨® a Espa?a en los ¨²ltimos a?os del franquismo, aunque el ¡°r¨¦gimen todav¨ªa estaba muy presente y hab¨ªa menos libertades de las que yo ten¨ªa en Brasil¡±. Pese a ello, ¡°en Mestalla siempre estuve c¨®moda, aunque las mujeres ¨¦ramos minor¨ªa y habitualmente yo era de las m¨¢s j¨®venes¡±. Mari Tere empez¨® a notar un cambio en el ambiente del estadio ¡°a principios de los 80, ah¨ª ya ve¨ªas muchas chicas en los partidos, chicas que adem¨¢s eran muy fan¨¢ticas en sus celebraciones¡±. Tanto como lo fue ella en Sarri¨¤.
Merchina Peris: la primera mujer en marcar un gol en Mestalla
Merchina Peris, hija de Vicente Peris, legendario gerente del Valencia CF, entr¨® por primera vez Mestalla ¡°con el pa?al puesto¡±. La suya resume la historia del f¨²tbol femenino valenciano. Ella fue la primera mujer, entonces siendo una ni?a, en marcar un gol en Mestalla y gracias a ella e infatigables compa?eros de viaje como Pepe Ib¨¢?ez, Paco Polit o Berna Molina se escribe gran parte del relato y la evoluci¨®n del f¨²tbol femenino en la Comunitat Valenciana.
Su recuerdo de infancia es el ¡°olor al c¨¦sped de Mestalla¡±. Su lugar de recreo. ¡°Muchas tardes mi padre me recog¨ªa y me llevaba con ¨¦l al estadio, y mientras ¨¦l hac¨ªa sus cosas en el despacho, me daba un bal¨®n y me dec¨ªa: ves y juega ah¨ª fuera¡±. En sus carreras solitarias se imaginaba c¨®mo ser¨ªa marcar un gol ante 60.000 personas, que era la capacidad que entonces ten¨ªa el estadio, ¡°y tuve la fortuna de vivirlo en primera persona¡±.
¡°Muchas tardes, cuando mi padre (Vicente Peris) trabajaba en su despacho de Mestalla, me daba un bal¨®n y me dec¨ªa: ves y juega ah¨ª fuera¡±
El 11 de mayo de 1971 el Valencia disput¨® un partido amistoso en Mestalla contra el Partiz¨¢n de Belgrado como homenaje a su afici¨®n, que le hab¨ªa llevado en volandas al t¨ªtulo de Liga de esa temporada. El club, como pre¨¢mbulo, organiz¨® el primer partido de la historia de Mestalla entre equipos femeninos: Racing Valencia y Sporting Club Levante. ¡°En verdad ¨¦ramos el Valencia CF y el Levante UD, de hecho, jugamos con las camisetas y sus escudos, aunque como no ¨¦ramos secciones oficiales, nos pusieron lo de Racing y Sporting¡±.
Merchina, que ten¨ªa 11 a?os, las dem¨¢s jugadoras iban de los 15 hasta los 19, comenz¨® de suplente. El partido iba empate a cero cuando le dicen que le tocaba entrar a jugar. ¡°Ya solo con eso cumpl¨ªa un sue?o, imag¨ªnate, porque el estadio estaba hasta la bandera, pero nada m¨¢s salir, me lleg¨® un centro desde la derecha, lo remat¨¦ con la pierna izquierda y bat¨ª a la portera¡±, describe a¨²n con emoci¨®n. ¡°Le pegu¨¦ raso y al palo, como me dec¨ªa que ten¨ªa que hacerlo Di St¨¦fano, que siempre que iba a ver un entrenamiento con mi padre me daba clases magistrales antes de irse a la ducha¡±.
La autora del primer gol de una mujer en Mestalla no olvida los aplausos de Claramunt, Sol o Abelardo. ¡°Tras el gol me fui corriendo hacia el banquillo y ah¨ª estaban ellos viendo el partido, junto a mi padre, que daba saltos dentro del campo¡±. El partido acab¨® 3-0. Pur¨ªn y Menchu certificaron la victoria del Racing Valencia. Como escrib¨ªa el cronista de Levante: ¡°El p¨²blico se ha divertido viendo a las f¨¦minas que han ofrecido un bonito espect¨¢culo futbol¨ªstico¡±.
¡°Ese partido nos dio visibilidad a las chicas que quer¨ªamos jugar al f¨²tbol y fue un reflejo de la tolerancia de Mestalla, aunque fue solo un peque?o paso de un largo camino¡±, comenta Merchina, que a?ade un mis¨®gino comentario que escuch¨® de un directivo de la RFEF, que en aquellos a?os 70 se negaba a dar respaldo al f¨²tbol femenino: ¡°A las mujeres no les queda bien vestir de corto¡±. No fue hasta 1988 cuando el f¨²tbol femenino valenciano consigui¨® ser parte de la Real Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol y, tras ese hito, se fueron consolidando proyectos como el del San Vicente o el Colegio Alem¨¢n, embriones del Levante UD y Valencia CF. Y Merchina Peris, la primera mujer en marcar un gol en Mestalla, fue tambi¨¦n la primera delegada de la Selecci¨®n de la Federaci¨®n Valenciana.
Mariola Hoyos: la primera vicepresidenta del palco de Mestalla
Mariola Hoyos empez¨® a ir a Mestalla ¡°con 6 a?os¡±. Fila 2 de Tribuna, cuando ¡°todav¨ªa las sillas eran de enea¡± Lo hac¨ªa con su padre, Melchor Hoyos, presidente del Valencia durante 105 d¨ªas en la d¨¦cada de 1990. De ¨¦l le vino la pasi¨®n por el f¨²tbol y tambi¨¦n la vocaci¨®n por el palco. Ella fue la primera mujer que se sent¨® en sus butacas con rango de vicepresidenta del Valencia, como antes lo hiciera Beatriz Delgado como secretaria del Consejo, despu¨¦s Ana Julia Rosell¨® y M¨®nica Escamilla como consejeras y hoy Layhoon Chan como presidenta.
Mariola Hoyos apunta que la presencia de mujeres en el palco de Mestalla era ¡°habitual¡±. Nada que ver con la de otros estadios. ¡°En San Mam¨¦s, por ejemplo, aunque s¨ª ve¨ªas a muchas mujeres en la grada, ¨¦ramos muy pocas en el palco¡±, se?ala la empresaria, aunque nada que ver con su experiencia en el Benito Villamar¨ªn en la ¨¦poca de Ruiz de L¨®pera. ¡°All¨ª directamente las mujeres no pod¨ªan acceder y cada vez que ¨ªbamos, ten¨ªamos que solicitarlo por escrito y recordarles que era vicepresidenta del club¡±.
¡°En el Benito Villamar¨ªn, en la ¨¦poca de Lopera, las mujeres no pod¨ªan acceder al palco y ten¨ªamos que recordarles por escrito que yo era vicepresidenta¡±
En la actualidad mantiene cuatro abonos en Tribuna. Fila 16. Los tiene desde antes de que Jaume Ort¨ª le propusiera formar parte de su Consejo de Administraci¨®n, en el que se mantuvo despu¨¦s con la llegada a la presidencia de Juan Soler, que fue quien le ofreci¨® la vicepresidencia y posteriormente la presidencia de la Fundaci¨® VCF tras la salida de Carlos Pascual. De la gesti¨®n del club y del patronato se fue cuando una ampliaci¨®n de capital financiara por Bankia convirti¨® a la Fundaci¨® VCF en m¨¢ximo accionista del Valencia, una operaci¨®n que de primeras evit¨® la intromisi¨®n de una empresa fantasma llamada Dalport y con el tiempo propici¨® la llegada de Peter Lim. ¡°Pero todo eso es historia social del Valencia, la de Mestalla es m¨¢s agradable de recordar, porque Mestalla es f¨²tbol, pasi¨®n, nostalgia. Mestalla es el lugar al que cada domingo iba con mi padre¡±. Porque eso es tambi¨¦n Mestalla, recuerdos.
