Vinicius se rebela

Ser¨¢ que le saca cinco a?os de experiencia en ello, pero Vinicius entiende algo mejor al Bernab¨¦u que Mbapp¨¦. No es que sea una relaci¨®n sin altibajos la del brasile?o, de tan emocional que es, pero la parroquia madridista, puestos a elegir, prefiere eso a la tibieza que viene mostrando Kylian. De deseado... a silbado. En el minuto 20 el realizador enfoc¨® a Mbapp¨¦, su imagen se vio en el megamarcador 360? y ocurri¨® lo inesperado: ?de nuevo pitos! No mayoritarios, ni mucho menos, pero se sintieron. Como los que recibi¨® contra el Arsenal. Con cinco partidos sin marcar y esa roja absurda en Mendizorroza. Esto es el Madrid. La autocomplacencia no levanta t¨ªtulos.

Se vio en este partido trampa. El p¨²blico iba a jugar. Por venir del chasco contra el Arsenal, por estar antes de La Cartuja que tanto definir¨¢ el final de temporada blanca y porque la Liga es un objetivo menos palpable pero igualmente exigible. El referendum en Chamart¨ªn no es con votos, se mide con decibelios. Vinicius fue acogido ayer con menos alegr¨ªa en la primera muestra de aceptaci¨®n popular, el enunciado de los alineaciones. Cuando fue introducido por el speaker, su nombre fue repetido por la afici¨®n con claramente menos potencia que el Modric y Bellingham, los m¨¢s aclamados. Pero el 7 es avispado. Sali¨® tan activo que pr¨¢cticamente los ¨²nicos aplausos se los llev¨® ¨¦l hasta el Valverdazo. Tambi¨¦n los de Ancelotti, por c¨®mo apret¨® en defensa. Todos, arriba y abajo, vieron al Vini esperado. ¡°Su actitud es fant¨¢stica¡±, le alab¨® Carletto.

Una concentraci¨®n y determinaci¨®n que tuvo su reflejo en el juego del equipo. No s¨®lo en un golazo anulado con pol¨¦mica por fuera de juego de Endrick, es que Vini fue el que m¨¢s ocasiones de gol cre¨® para el Madrid (seis) y tambi¨¦n el que m¨¢s intent¨® involucrar a sus compa?eros a trav¨¦s de centros al ¨¢rea (ocho, igualado con Modric). Y el no va m¨¢s: sus cinco regates fueron m¨¢s que los que logr¨® el resto del equipo junto (Rodrygo dos, y Camavinga y Brahim uno por cabeza). Hiperactivo.

Lo de los regates, en el estilo de Vinicius, es una buena vara de medir sobre c¨®mo est¨¢ su f¨²tbol de encendido o no. Esos cinco dribles, todos ellos en lo que las estad¨ªsticas consideran zona peligrosa, van en l¨ªnea lo que comenz¨® a exhibir en el 1-2 contra el Arsenal pese al baj¨®n an¨ªmico colectivo. S¨ªntomas de aparici¨®n, reflejos contrarios a lo que se ve¨ªa cuando desaparec¨ªa. Por ejemplo s¨®lo consigui¨® uno en el Emirates, dos contra el Valencia, otros dos entre ambos euroderbis en octavos de la Champions... Vinicius se neg¨® desde el minuto 1 ante el Athletic a ser uno de los se?alados si la Liga se escapaba en este partido.

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Mbapp¨¦ est¨¢, por contra, en esa primera etapa que sufri¨® el Benzema m¨¢s g¨¦lido. Hab¨ªa goles, hab¨ªa jugadones, pero faltaba el punto de pasi¨®n que excita al estadio blanco. Es de Bernab¨¦uismo 1.0 y deber¨ªa impartirse en un cursillo r¨¢pido al fichar. Vinicius lo ha pillado al vuelo, Mbapp¨¦, por su bien, tiene que aprobar ese cursillo.

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