L¨ªo Vinicius-Xavi en la banda con toque en la cara del entrenador
El brasile?o recrimin¨® al cuarto ¨¢rbitro que no viese una posible falta de Ara¨²jo y el t¨¦cnico se entrometi¨® para reprochar sus protestas. Gil Manzano fue a poner paz.
Era el minuto 27: Vinicius ech¨® a correr por la banda izquierda, intentando ganar en velocidad a Ara¨²jo. El uruguayo le toc¨®, haciendo que cayese al suelo. Un contacto evidente, pero gris. Para Gil Manzano fue insuficiente para se?alar la falta, lo que desat¨® la ira del brasile?o, que m¨¢s all¨¢ de tomarla con al ¨¢rbitro principal, se gir¨® hacia el cuarto (a unos tres metros y con perfecta visibilidad de la escena).
Mientras el madridista recriminaba que no hubiese intervenido... se meti¨® Xavi. Y es que el t¨¦cnico del Bar?a estaba a apenas dos metros de la escena y no dud¨® en reprochar al brasile?o su actitud. Sus reiteradas protestas. ¡°No, no¡±, se le pudo leer en los labios, negando que aquello fuese falta. ¡°Es carga¡±, apunt¨®. Tras unos segundos hablando, el entrenador le agarr¨® de la cabeza por los lados y propin¨® un suave golpe en la cara. Muy leve, muy ostensible. Pero algo que dej¨® perplejo al jugador.
Sin tarjetas
Vinicius se gir¨® hacia Gil Manzano, con la mirada de quien pregunta si ha visto lo que acababa de suceder. Con la escena calent¨¢ndose cada vez m¨¢s, lleg¨® el silbato principal a poner paz. Separ¨® a ambos y dict¨® que continuase el partido, lo que oblig¨® al jugador a reubicarse en el campo y alejarse de Xavi. Una jugada que volvi¨® a evidenciar que un Cl¨¢sico siempre es un combate candente. Ninguno vio tarjeta, ni la cosa fue a mayores.
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