Veiga reina en la locura

El Celta gan¨® la batalla del v¨¦rtigo en el Villamar¨ªn para tomar aire en la clasificaci¨®n y tumbar las pretensiones de Champions de un Betis de cristal. El equipo de Carvalhal rein¨® en esa locura de ida y vuelta en la que Gabri Veiga volvi¨® a hacer magia. Apareci¨® con delicadeza para imponer su sello con un doblete que fue decisivo para tumbar a un equipo verdiblanco que tuvo en sus manos el amago de la sentencia antes de caerse bajo el embrujo de Aspas y la exaltaci¨®n de Luiz Felipe.

No hubo reservas en el inicio. Canales y Fekir tomaron los mandos de la posesi¨®n y el Celta se resguard¨® tratando de lanzarse a los espacios. Y tard¨® s¨®lo cinco minutos en cazar el primero. Con Mingueza sacando el bal¨®n con clase, con Iago Aspas lanzando a Carles P¨¦rez en profundidad y con ¨¦ste sirviendo a Larsen al ¨¢rea para que el noruego se adelantara a Pezzella y fulminara a Rui Silva con un remate cercano a la perfecci¨®n. La belleza de una contra letal.

El Villamar¨ªn despert¨® y pidi¨® al Betis que reaccionara. Casi respondi¨® Canales con un buen remate tras un c¨®rner que se estrell¨® en un defensor del Celta. En el siguiente saque de esquina, Luiz Felipe toc¨® hacia dentro para que Juanmi aplicara su instinto m¨¢s demoledor y batiera a Villar. Heli¨®polis ansiaba que el malague?o tuviera su pegada de vuelta. Tambi¨¦n Pellegrini, que le entregaba una titularidad cinco meses despu¨¦s. Le sent¨® bien el gol al equipo verdiblanco, que apret¨® en su presi¨®n para encontrar m¨¢s premio en sus intenciones. Su segundo golpe lleg¨® con una recuperaci¨®n alta merced a un error en la salida de bal¨®n de Aidoo. Juanmi apareci¨®, Guardado abri¨® a Borja Iglesias, ¨¦ste cedi¨® al toque para Canales y el c¨¢ntabro defini¨® con un contrapi¨¦ letal para Villar. Otro combinaci¨®n vertiginosa en un arranque de locura.

El Betis paus¨® el duelo. El Celta trat¨® de poner m¨¢s control a su endiablada verticalidad. Pero al equipo de Carvalhal le cost¨® esquivar esa presi¨®n en tres cuartos de los verdiblancos. Juanmi y Canales, a pierna cambiada y tirando diagonales constantes, daban al Betis alas imprevistas. Larsen centraba los focos del Celta: su fortaleza resultaba una pesadilla para Luiz Felipe y Pezzella, obligados casi siempre a anticipar o a cruzar los dedos. El peligro volvi¨® a llegar en el ¨¢rea del Celta con un pase endiablado de Canales que Miranda remat¨® sobre Villar. Del perd¨®n b¨¦tico a la respuesta celeste: De la Torre conect¨® con Gabri Veiga, ¨¦ste sorte¨® a Luiz Felipe y ejecut¨® una vaselina perfecta ante Rui Silva. Todo volv¨ªa a empezar.

Tras la reanudaci¨®n, Betis y Celta siguieron el¨¦ctricos. Canales volvi¨® a encontrar la luz en un centro diagonal para Miranda que termin¨® con un remate fallido de Juanmi. El Celta decidi¨® arriesgar m¨¢s, tocar m¨¢s, avanzar m¨¢s. El Betis pareci¨® precipitado. Y fue Gabri Veiga el que volvi¨® a desequilibrar la balanza con una llegada precisa para aprovechar un servicio de Larsen tras una genialidad al espacio de Iago Aspas.

La tensi¨®n pudo con los verdiblancos. Menos precisos en la asociaci¨®n. Menos incisivos entre espacios. Pellegrini tir¨® de Joaqu¨ªn y coloc¨® a Edgar en el eje para evitar m¨¢s desequilibrios. El Celta esper¨® su opci¨®n. Y lleg¨® con un saque de esquina que encontr¨® en su rechazo un remate de cabeza preciso de Aidoo ante el que nada pudo hacer Rui Silva. La eficacia celeste silenciaba el Villamar¨ªn.

Seferovic ya estaba sobre el campo y Ayoze entr¨® en escena para vivir su estreno en el Betis y en Primera. Hab¨ªa demasiado ¨ªmpetu en el Betis y el Celta supo manejar los tiempos y los espacios. Abner Vinicius err¨® lo infalible para acortar distancias y a falta de diez minutos el VAR advirti¨® una mano de ?scar para que Fekir recortara diferencias desde el punto de penalti. Si todo parec¨ªa una locura, el cierre a¨²n ten¨ªa m¨¢s invitaciones al v¨¦rtigo. El equipo de Pellegrini ech¨® el resto hasta que el descuento multiplic¨® los nervios y Luiz Felipe fue expulsado tras un lance con Iago Aspas. El Celta sobrevivi¨® concediendo otras dos opciones de gol a Edgar antes de un pitido final que llena de rabia al Betis y dispara las ansias de crecimiento de un Celta con una pegada de oro.