Una d¨¦cada de venta centralizada: de ¡°salvar al f¨²tbol¡± a la guerra ¡°ideol¨®gica¡± Real Madrid-LaLiga

Los clubes profesionales est¨¢n de aniversario. Se celebran diez a?os de lo que algunos consideran ¡°la salvaci¨®n del f¨²tbol¡±, pero de lo que tambi¨¦n supone el recrudecimiento de la guerra ¡°ideol¨®gica¡± entre LaLiga y el Real Madrid. El 30 de abril de 2015 entr¨® en vigor el Real Decreto 5/2015 para la venta centralizada de los derechos de televisi¨®n. Una herramienta que dota a LaLiga para vender la retransmisi¨®n de todos los equipos de Primera y Segunda Divisi¨®n de manera conjunta y de repartir los millones de una manera m¨¢s justa. Se pon¨ªa fin a la ¡°dictadura de los grandes clubes en el mercado¡± y de que los peque?os se quedaran con las ¡°migajas¡± de las televisiones. Una medida que permiti¨® crecer al campeonato e ingresar m¨¢s por las retransmisiones.

Pese a que la comercializaci¨®n conjunta de estos derechos ha llevado a que los ingresos por televisi¨®n crezcan un 117,9% en los ¨²ltimos diez a?os (de 844 a 1839,7 millones de euros), LaLiga se ha encontrado con un firme opositor: el Real Madrid, que era defensor de la venta individualizada aunque acab¨® accediendo a la colectiva. Florentino P¨¦rez y Javier Tebas escenifican a?o tras a?o su enemistad y filosof¨ªa del f¨²tbol totalmente opuesta. Una guerra en la que se acumula cerca de un centenar de demandas en los tribunales y duras acusaciones. Como las que realiz¨® el mandatario blanco en 2023 con motivo de la distinta interpretaci¨®n que hacen ambos sobre el RDL 5/2015, que ahora cumple diez a?os. ¡°Los derechos audiovisuales pertenecen a los clubes y se ceden a LaLiga. Desde que faltan dos minutos para el partido, hasta dos minutos despu¨¦s. Porque se entiende que los clubes pueden explotar previas, pospartidos... todo lo que no es expl¨ªcitamente el partido. Lo dice la ley. Pero LaLiga insiste en expropiarnos ese derecho¡±, afirm¨® Florentino. A lo que Tebas le replic¨® con la misma dureza: ¡°Lo que cuentas es todo al rev¨¦s. Aqu¨ª no hubo ninguna expropiaci¨®n al Real Madrid. Lo que intentabas era expropiar lo que, por sentencia firme, ya pertenec¨ªa a LaLiga y a todos los clubes. Esta es la verdad, aunque t¨² intentes disfrazarla¡±.

El enfrentamiento entre el Real Madrid y LaLiga, con la gran mayor¨ªa de los clubes respaldando a Tebas, cumple diez a?os y no apunta a tener una soluci¨®n a corto o medio plazo. Para tratar de entenderlo mejor, regresamos al pasado. Cuando la relaci¨®n entre ambas instituciones era cordial.

Una ¡°dictadura¡± audiovisual y un abismo financiero

V¨ªctor Mart¨ªn, actual jefe de gabinete de presidencia de LaLiga y ex director general del Numancia (1999-2020), y Patricio Vi?ayo, director general de Las Palmas, charlan con AS sobre este hito del f¨²tbol espa?ol, la venta centralizada. Ambos estuvieron presentes en el germen de este Decreto Ley y actualmente siguen defendiendo esta pol¨ªtica. ¡°Estuvimos en la primera l¨ªnea de trinchera. Hubo y hay un conflicto ideol¨®gico. Los dos adalides de la venta conjunta fueron Javier Tebas y Miguel Cardenal. Hay que reconoc¨¦rselo¡±, destaca Mart¨ªn. Con lo que coincide Vi?ayo: ¡°Ellos se encargaron de abolir el antiguo r¨¦gimen. En aquel contexto, las grandes marcas lo que hac¨ªan era menoscabar la capacidad de crecimiento de los clubes modestos, defendiendo la venta individualizada de los derechos audiovisuales. Era una dictadura de mercado. Los grandes clubes se impon¨ªan y los operadores se quedaban con migajas para ofrecer al resto. Era un status quo que les conven¨ªa, porque incrementaban las posibilidades de ganar el campeonato y las del resto decrec¨ªan¡±.

En aquel entonces, el f¨²tbol espa?ol se asomaba al abismo. Los clubes ten¨ªan 650M€ de deuda con la Administraci¨®n P¨²blica, m¨¢s del 50% de los equipos estaban en concurso de acreedores y a final de temporada se registraban m¨¢s de 150 denuncias por impagados a jugadores por valor de 90 de millones de euros. ¡°Me sent¨ªa avergonzado de que el f¨²tbol debiera 650 millones y lo dije en una Asamblea¡±, desvela V¨ªctor Mart¨ªn. Aunque lograron salvar esa situaci¨®n con el primer gran hito de LaLiga: implantar el control econ¨®mico. Un paso que permitir¨ªa acercarse a la venta centralizada. ¡°Hab¨ªa una situaci¨®n de marasmo financiero y ¨¦tico. La mitad de los clubes estaban en concurso de acreedores, hab¨ªa ama?os, violencia¡­ No ten¨ªamos demasiada legitimidad para demandar un cambio. Fue un proceso continuo, de hacer pedagog¨ªa y demostrar nuestra fuerza. Y de encontrar un secretario de Estado que tuviera la gallard¨ªa de apostar por arreglarlo¡±, sostiene el exdirectivo del Numancia.

Con la crisis financiera, la venta centralizada de los derechos audiovisuales se presentaba como un salvavidas. Los modestos defend¨ªan que no iban a bajar los ingresos de los grandes, si no que vendi¨¦ndolo todos juntos se aumentar¨ªa el precio. ¡°Hubo una ¨¦poca en la que hab¨ªa partidos entre dos equipos que ten¨ªan vendidos sus derechos con distintos operadores. Eso generaba incertidumbre en el mercado y llevaba a que no creciera a nivel nacional ni internacional. La incertidumbre alejaba la capacidad de explotaci¨®n. No se quer¨ªa tener la duda de si iban a poder explotar esos derechos pac¨ªficamente o no¡­¡±, explica Patricio Vi?ayo.

La ¡®secta¡¯ del G-30

Los clubes m¨¢s modestos de Primera y Segunda decidieron poner fin a la inestabilidad. Hab¨ªa que buscar la solvencia econ¨®mica y apostar por un nuevo modelo de manera unida. ¡°En ese contexto, en el que nosotros nos repart¨ªamos las migajas y el mercado no crec¨ªa, nace el G-30. Treinta equipos que nos vemos perjudicados de c¨®mo se distribuye el dinero de las televisiones. ?ramos un grupo con disciplina que demand¨¢bamos explotar los derechos audiovisuales como en la Premier, que desde los 90¡¯ lo hac¨ªan de manera conjunta y estaba dando r¨¦ditos¡±, explica V¨ªctor Mart¨ªn. Que prosigue: ¡°En ese G-30 busc¨¢bamos acercarnos a eso. Pero nos encontramos con la oposici¨®n de los doce clubes m¨¢s importantes de Espa?a, el llamado G-12, y ning¨²n apoyo en los ¨¢mbitos pol¨ªticos. El G-12 buscaba consolidar su posici¨®n de privilegio que en ese momento se daba¡±.

La mentalidad de los dos grupos fue determinante para que los 30 m¨¢s modestos acabaran ganando la batalla a los poderosos. Como as¨ª explica Vi?ayo: ¡°Gil Mar¨ªn me lleg¨® a decir en una ocasi¨®n que los del G-30 ¨¦ramos una secta sin todo lo peyorativo. Esto se traduce a que ¨¦ramos un grupo muy cohesionado de intereses coincidentes; mientras que el G-12 no. Ellos eran un grupo aspiracional. Nunca se hubieran puesto de acuerdo en un criterio de reparto, la mayor¨ªa aspiraban a acortar sus diferencias respecto a Real Madrid y Barcelona. Lo que se diera en beneficio de uno, ir¨ªa en detrimento del otro. Mientras que el G-30, que ¨¦ramos el lado m¨ªsero del f¨²tbol, est¨¢bamos de acuerdo en el peor de los acuerdos¡­ Ese ser¨ªa mejor que la situaci¨®n que est¨¢bamos viviendo¡±.

¡°Madrid y Bar?a llegaron a un conclusi¨®n conjunta. Les saldr¨ªa m¨¢s barato pactar con el lado m¨ªsero del f¨²tbol que con los aspiracionales¡±

Patricio Vi?ayo, director general de Las Palmas

Aunque la clave del triunfo del G-30 estuvo en atraer sorprendentemente a Real Madrid y Barcelona: ¡°Ambos, en un verano, llegaron a una conclusi¨®n conjunta. Puestos a ser equipos donantes, les saldr¨ªa m¨¢s barato pactar con el lado m¨ªsero del f¨²tbol que con los aspiracionales. Esa clase media-alta aspiraba a desbancarles. El car¨¢cter aspiracional es la amenaza que detectan Madrid y Bar?a. Un Atl¨¦tico, Valencia, Deportivo, Athletic, Villarreal¡­ Todas esas marcas aspiraban a ganar la Liga y eran mayor amenaza que los que aspiramos a permanecer en Primera. Entonces, la fuerza del G-12 se desinfl¨®¡±, apunta Vi?ayo. V¨ªctor Mart¨ªn a?ade: ¡°Hab¨ªa un c¨¢lculo pol¨ªtico. Ceden unos cinco millones para la ayuda al descenso a cambio de mantener lo fundamental: la explotaci¨®n individual. Los dos grandes clubes daban m¨¢s migajas para mantener el status quo. Aunque ese paso que dieron llev¨® a crear el G-35, que fue el germen de lo que paso el 30 de abril de 2015¡±.

De la lealtad al enfrentamiento

Pese al enfrentamiento actual, no fue el Real Madrid el que trat¨® de dinamitar la venta centralizada. ¡°El gran enemigo que tuvimos fue la Federaci¨®n. Intentaron por todos los medios que la titularidad de los derechos fueran suyos. Los conflictos fueron tremendos. Se produjeron situaciones¡­. anticonstitucionales. Luis Rubiales, entonces en AFE, fue el brazo armado de la RFEF y organiz¨® una huelga de futbolistas. El argumento fue tan burdo¡­ Utilizaron a los jugadores como arma arrojadiza contra Laliga¡±, recuerda V¨ªctor Mart¨ªn. Y a?ade Vi?ayo: ¡°Se les dijo a los futbolistas que si el Real Decreto se aprobaba, sus contratos ser¨ªan papel mojado¡­ Y no fue as¨ª. Cuando si se incrementaban los ingresos, el 50% de ellos con los a?os ir¨ªa para ellos¡±.

En cambio, la relaci¨®n entonces con el Real Madrid era diferente: ¡°Las conversaciones con ellos y el Barcelona fueron leales. Una relaci¨®n correcta. Hubo alguna diferencia puntual con el Valencia y el Atl¨¦tico, pero con ellos no las tuvimos. Est¨¢bamos muy cerca de Madrid y Bar?a. Cuando se empieza a modificar esa relaci¨®n es en la tramitaci¨®n parlamentaria. Se escenifica la ruptura en una Asamblea en Vila-Real. Desde 2010 hasta 2015 la relaci¨®n fue extraordinaria y de plena lealtad¡±, explica el actual jefe de presidencia de LaLiga. Y sigue: ¡°En la tramitaci¨®n, el Real Madrid empuj¨® y tension¨® la situaci¨®n para que recogiera demandas que ellos ten¨ªan. Lo de los dos minutos. Eso es un claro ejemplo. El Real Madrid con esa gran capacidad que tiene de generar y crear presi¨®n, buscar en cualquier medio ventajas, pues se empieza a romper esa relaci¨®n¡±. Una ruptura pese a que los clubes accedieron a un reparto de los derechos de TV m¨¢s laxo que el de la Premier, en el que el que m¨¢s gana no puede cobrar m¨¢s del doble que el ¨²ltimo. Mientras que en LaLiga la diferencia se estableci¨® en 3,5. ¡°En toda negociaciones siempre hay una parte de conquista y otra de cesi¨®n¡±, explica el director general de Las Palmas.

Pero hubo otra conquista, como bien explica Vi?ayo: ¡°En todas las revoluciones hay un nexo en com¨²n. En la Revoluci¨®n francesa est¨¢ el lema de libertad, igualdad y fraternidad; en la Guerra de Sucesi¨®n se abole la esclavitud¡­ Hay un axioma de un hombre un voto. Y eso es lo que ha conseguido LaLiga. Se la empodera y se crea un contexto en el que las grandes marcas ya no mandan ni en el mercado ni en la instituci¨®n. Es igual importante el voto de cualquier club, por muy modesto que sea su presupuesto¡±. Y a?ade: ¡°Si hay una inmensa mayor¨ªa que creemos que lo beneficioso es el actual modelo, hay que ser respetuoso. No va en nuestro ¨¢nimo ir en contra del Real Madrid, por mucho que haya judicializado las iniciativas m¨¢s importantes para hacer crecer el sector¡±. A lo que se suma Mart¨ªn: ¡°Somos 42 clubes. Las relaciones no son tan cercanas como nos gustar¨ªa con el Madrid. Es evidente. Pero el resto siguen apoyando este modelo de Liga¡±.

En esa defensa de este empoderamiento de LaLiga, los clubes apuestan por Tebas. As¨ª lo confirma V¨ªctor Mart¨ªn, que dej¨® el Numancia para seguir defiende este modelo de f¨²tbol desde LaLiga: ¡°La personalidad de Javier es determinante. Aglutina, lidera y est¨¢ legitimado. Tiene esa posibilidad de enfrentarse a un club enorme como es el Madrid. Un club que impone agendas¡±. Algo con lo que coincide Vi?ayo, director general de Las Palmas: ¡°?Seduce m¨¢s el que impone o el que convence? Lo que defendemos es de una l¨®gica tan aplastante que ruboriza tener que reivindicarlo. El Madrid no cobra menos que antes, no hay ning¨²n perjuicio para los grandes y hay un gran beneficio para los que est¨¢bamos ahogados por el ansia del que tiene amasar una situaci¨®n de privilegio. Como dir¨ªa mi presidente, Tebas no es perfecto, pero si no existiera habr¨ªa que inventarlo¡±.

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En la actual situaci¨®n de enfrentamiento, V¨ªctor Mart¨ªn es muy contundente ante las acusaciones de expropiaci¨®n del Real Madrid: ¡°Que nos acusen de lo que quieran, que vayan a los tribunales y lo ganen¡­ No podemos comprarle la agenda al Real Madrid. De ninguna manera. Aqu¨ª va a haber una Asamblea donde se va a votar y escrutar la gesti¨®n de este a?o. Yo no s¨¦ qu¨¦ va a votar cada equipo. El Madrid tiene tanto altavoz, pero un club no puede marcar la trayectoria de toda una Liga. Aqu¨ª nos sale el gen G-30¡±. Y avisa: ¡°El Real Decreto salv¨® al f¨²tbol espa?ol. No sabes las presiones que hubo¡­ Estos derechos que hemos conseguido, ese empoderamiento, no es una conquista eterna. Hay fuerzas que no creen en el empoderamiento de LaLiga, en lo que s¨ª creemos los miembros de lo que nos llamaron la secta. Habr¨¢ momentos en los que las tensiones vuelvan a surgir. Tenemos que defenderlo d¨ªa a d¨ªa¡±. Un hito que cumple diez a?os y que los clubes, como afirman, est¨¢n dispuestos a pelear por ello.

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