Un zombi rumbo a LaLiga

El Barcelona ganar¨¢ LaLiga como los n¨¢ufragos llegan a la costa aferrados a una tabla de madera rid¨ªculay que aterroriza cualquier ola o una pescadilla tama?o medio, que les parece un tibur¨®n. Aferrado a la nada, el Bar?a volvi¨® a dejar su porter¨ªa a cero y logr¨® un empate que le deja a 11 puntos de distancia del Real Madrid a falta de nueve jornadas. Unos n¨²meros estupendos y unas sensaciones putrefactas para un conjunto que desde hace tres semanas ha perdido el norte. Xavi est¨¢ resistiendo el ataque a la espera de que suene una corneta lejana y la caballer¨ªa (De Jong, Demb¨¦l¨¦, Pedri y Christensen) acudan al rescate.

El tiempo y la inercia pueden darle LaLiga al Barcelona, pero el equipo blaugrana es un muerto viviente. Eso s¨ª, que camina determinado a trav¨¦s del cementerio de la tabla clasificatoria a su objetivo. Como Xavi ya dijo en la previa que no era momento para hacer pruebas y de seguir confiando en los no vivos que a trompicones van acerc¨¢ndose al campeonato mientras tropiezan con algunas l¨¢pidas y se van dejando jirones de ropa, el equipo que present¨® el Bar?a fue el de siempre con la novedad t¨¢ctica de poner a Balde de extremo. Una medida que, si me perdonan, no es novedad, porque ya la us¨® durante su inter¨ªn Sergi Barjuan. Y le cayeron palos por todas partes. Unos palos similares a los que le estar¨ªan cayendo a Koeman si su equipo hubiera perpetrado una primera parte como el monumento al patad¨®n que ofreci¨® el Barcelona.

La primera ocasi¨®n de gol del Bar?a en el primer tiempo no naci¨® del pregonado ¡°ocho contra seis¡± que se predica en la sala de prensa ni de la b¨²squeda del tercer hombre. Ni siquiera de la insistencia en el modelo intocable. Sali¨® de una jugada que es monumento nacional del Estadio Municipal de Las Llanas, campo que acoge con orgullo al Sestao River y que se resume en patad¨®n del portero y que la pille el delantero.

Coincidiremos que es un recurso a utilizar en ocasiones, pero ¨²ltimamente se ha convertido en el libreto de un Bar?a que aspira renovarse. De hecho, la renovaci¨®n de Sergi Roberto, la oferta a Busquets para que siga, la titularidad de Alba y el ansia del retorno de Messi son un homenaje al entusiasmo en este sentido. Renovarse o morir, dicen. Falta saber si los zombis est¨¢n vivos, muertos o renovados.

A lo que ¨ªbamos, que con la ilusi¨®n de las renovaciones me estaba perdiendo: la gran ocasi¨®n del Bar?a naci¨® de un balonazo de Ter Stegen que se comi¨® el central del Getafe y cay¨® en pies de Raphinha, que chut¨® al palo, el rechace, lo recogi¨® Balde, que es lateral pero jugaba de extremo, y su disparo fue el de un defensa, no el de un delantero. Con todo a favor, volvi¨® a disparar al palo.

Retoques

Antes de este jugad¨®n, que podr¨ªa ense?arse en las mejores escuelas de b¨¦isbol, el t¨¦cnico del Bar?a tuvo que retocar la alineaci¨®n porque otra de las promesas de futuro recientemente renovadas, Sergi Roberto, se rompi¨® al cuarto de hora y Eric Garc¨ªa sali¨® para ponerse de lateral, pero visto el ¨¦xito, al ratito pas¨® al centro y Kound¨¦ volvi¨® al lateral. No se not¨® mucho el cambio porque el franc¨¦s sigui¨® igual de nefasto en ambas posiciones. En eso, Kound¨¦ est¨¢ siendo un jugador muy fiable en este tramo de final de temporada. No pasa del ¡°necesita mejorar¡± lo pongan donde lo pongan.

En medio de la nada futbol¨ªstica, del purgatorio del bal¨®n, de un ejercicio de supervivencia entre dos n¨¢ufragos en una balsa que empezaron a ver que lo del empate no les penalizaba demasiado vista la situaci¨®n, el partido se fue pudriendo bajo el sol.

A falta de media hora, Xavi decidi¨® sacar la artiller¨ªa y puso sobre el c¨¦sped a Ansu y Ferran. Ambos aportaron lo habitual, entre nada y muy poco, mientras Alarc¨®n y Aleix Garrido segu¨ªan creando musgo en el banquillo. Al menos viajaron en tren a Madrid. Una experiencia que se llevan los chavales.