Goles y pizarra en la tarde del portero delantero
El Atl¨¦tico golea al Numancia en su primer amistoso, en Burgo de Osma, en 52¡ä, entre pancartas en contra de Cristiano y un final protagonizado por Gomis, meta del filial.
Comenz¨® el Atleti un tanto achuchado por el Numancia y Oblak sacando el guante para demostrar que su lado humano qued¨® atr¨¢s, en las fotos del a?o pasado. Obligado. A los pies de una pancarta en may¨²sculas que gritaba, se lanz¨® Savic al suelo para cortar un pase... con palmeo de bal¨®n. Penalti. Minuto dos y Oblak se ve¨ªa solo ante un francotirador: Carrillo. San Jan le ley¨® la intenci¨®n. Parada. Y a seguir jugando, que all¨ª nada hab¨ªa pasado. O s¨ª. La pancarta segu¨ªa gritando detr¨¢s. CR7 not welcome.
RESUMEN
ATL?TICO, 4: Oblak (Grbic, 46'); Wass (Sergio, 46'), Savic (Witsel, 46), Gim¨¦nez (Hermoso, 46', Gomis, 76'), Reinildo (Lodi, 46'), Carrasco (Riquelme, 46'); De Paul (Llorente, 46'), Kondogbia (Koke, 46'), Lemar (Sa¨²l, 46'); Correa (Griezmann, 46') y Morata (Cunha, 46').
GOLES
0-1 (8¡¯): Lemar, latigazo por la escuadra con la pierna izquierda.
0-2 (32¡¯): Correa remata con la izquierda, en el segundo palo, un c¨®rner.
0-3 (46+¡¯): Kondogbia, que desvi¨® un remate de De Paul en un c¨®rner.
0-4 (52¡¯): Cunha, a la salida de un c¨®rner.??
?RBITRO: Mallo Fern¨¢ndez.?
Estadio Municipal de Burgo de Osma, 4.000 espectadores.
Saltaba el Atl¨¦tico con once de gala, ordenado en l¨ªnea de cuatro en defensa y de cinco al mirar hacia Gil, y la camiseta picassiana, las rayas con curva, en Burgo de Osma, primer partido de la pretemporada. Segu¨ªa el duelo de ida y vuelta, cuando Lemar se sopl¨® la bota. Ayud¨® Morata, que no es que se haya quedado ahora, es que quiere quedarse luego. Y llen¨® la hierba de desmarques para ejercer de faro. Cedi¨® Correa, enga?¨® ?lvaro, apareci¨® el bot¨ªn del franc¨¦s convertido en fusil. Zapatazo y a la escuadra. El Numancia pod¨ªa seguir apretando pero Simeone ya sudaba menos.
Un Numancia que parec¨ªa como m¨¢s rodado a pesar de estrenarse tambi¨¦n. Sin pelotazos y ambici¨®n de combinar. El calor se palpaba, ritmo bajo, piernas pesadas, c¨¢nticos al Cholo (Simeone, Simeone, escuchad a la afici¨®n...) en la pausa de hidrataci¨®n. Nada m¨¢s volver ah¨ª estaba Correa, que pide su sitio, sus minutos y sus merecidos galones como mejor sabe y le sale: con goles. El c¨®rner con el que se reanud¨® el partido lo esper¨® en el segundo palo. Dio dos pasos hacia atr¨¢s y sac¨® la pierna para golpear la pelota y estamparla en la red. La orden de Simeone fue clara: ¡°Adelante, adelante¡±. Lo de los pasos atr¨¢s que se quedara con las fotos del Oblak m¨¢s humano. Atr¨¢s, al fondo de la temporada pasada. Como la descomposici¨®n cuando tocaba llevar la pizarra a la hierba. Antes del descanso, otra muesca: Kondogbia desvi¨® a la red un remate de De Paul en otro c¨®rner. Gol. La pancarta ya estaba guardada pero ahora gritaban los futbolistas desde el campo. Los goles ya los ponen ellos. 0-3 en 45¡ä.
Cuando el partido regres¨®, el Numancia ten¨ªa la misma estructura pero con once hombres distintos. El Atleti igual. Era el momento de ver a Witsel (como central, por cierto, sin Nehu¨¦n, en Udine, y sin Felipe), a Koke, a Cunha y a Grizi. Busc¨® el ¨²ltimo el gol desde que pis¨® el verde, sin fortuna de nuevo; lo encontr¨® el pen¨²ltimo nada m¨¢s rozar una pelota. Luce el brasile?o sus nuevos galones anudados al ¡®9¡ä en su espalda y su hambre, intacta.
Gomis. ?O era Felipe?
Entre brillos de Riquelme (qu¨¦ futbolista, qu¨¦ bueno es), la tarde fue cayendo y llenando de sombras la hierba. Ya no era el calor, era el resultado, que aplatanaba, tanto gol llenando el marcador. Un hincha aprovechaba un c¨®rner para hacerse un selfie con Koke, mientras Simeone frenaba a Hermoso, que quer¨ªa volver a jugar a pesar de haberse torcido el tobillo. Tras un rato con diez, ya hab¨ªa utilizado el t¨¦cnico a todos sus jugadores all¨ª, sali¨® Gomis, tercer portero, meta del B, quit¨¢ndose las vendas de las manos. Llevaba la camiseta del ausente Felipe..., para ocupar la punta de ataque. Tan cerca del gol pero de la otra manera. Porque pase lo que pase, las pizarras, las pancartas altas o los goles y no, hay algo innegable: el Atleti sigue siendo ¨²nico.