Un penalti con aroma a Zorrilla para crecer y empeque?ecer
Caro detuvo la ¨²ltima jornada un penalti a Sekou, con quien comparti¨® vestuario en el Real Valladolid, a quien todav¨ªa pertenece el punta.
El f¨²tbol tiene estas cosas, pensar¨ªa el domingo todo aquel que vio frente a frente a Jos¨¦ Antonio Caro y a Sekou Gassama. Ambos con pasado en el Real Valladolid, de hecho, el delantero todav¨ªa aparentemente con futuro, por lo menos con base en su contrato, se vieron las caras en esa suerte suprema del balompi¨¦ que es un penalti. Los once pasos que les separaban son un mundo en sensaciones a d¨ªa de hoy y lo fueron, tras el silbatazo del ¨¢rbitro, en la resoluci¨®n.
Corr¨ªa el minuto 41 cuando ¡®la pantera¡¯ se perfil¨® de derechas antes de dar dos pasos para disparar con la izquierda. Pero su excompa?ero adivin¨® la trayectoria, se venci¨® a su zurda y, abajo, agrand¨¢ndose, ataj¨® la bola. Su duende mantuvo as¨ª el empate a cero, uno que campe¨® en el marcador despu¨¦s de la anulaci¨®n de un gol al Racing y hasta que Curro S¨¢nchez marc¨® su tercer gol de la temporada, que a la postre otorgar¨ªa un nuevo triunfo al Burgos.
De esta manera, ¡®Churripi¡¯ alarg¨® el mal fario del atacante, a quien la fortuna no le est¨¢ acompa?ando en una nueva cesi¨®n. No en vano, apenas ha conseguido ver puerta en una ocasi¨®n, frente al Sporting hace m¨¢s de dos meses. Desde entonces, ha vuelto a sufrir alguna de sus habituales lesiones, que hac¨ªan que, precisamente ante Caro, reapareciera despu¨¦s de m¨¢s de un mes ausente de los terrenos de juego.
Y es que, casi dos a?os despu¨¦s de firmar como blanquivioleta, Sekou sigue empeque?ecido y lejos de ser aquel que acapar¨® ofertas al vincularse al Real Valladolid por segunda vez, sin encontrar una versi¨®n optimizada y sin hallar continuidad, en buena medida, por razones f¨ªsicas. Si la temporada pasada jug¨® un partido antes de marcharse cedido al M¨¢laga, esta se repiti¨® el escenario con destino a Santander. Sin embargo, aunque todav¨ªa tiene tiempo por delante, el ¨²nico tanto marcado se hace escaso mirando a un futuro vallisoletano.