Sin certezas con Alaba

Si tiene la sensaci¨®n de que sabe poco de Alaba, no se extra?e. No es el ¨²nico, ni mucho menos. Porque hasta los m¨¢s cercanos al jugador saben poco. Y no es por desidia, sino porque se ha decidido que as¨ª sea. David vive en un carpe diem. Trabajar cada d¨ªa sin presi¨®n, sin fechas. Pasos cortos, pero firmes. Con la ilusi¨®n intacta, pero sin prisas. La prioridad es lograr un regreso al 200%, aunque eso suponga tardar m¨¢s. Porque su lesi¨®n ¨Cy este es el quid de la cuesti¨®n¨C fue mucho m¨¢s grave de lo que muchos se imaginan. Rotura de cruzado con afectaci¨®n a menisco y algunos tendones. Un destrozo. Es por eso que existen dudas en torno a c¨®mo volver¨¢. Si podr¨¢ ser el mismo. Y cu¨¢ndo.

Todas las partes optan por el optimismo. Por ver el vaso medio lleno y pensar que, por supuesto, seguir¨¢ siendo Alaba. Pero el runr¨²n es inevitable. Se rompi¨® el cruzado de la rodilla izquierda el 17 de diciembre de 2023, en un mal gesto frente al Villarreal. Las pruebas certificaron lo peor: tambi¨¦n ten¨ªa afectado el menisco (por ejemplo, la rotura de Militao fue limpia, lo que permiti¨® acortar plazos; en el caso de Courtois tambi¨¦n qued¨® afectado el menisco, pero un portero se puede permitir, por lo general, regresar antes) y varios tendones. El jugador solicit¨® operarse en Innsbruck, poni¨¦ndose en manos del doctor Christian Fink, una eminencia. Y el club acept¨®.

Una segunda operaci¨®n

La intervenci¨®n fue un ¨¦xito, dando el preg¨®n al inevitable infierno de la rehabilitaci¨®n. Lenta y muy dolorosa. Alaba ha estado viajando a Innsbruck de manera mensual, a veces cada 2-3 semanas, para que el equipo de Fink supervisase que todo iba seg¨²n lo previsto. El mismo que, en torno a mayo, encendi¨® la alerta amarilla: tal vez llamarlo ¡®reca¨ªda¡¯ es excesivo, pero se detect¨® que el funcionamiento de la zona no estaba yendo como deb¨ªa. Estaba teniendo problemas para flexionar del todo y para subir escalones, por ejemplo. As¨ª que se le someti¨® a una segunda operaci¨®n. M¨¢s peque?a, pero que supondr¨ªa un nuevo retraso.

Y 255 d¨ªas sin correr

Para que se hagan una idea, las estimaciones m¨¦dicas apuntan a que, tras una rotura de cruzado, se vuelve a correr a los 100-120 d¨ªas. A veces, incluso un poco antes, en torno a los 90. Cada caso es un mundo, pero esa es la media. Pues Alaba no empez¨® a trotar hasta 255 d¨ªas despu¨¦s de la lesi¨®n: sucedi¨® el pasado 28 de agosto. Minutos antes de que Ancelotti dijese en rueda de prensa ¡°todo va muy bien, pero debemos ser pacientes con ¨¦l; eso es importante¡±. Transparente.

Noviembre... pero sin presi¨®n

Todas las partes comparten que lo m¨¢s importante es no meter presi¨®n. Ni hablar de fechas, ni fijar expectativas, ni nada por el estilo. Calma. Trabajo diario, recuperarse al 200% y cuando sea, ser¨¢. Porque la lesi¨®n de Alaba ha sido muy compleja y, en un jugador de 32 a?os, una reca¨ªda ser¨ªa un varapalo may¨²sculo. Fuentes del club deslizan que esperan a Alaba de vuelta en torno a noviembre, pero dejan claro que no ponen la mano en el fuego. Porque si llegado ese momento se considera que debe esperarse m¨¢s, se har¨¢. Sin complejos ni remordimientos. Y as¨ª, de manera indefinida.

Es por eso que aparecen dos cuestiones. La primera: ?Un jugador que sufre una rotura tan severa, puede volver a ser el de antes? Pues regresando a lo previo: convive el runr¨²n de no poder asegurarlo, con la decisi¨®n de querer ver el vaso medio lleno. Carpe diem. Pero s¨ª, dentro del club tambi¨¦n existe la inquietud de c¨®mo volver¨¢. Es inevitable. Y la segunda: ?Cu¨¢ndo podr¨¢ contar Ancelotti con ¨¦l? Las estimaciones apuntan a noviembre, pero sin presiones. Alaba va a superar los 270 d¨ªas sin golpear un bal¨®n de f¨²tbol. Calma y prudencia. El Madrid necesita centrales, pero sabe que David es un caso muy particular. Alguien a quien se espera, pero sin saber exactamente cu¨¢ndo, ni c¨®mo. Una figura, ahora mismo, sin certezas.