Se cumplen diez a?os de la aprobaci¨®n de la reforma del Camp Nou
El Espai Bar?a tuvo el respaldo del 72% de los socios que votaron en el refer¨¦ndum. ¡°Hemos ido muy tarde porque tenemos un entorno autodestructivo¡±, lamenta el ex director del ¨¢rea social, Pere Jans¨¤, sobre la lentitud que ha marcado el proyecto
Hoy hace exactamente diez a?os, un 5 de abril de 2014, los socios del FC Barcelona fueron llamados a las urnas para votar en refer¨¦ndum si aprobaban la remodelaci¨®n del Camp Nou, su casa desde septiembre de 1957. Un hogar que se hab¨ªa ido deteriorando con el paso de los a?os y que no permit¨ªa una explotaci¨®n adecuada a los nuevos tiempos en los que a instalaciones deportivas se refiere y que a d¨ªa de hoy es imprescindible para poder cuadrar los n¨²meros.
Estaban convocados m¨¢s de 118.000 socios y solo votaron 37.535 personas. Las papeletas con el ¡®s¨ª¡¯ sumaron 27.161, se contabilizaron 9.589 con el ¡®no¡¯ y hubo 751 votos en blanco y 34 votos fueron nulos. ¡°Guardo un gran recuerdo de ese refer¨¦ndum. Desde un punto de vista organizativo, porque era la primera vez que sac¨¢bamos del estadio los puntos de votaci¨®n, a nivel institucional porque existieron todas las garant¨ªas y garantizamos toda la informaci¨®n a los socios. Hubo democracia y una transparencia muy grande. Y, como tercer punto, dir¨ªa que nosotros hicimos un proyecto que a nivel financiero se pod¨ªa abordar sin problemas. Era muy solvente¡±, recuerda para AS, Pere Jans¨¤, ex director del ?rea Social del club.
El ex ejecutivo del FC Barcelona explica, adem¨¢s, que para esa junta directiva esa consulta a los socios era una manera de ratificarlos. ¡°Rosell hab¨ªa dimitido en enero y est¨¢bamos un poco en falso. Esa votaci¨®n fue como un aval para Josep Maria Bartomeu, que lo reemplaz¨® en la presidencia¡±.
Diez a?os despu¨¦s, el Espai Bar?a parece que ya ha cogido la velocidad de crucero deseada. Hace meses que las gr¨²as de Limak trabajan a destajo en el Camp Nou porque el reto, muy dif¨ªcil, es que el equipo vuelva a jugar en el estadio en noviembre de este a?o. Eso s¨ª, no hay que olvidar que las obras no empezaron hasta diciembre de 2022, cuando inicialmente estaba previsto que lo hicieran en 2017.
Pere Jans¨¤ tiene un diagn¨®stico muy claro, y triste, del por qu¨¦ del retraso y la lentitud en el proyecto. ¡°Hemos ido muy tarde porque tenemos un entorno autodestructivo. Pasa lo mismo en la sociedad catalana. Nos disparamos en el pie. En el 2015 ganamos el triplete y en 2016 Bartomeu tuvo que someterse a una moci¨®n de confianza en la Asamblea de Compromisarios. Con la situaci¨®n de inestabilidad que se cre¨® no se pod¨ªa avanzar con el Espai Bar?a. Perdimos unos a?os preciosos. La oposici¨®n solo se dedic¨® a atacarnos y a debilitar a la junta. Por eso vamos tarde con el estadio. Somos el ¨²nico gran club europeo con un estadio viejo. Es una pena y un problema que tenemos los catalanes y los barcelonistas. Siempre estamos divididos y no podemos ir juntos en nada¡±, lamenta.
Adem¨¢s del retraso en las obras, tambi¨¦n se ha encarecido much¨ªsimo el proyecto. La directiva actual mantiene que las previsiones de la anterior no eran para nada realistas. Hay que recordar que el presupuesto inicial del proyecto eran 600 millones de euros. 200 sal¨ªan de la propia explotaci¨®n del Espai Bar?a, 200 m¨¢s de un cr¨¦dito bancario y los otros 200 con la venta del nombre del estadio (¡®title rights¡¯). ¡°Goldman Sachs era avalador. Era un proyecto muy sostenible. Al final lo tuvimos que actualizar y con algunos cambios lleg¨® a 815¡å, afirma Jans¨¤. Al final, la obra llegar¨¢ a los 1.500 millones de euros, la financiaci¨®n m¨¢xima permitida tal y como aprobaron los socios del club en otro refer¨¦ndum.