Sa¨²l se entrena en su sitio, pero...
Pero no ha entrado en los planes ¡®titulares¡¯ del Cholo en ninguno de los entrenamientos en la pretemporada.
Es lunes por la tarde en Los ?ngeles de San Rafael. El Atl¨¦tico hace unas horas que aparc¨® su autob¨²s frente al Hotel Sierra Segovia para comenzar su estad¨ªa de dos semanas. Campo de f¨²tbol. Simeone comienza a repartir petos entre sus 29 soldados (27 m¨¢s bien en ese momento, Felipe y Jo?o ya est¨¢n bajo ese reparto de cargas que en realidad son molestias). Dos onces se definen. Tres futbolistas se quedan en la banda. Uno es Manu S¨¢nchez. Otro, Riquelme. El ¨²ltimo, Sa¨²l ?¨ªguez (27 a?os). Un Sa¨²l que vuelve al lugar donde ha vivido todas las pretemporadas de su vida despu¨¦s de haberse ido un a?o cedido al Chelsea. Una cesi¨®n que no sali¨® como esperaba. Poco m¨¢s de 1.200 minutos, 475¡ä en la Premier. Pas¨® fr¨ªo, vio llover mucho, a?or¨® m¨¢s.
Desde el club y el vestuario destacan el talante y la actitud con la que ha regresado. Absolutamente humilde, absolutamente dispuesto a quedarse, absolutamente consciente de que debe volver a ganarse esos galones que ten¨ªa cuando se fue. Porque cuando se fue, Sa¨²l llevaba dos a?os jugando a un nivel inferior del que se esperaba, del que una vez alcanz¨®, pero cuando se fue a¨²n era, con Koke, el futbolista de campo con m¨¢s minutos para el Cholo (4.246¡ä en la 2019-20; 2.673¡ä en la 2020-21). Era agosto cuando lo hizo, d¨ªa 31, el fax en el ¡®deadline¡¯. Griezmann de vuelta, De Jong al Bar?a, Sa¨²l al Chelsea. Esa misma madrugada, cuando todo ya era oficial, el futbolista conced¨ªa una entrevista a Ibai Llanos en su canal de Twitch en la que, se notaba, quer¨ªa despedirse de la afici¨®n de ese equipo cuyo escudo lleva tatuado en el brazo, el Atleti, y en la que pronunci¨® una frase que le perseguir¨¢ siempre. ¡°Ped¨ª entrenar en mi posici¨®n y Simeone y Miguel ?ngel pensaron que era mejor que me fuera¡±. Esa era la principal raz¨®n por la que se iba. Se entrenaba fuera de su sitio, en ese lateral al que comenz¨® a viajar cuando Filipe Luis se fue (2019), pero jugaba: 200¡ä en los primeros tres partidos de Liga disputados por el Atl¨¦tico antes de su marcha a Inglaterra. Siempre atr¨¢s, por cierto; siempre como carrilero, en efecto.
En Inglaterra comenz¨® jugando all¨¢ donde es nativo, el centro del campo donde luce su zancada y su f¨²tbol. Primer partido posible nada m¨¢s llegar y titular ante el Aston Villa. La felicidad le dur¨® s¨®lo 45¡ä, aquellos primeros. Perdi¨® un bal¨®n en la zona del campo donde los mediocentros no deben perderlos, Tuchel torci¨® el gesto y lo envi¨® a la ducha tras el descanso. All¨¢ enmoheci¨®. Los cinco partidos que siguieron a cero, el sexto, dos minutos. Sa¨²l terminar¨ªa jugando en la Premier en el lugar aquel del que hu¨ªa, el lateral. Una posici¨®n que en el Atleti, en los d¨ªas de pretemporada que lleva este verano, no ha catado, siempre entren¨¢ndose en el sitio donde m¨¢s c¨®modo se siente, el mediocentro... Pero ?qu¨¦ es mejor, entrenarse all¨¢ donde no es tu sitio y jugar o hacerlo donde s¨ª y ver pasar los partidos ante tus ojos, desde el banquillo?
Koke, Lemar, Reinildo, Hermoso y Lodi por delante
El Sa¨²l que ha vuelto no ha pasado en ning¨²n momento por el lateral, pero siempre ha visto el once titular, ese al que le falta petos, o desde la distancia de los banquillos, esos primeros minutos en el entrenamiento del lunes por la tarde en San Rafael, o desde la distancia del ¡®no titular¡¯. Los del once son otros. Y se fue a Londres, perdi¨® la silla. En su lugar, ese que ¨¦l le gusta en el medio, est¨¢ Koke cuando el equipo se ordena 5-3-2 o est¨¢ Lemar por delante. Ni siquiera en el lateral, all¨¢ donde entrenaba y al final jugaba, aunque no le gustara, est¨¢ Reinildo, est¨¢ Hermoso, est¨¢ Lodi. Sa¨²l busca su sitio. Ser¨¢ la segunda vez. La primera fue casi reci¨¦n aterrizado en el primer equipo, tras la lesi¨®n de Tiago Mendes que le concedi¨® la oportunidad de luchar por ser titular y hacerse un futbolista fundamental para Simeone. Entonces lo logr¨®. La actitud para ello ahora est¨¢ siendo la mejor. El a?o en Inglaterra le ha mostrado, quiz¨¢, cu¨¢l era en realidad la respuesta correcta.