RdT resucita el sue?o del EuroRayo

Y no estaba muerto. No. No. De Tom¨¢s a¨²n tiene mucho que decir, mucho que marcar, porque su Rayo todav¨ªa tiene mucho por lo que pelear. Puede y quiere hacer historia. El barrio lo ans¨ªa y el equipo lo sabe. Era el momento propicio para que el delantero madrile?o se sacudiera el gafe, la frustraci¨®n... los fantasmas que le han acompa?ado desde su marcha del Espanyol. RdT se estren¨® cuando los suyos m¨¢s le necesitaban y celebr¨® con desenfreno su reencuentro con el gol 355 d¨ªas despu¨¦s. No era para menos. Abri¨® el marcador con un cabezazo, que secund¨® Camello, autor del 2-0. Sergio Le¨®n recort¨® distancias gracias al bal¨®n parado, pero la suerte estaba echada. La p¨®lvora de la Franja prende el sue?o europeo, una s¨¦ptima plaza que ahora ocupa el Girona, con un punto m¨¢s. Retumba de nuevo en Vallecas eso de: ¡®El a?o que viene Rayo-Liverpool¡¯. Si el barrio sue?a, las pesadillas llegan al Pucela. No cae en descenso, aunque tiene el abismo a sus pies. A un punto.

El Valladolid llev¨® la voz cantante en los primeros acordes del partido, pero Dimitrievski desbarat¨® con facilidad un cabezazo de Larin y un libre directo lanzado por Monchu. Lo intentaron en otro bal¨®n parado, aunque Escudero mand¨® fuera un c¨®rner. Los visitantes demostraban m¨¢s intensidad, m¨¢s decibelios, m¨¢s necesidad. Dur¨® lo que dur¨®. Hasta que Isi despert¨® a los suyos, con un zurdazo que despej¨® de pu?os de Masip, quien tapon¨® ¡ªacto seguido¡ª el rechace que hab¨ªa cazado ?lvaro. Los extremos dieron alas al Rayo, mucho m¨¢s reconocible con los espacios que se iban abriendo. ?lvaro prob¨® al cancerbero blanquivioleta a la media vuelta y Mumin insisti¨® con una chilena que se perdi¨® por encima del larguero para delirio de la grada. La misma que dedic¨® un cari?oso aplauso a Luis P¨¦rez, cuando tuvo que abandonar el verde en camilla por una lesi¨®n muscular.

Pezzolano y los suyos pidieron penalti por una mano de RdT, que ni ¨¢rbitro ni VAR consideraron punible. La intensidad de la Franja se un¨ªa a la frustraci¨®n vallisoletana y las interrupciones eran la t¨®nica dominante. Mucho ruido, pocas nueces. ?lvaro cruz¨® demasiado un disparo, servido por RdT y el t¨¦cnico visitante decidi¨® mover ficha y cambiar el sistema, adelantando a Hongla y dejando atr¨¢s a cuatro defensas. El asedio vallecano continuaba, pero sus llegadas resultaron est¨¦riles, gracias entre otros a Javi S¨¢nchez. El 0-0 era el silencio m¨¢s absoluto para dos contendientes que necesitaban afinar.

Tras el descanso, el Rayo volv¨ªa sobre los deberes pendientes. La tuvo RdT y la dirigi¨® demasiado alta. Sigui¨® erre que erre y RdT descorch¨® su tercera etapa. ?Por fin! No marcaba desde el pasado 14 de mayo de 2022, contra el Valencia, cuando vest¨ªa la camiseta del Espanyol. ?lvaro le puso un centro medido a la cabeza y el delantero la pic¨® para alumbrar el 1-0. Vallecas rugi¨® con su estrella, que por fin brillaba. Sin embargo, al delirio le acompa?¨® el susto. Los franjirrojos son de complicarse la vida y casi lo hacen por un mal despeje de Mumin que dej¨® solo a Larin ante Dimitrievski y ¨¦ste tir¨® de reflejos para dejar el marcador como estaba. El central volvi¨® a fallar con otra llegada de Escudero, aunque apareci¨® Catena para sofocar otro conato de incendio. El Valladolid no se rend¨ªa.

Los cambios sentaron mejor a los locales. Camello derrochaba confianza y avis¨® con un zurdazo que repeli¨® la zaga blanquivioleta. No iba a conformarse el delantero, no iba a levantar el pie del acelerador. ?lvaro repiti¨® como asistente. Recuper¨® un bal¨®n, cabalg¨® y se la dej¨® atr¨¢s a Camello, que puso el 2-0. Parec¨ªa que el final resultar¨ªa pl¨¢cido, nada m¨¢s lejos de la realidad. Eso no se estila en Vallecas. Sergio Le¨®n recort¨® distancias en un c¨®rner. Apret¨® el Valladolid, pero la gasolina no le dio para m¨¢s. La sinfon¨ªa que rein¨® en la grada fue la ¡®Vida Pirata¡¯. Ans¨ªan que suene tambi¨¦n por otros puertos continentales. Con la renovada p¨®lvora de sus delanteros no hay imposibles.