Por fin Duk
Borja Jim¨¦nez le dio presencia ante el Girona tras cuatro partidos sin usarlo ni un minuto. Sali¨® en el 65¡¯ (su mayor presencia en el c¨¦sped en un partido) y cambi¨® el duelo hasta ayudar al empate sobre la bocina.
Por fin Duk. Su entrada fue discreta. Zambullida en la desesperanza de ver c¨®mo su equipo, el Legan¨¦s, perd¨ªa una batalla en la que se buscaba un empate tambi¨¦n con sabor a derrota¡ pero que acab¨® teniendo cierto buqu¨¦ a triunfo por el c¨®mo y no tanto por el qu¨¦. Por fin Duk. En el minuto 65 del partido ante el Girona, en Butarque, con 0-1 en el marcador y uno menos desde el 19¡¯. Parec¨ªa imposible rascar nada. Pero este muchacho nacido en Portugal (25 a?os) pero de doble nacionalidad caboverdiana est¨¢ acostumbrado a abrazar los imposibles en una carrera que, dicen los que le conocen, ha sido siempre una cuesta arriba. De eterno segund¨®n a titular intocable. Siempre ha sido as¨ª. Ser un tapado se le da bien. Pero ante los catalanes no se tap¨®. Al contrario. Se mostr¨®. Una y otra vez. Una y otra vez.
Por fin Duk. Volcado a la banda derecha como extremo, una posici¨®n que tambi¨¦n desarrolla en el otro costado, el zurdo, aunque lo suyo sea ejercer de ¡¯9¡¯. Da igual donde le pongan. ?l no protesta. Batalla, pelea y lo intenta. Y si no le dan bola, sigue currando, agacha la cabeza y sonr¨ªe. ¡°Entrena bien, siempre optimista. No me sorprende la que ha liado, porque lo hace todos los d¨ªas¡±, dijo tras el 1-1 un Sergio Gonz¨¢lez que se alegr¨® que le preguntaran por ¨¦l. Por Duk. Porque en el vestuario lo ven como un buen compa?ero al que su ostracismo recurrente hace da?o no s¨®lo a ¨¦l mismo, sino tambi¨¦n a los jugadores que entienden que merece m¨¢s.
Borja Jim¨¦nez lo sabe. ¡°No es una situaci¨®n c¨®moda para ¨¦l porque no se la estamos haciendo c¨®moda al no ponerle. Pero lo ha hecho muy bien¡±, admiti¨® el preparador tras un encuentro en el que ¨¦l, Duk, le dio una peque?a vida extra. Por fin Duk, debi¨® pensar Butarque cuando le reclamaron su presencia tras cuatro duelos consecutivos (?cuatro!) sin un solo minuto. Su ¨²ltima aparici¨®n fue ante el Betis. Jug¨® cinco minutos y la lio para rozar el empate a tres.
La sombra de Diomande
Entonces apareci¨® Diomande y su irrupci¨®n desde el Bernab¨¦u le tap¨® hueco alguno. De titular. De suplente. Pero a la desesperada, Borja Jim¨¦nez decidi¨® que era una buena oportunidad para que se luciera. Le puso durante 25 minutos que han representado su partido de mayor tiempo en Butarque desde que debut¨® el 9 de febrero en Valencia. Desde entonces no hab¨ªa salido jam¨¢s antes del 72¡¯.
Esta vez lo hizo en el 65¡¯ para dejar un rastro de potencia y velocidad con regate, desborde y, sobre todo, mucho ¨ªmpetu. Una chispa que cambi¨® el rumbo del encuentro y que, sobre todo, acab¨® en el empate de Munir (90+2¡¯)cuando su desmarque (vaya pase de Raba) termin¨® en la asistencia del gol con el que el Lega se mantiene en la UVI, pero no camino del tanatorio. Y todo gracias a la intervenci¨®n de un tapado desaparecido por decisi¨®n t¨¦cnica hasta ahora. Una intervenci¨®n importante. Qui¨¦n sabe si decisiva para el sue?o de la salvaci¨®n. Por fin Duk.
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