Pedro Aguado y Dani Potele reciben las insignias de los veteranos rayistas
La Asociaci¨®n, compuesta por m¨¢s de 80 exjugadores, celebr¨® su tradicional comida anual con la presencia de los capitanes ?scar Valent¨ªn e Isi y de mitos como Potele, Anero, Cota, M¨ªchel II...
Ellos vistieron la Franja con valent¨ªa, coraje y nobleza. Ellos fueron iconos del Rayo y lo siguen siendo. La Asociaci¨®n de Veteranos ha celebrado este s¨¢bado su tradicional comida anual en la que se hizo entrega de sus insignias a Pedro Aguado, quien milit¨® en el primer equipo durante la 93-94, y a Daniel Gonz¨¢lez, el hijo del legendario delantero Potele, que jug¨® en las categor¨ªas inferiores vallecanas. ¡°Un reconocimiento para quienes tan bien representan los valores del Rayo¡±, ha asegurado Diego Serrano, el maestro de ceremonias de un acto, donde estuvieron presentes los actuales capitanes ?scar Valent¨ªn e Isi.
Ambos compartieron experiencias con el presidente de los Veteranos, Cota, y el vicepresidente, M¨ªchel II. Tambi¨¦n, con otros m¨ªticos de todas las ¨¦pocas como Potele, Anero, Lorenzo y El¨ªas Benito, Salazar, Francisco, Mauri... Parte imprescindible de esta gran familia, compuesta por m¨¢s de 80 exjugadores, que ha cumplido tres d¨¦cadas de vida. A Pedro Aguado le entreg¨® este reconocimiento su compa?ero Cota, el jugador que m¨¢s partidos ha defendido la Franja en toda su historia (458) y a Dani Potele, su padre, el delantero que m¨¢s goles ha marcado (67, los mismos que M¨ªchel I).
La Asociaci¨®n de Veteranos no para, sigue haciendo rayismo. Su equipo, dirigido por El¨ªas Benito, es un habitual en los torneos ben¨¦ficos y se ejercitan todos los mi¨¦rcoles en la Ciudad Deportiva. Sin embargo, uno de los proyectos que m¨¢s les emociona es el taller de F¨²tbol y Reminiscencia, que les ha llevado a las residencias de ancianos a compartir recuerdos y batallitas con quienes batallan contra el Alzheimer. Esas historias que cautivaron a los m¨¢s mayores y tambi¨¦n provocaron las carcajadas de ?scar Valent¨ªn e Isi. Esas mismas que hacen que este sentimiento por la Franja se perpet¨²e de generaci¨®n en generaci¨®n...