Pablo Barrios, de Moratalaz a la gloria
AS recorre la historia del canterano, Pablo Barrios, la mejor noticia rojiblanca de este curso, con las voces de sus entrenadores y compa?eros desde sus inicios hasta hoy, pasando por el Real Madrid.
Su nombre es la mejor noticia para el Atl¨¦tico en esta temporada que tiende al gris. Su nombre, su procedencia, su irrupci¨®n. Se llama Pablo Barrios, es canterano y naci¨® hace 19 a?os en el madrile?o barrio de Moratalaz, del que ya se puede considerar embajador. All¨ª vive y all¨ª empez¨® a formarse como futbolista, cuando su padre, F¨¦lix, que milit¨® en el Moscard¨® en los 90, insisti¨® a sus dos hijos que ten¨ªan que practicar un deporte. Marta, la mayor, se decant¨® por la gimnasia r¨ªtmica y hoy es entrenadora nacional. Pablo opt¨® por el f¨²tbol.
Dos a?os le valieron para dejarse ver por los campos madrile?os y llamar la atenci¨®n de casi todos los clubes a los que se enfrentaba. Pablo sali¨® de la Escuela de Moratalaz al terminar la etapa Prebenjam¨ªn, pero dej¨® huella. Ahora es motivo de orgullo. ¡°Es un chico del barrio, como su padre, y lleva nuestros colores¡±, resume Jes¨²s Recio, entonces jugador y hoy secretario y tesorero de la ED Moratalaz. Y all¨ª, en el t¨²nel de vestuarios del campo de Urbis, aparece Barrios en un lugar privilegiado.
El Moratalaz, a modo de homenaje y tambi¨¦n de motivaci¨®n, guarda all¨ª, en su pasillo bajo sus gradas, un mural con fotos de los hitos m¨¢s grandes de los futbolistas que han pasado por all¨ª. Hasta hace poco las que m¨¢s luc¨ªan eran las de Pablo Mart¨ªnez, del Levante, sus debuts en Segunda y en Primera. La ¨²ltima en colgarse lleva los colores del Atleti, es de Barrios: Primer futbolista de la escuela en debutar en Champions. ¡°Es tremendo ver a uno de nuestros chicos, que hace nada estaba aqu¨ª, jugando con el Atleti en la Copa de Europa¡±, presume Recio.
Barrios entr¨® en el club para jugar en el Prebenjam¨ªn C que iba a dirigir Sergio Vega. ¡°Yo era jugador del Moratalaz y nos dijeron a mi compa?ero Alberto y a m¨ª que nos encargar¨ªamos del equipo. Pablo no hab¨ªa estado en Chupetines, pero s¨ª en los entrenamientos de final de curso, y ya nos hab¨ªan avisado de que nos fij¨¢ramos. Recuerdo el primer control orientado que hizo, c¨®mo coloc¨® el cuerpo, pensamos: ¡®Este chico no es que nos sirva, es que est¨¢ para el A¡¯. Nos comentaron que lo pusi¨¦ramos en banda, que era muy r¨¢pido, pero viendo su toque de bal¨®n y la ocupaci¨®n de espacios que ofrec¨ªa, lo probamos como mediocentro¡±, recuerda n¨ªtidamente su primer t¨¦cnico.
Y pronto destac¨® con sus cambios de juego y su buen golpeo a porter¨ªa. El primer a?o su equipo qued¨® tercero; el segundo, fueron campeones. En aquella camada estaba tambi¨¦n Sergio D¨ªez, hoy lateral derecho del Atleti B. ¡°Otros entrenadores ya nos avisaban de que Pablo nos iba a durar poquito. Adem¨¢s, al ser rubito con el pelo a taz¨®n y las botas azules, era a¨²n m¨¢s reconocible¡±. Y al final de ese segundo curso pas¨® lo inevitable, como relata: ¡°A m¨ª me llama el Rayo y el Madrid se puso en contacto con el Moratalaz. Pero me consta que todos los grandes de la Comunidad le segu¨ªan¡±.
As¨ª, entra al Real Madrid para jugar en el Benjam¨ªn B. En el partidillo de captaci¨®n lo pusieron de central y eso chirri¨® a los que le conoc¨ªan, pues destacaba por delante. De hecho, en la descripci¨®n de Barrios en la web del club blanco pon¨ªa: ¡°Destaco despejando balones¡±. ¡°No entend¨ªamos nada¡±, bromea Sergio Vega, uno de los que mejor sab¨ªa sus virtudes. En Valdebebas conoci¨® a Javi Curr¨¢s, con quien coincidi¨® luego en el Atleti y que a¨²n hoy es un amigo-hermano, aunque ¨¦l est¨¢ en Portugal, en el Acad¨¦mico Viseu. ¡°Yo llegu¨¦ del M¨®stoles y pronto ¨¦ramos mejores amigos: yo iba a su casa, ¨¦l ven¨ªa a la m¨ªa¡ Y hasta hoy, que disfruto vi¨¦ndolo en la tele tambi¨¦n¡±, dice.
En el Madrid, Pablo sigui¨® creciendo hasta que, en 2017 y para sorpresa de todos, tuvo que marcharse con 14 a?os. Barrios era el capit¨¢n del Infantil A, lo jugaba pr¨¢cticamente todo, lo citaba la Sub-12... y a¨²n as¨ª el club le dio la baja. ¡°Fue un palo para ¨¦l¡±, recuerdan quienes le conocen. Por suerte, no tardaron en aparecer las ofertas. Bar?a, Celta, Atleti¡ Los ¨²ltimos le daban la opci¨®n de permanecer en Madrid. Solo hac¨ªa falta la carta de la baja para no incumplir el pacto de canteras, pero el Atleti ten¨ªa clara una cosa: no se le pod¨ªa escapar esa joya. ¡°Nos sorprendi¨® que Pablo quedara libre, pero nos lanzamos a por ¨¦l porque destacaba much¨ªsimo¡±, recuerda ?ngel Donato, entonces en el departamento de captaci¨®n del Atl¨¦tico.
Reencuentro rojiblanco con Curr¨¢s
El actual entrenador del Juvenil Madrile?o A fotograf¨ªa a aquel Barrios: ¡°No se hab¨ªa desarrollado f¨ªsicamente, pero era un gran mediocentro, con mucha personalidad y un brillante nivel t¨¦cnico. Yo lo conoc¨ªa desde ni?o, ya en el Moratalaz llamaba la atenci¨®n. Siempre fue conocido en el f¨²tbol base madrile?o. No esper¨¢bamos que quedara libre¡±. El jugador lleg¨® al Cerro en 2017 para el Cadete B y all¨ª se reencontr¨® con Curr¨¢s, incorporado un par de a?os antes, quien le hizo de anfitri¨®n: ¡°Cuando me enter¨¦ de que fichaba no me lo cre¨ªa, ?iba a jugar otra vez con mi mejor amigo!¡±. Pero aquel verano hab¨ªa un problema: el Atl¨¦tico estaba sancionado por la FIFA y no pod¨ªa inscribir futbolistas. A Barrios le toc¨® esperar hasta enero para jugar. Como a Costa, como a Vitolo, en el primer equipo.
Curr¨¢s le allan¨® la adaptaci¨®n y, en esos primeros meses sin jugar, final de verano, oto?o, Pablo tuvo que conformarse con los partidillos que organizaba el Atl¨¦tico en el Calder¨®n reuniendo a los chicos no inscritos por la sanci¨®n como ¨¦l y los que no hab¨ªan participado el fin de semana de varias categor¨ªas. Se estren¨® en partido oficial con el 10 y un golazo de falta, pero aquella temporada fue de aclimataci¨®n. ¡°En la siguiente, como Cadete A, se le empieza a ver un poco m¨¢s y el a?o de Liga Nacional (19-20; Juvenil B) dio un cambio f¨ªsico espectacular¡±, recuerda Donato. La evoluci¨®n era notable. ¡°El boom fue con el Madrile?o A (20-21). Siempre hab¨ªa sido muy bueno, pero se le empez¨® a ver m¨¢s f¨ªsico, un manejo de bal¨®n incre¨ªble¡ Es que le ve¨ªamos jugar y hasta nosotros flip¨¢bamos con sus acciones¡±, sonr¨ªe Curr¨¢s al revivirlo.
A nivel medi¨¢tico, su explosi¨®n lleg¨® con el Juvenil A, concretamente con el derbi ante el Madrid en la Youth League y sus dos golazos. Una revancha personal para Barrios en Valdebebas y ante miradas de todo el continente. ¡°Me alegr¨¦ como si fuera mi hijo¡±, celebra Sergio Vega, su t¨¦cnico en Moratalaz. Fernando Torres acomod¨® en el 5-3-2 a Barrios para que tuviera m¨¢s llegada al ¨¢rea e hiciera valer su buen disparo. ¡°Meti¨® varios goles espectaculares. Siempre ha tenido personalidad, pero creci¨® f¨ªsicamente otro poquito y sum¨® m¨¢s pegada. Su explosi¨®n llam¨® m¨¢s la atenci¨®n a¨²n¡±, analiza Donato. El nombre de Pablo Barrios empez¨® a sonar con fuerza entre la hinchada rojiblanca.
Fueron meses trepidantes. Adem¨¢s del sobresaliente rendimiento con el Juvenil A en la Liga y en la Youth League, el medio debut¨® con el B, con la Sub-19 y entr¨® en varias convocatorias del primer equipo. Una de las grandes joyas de la Academia estaba acerc¨¢ndose al destino anhelado. Y en el C¨¢diz-Atl¨¦tico, 29 de octubre de 2022, Simeone le hizo debutar. ¡°Ver a tu mejor amigo cumplir su sue?o y el de todos los ni?os que juegan al f¨²tbol es incre¨ªble. Llor¨¦ un mont¨®n¡±, se emociona Curr¨¢s, antes de deslizar: ¡°Y lo mejor est¨¢ por llegar¡±.
Es el orgullo que siente toda su gente y todo Moratalaz. Su barrio y donde empez¨® a hacerse futbolista y tambi¨¦n la persona que es ahora. Poco despu¨¦s del debut en C¨¢diz llegaron el estreno en Champions, los goles en Copa, su renovaci¨®n hasta 2028 con 100 millones de cl¨¢usula y ficha del primer equipo, ese dorsal 24¡ ¡°Emociona ver ah¨ª a Barrios¡ y hay m¨¢s chicos en la casa preparados para el reto¡±, avisa Fernando Torres, leyenda del Atleti y entrenador del Juvenil A. Pablo es, desde la vuelta del Mundial, uno m¨¢s entre los mayores. Simeone le mira y le exige como al resto y no le va a regalar nada que no se gane, pero quienes mejor le conocen saben que eso tampoco le intimida. ?l ya est¨¢ ah¨ª y es uno de los grandes motivos para ilusi¨®n en la familia del Atleti. De Moratalaz al cielo.