Diego Mart¨ªnez, destituido
El Espanyol de Chen certifica su en¨¦simo fracaso con la salida de su decimoprimer entrenador en siete a?os, rozando el descenso tras cuatro derrotas seguidas. Luis Garc¨ªa ser¨¢ su sucesor.


¡°Debemos ser felices con lo que somos¡±, advert¨ªa en su entrevista con AS del 10 de marzo, a las puertas de visitar al Real Madrid, cuando ni siquiera se pod¨ªa intuir el desenlace que llegar¨ªa apenas tres semanas despu¨¦s al elegido hace un a?o para comandar un proyecto ascendente hasta 2024 como m¨ªnimo y que ha acabado estrell¨¢ndose. Ni el Espanyol le brind¨® las herramientas que le hab¨ªa prometido, ni el t¨¦cnico ha exprimido al m¨¢ximo a su plantilla. El resultado ha sido la destituci¨®n, ya oficial, de Diego Mart¨ªnez como entrenador perico.
Cuatro derrotas consecutivas, 27 puntos en otras tantas jornadas y una zona de descenso a la que el equipo caer¨¢ si el Valencia derrota este lunes al Rayo Vallecano conforman el balance num¨¦rico de un Diego Mart¨ªnez que aterrizaba en el Espanyol avalado por el enorme ¨¦xito cosechado en el Granada, al que clasific¨® para Europa por vez primera en su historia y alcanz¨® unas semifinales de Copa del Rey, que inicialmente contaba con al menos 20 millones por el traspaso de Ra¨²l de Tom¨¢s pero que pronto tuvo que ¡°reajustar las expectativas¡±, como ¨¦l mismo avis¨® ya en pleno verano.
¡°Estoy jodido pero contento¡±, resolvi¨® al t¨¦rmino de ese mercado estival, en que la plantilla se qued¨® a medio hacer a pesar de cambiar un sinf¨ªn de piezas. Y ah¨ª comenz¨® a desgastarse su relaci¨®n profesional con el director deportivo, Domingo Catoira, que hab¨ªa apostado por su fichaje. Cambi¨® el estilo esperado, con una presi¨®n alta cada vez m¨¢s intermitente, fue variando de dibujos, gestion¨® la porter¨ªa a base de errores groseros, insisti¨® en actuar por las bandas pese a no contar con extremos y vio c¨®mo la sangr¨ªa defensiva, lejos de suturarse, ha ido abri¨¦ndose hasta el final, dos pretemporadas y un par¨®n despu¨¦s.

Ni el ¡°mercado positivo¡± de invierno vir¨® el destino de un entrenador que pronto apel¨® a la ¡°cuesti¨®n de fe¡± que representa el Espanyol, que en los primeros compases s¨ª hab¨ªa ilusionado a la afici¨®n y que vivi¨® sus mejores d¨ªas en clave perica con los empates ante el Atl¨¦tico de Madrid en el Metropolitano y, sobre todo, contra el Barcelona en el Camp Nou, en Nochevieja. Y que no ha podido beneficiarse de los 21 goles de Joselu Mato y Martin Braithwaite, ni de la calidad de Sergi Darder para elevarse en la clasificaci¨®n.
Se desliga el Espanyol de la figura con la que el propio club quiso identificar su proyecto en la campa?a de renovaci¨®n de abonos del pasado verano, cuando trat¨® de enganchar a los socios y seguidores mediante la imagen de Diego Mart¨ªnez. Por tanto, su destituci¨®n es el fracaso del club. Una muesca m¨¢s en el historial de Chen Yansheng, que lo fiar¨¢ todo a una apuesta repleta de sentimiento, como lo es Luis Garc¨ªa, que ser¨¢ el decimosegundo entrenador en siete temporadas con el empresario chino como propietario y presidente.