Los 700 de Busquets

Salvo imprevisto, Sergio Busquets Burgos (16-7-1988) cumplir¨¢ este jueves 700 partidos oficiales con el Bar?a en la ida de la semifinal de la Supercopa contra el Betis. Aunque el reportaje sea inevitable, sobran las palabras. En esa cifra, que en el club azulgrana s¨®lo han rebasado Xavi (767) y Messi (778), est¨¢ la grandeza del acontecimiento y mucho de lo que ha representado el mediocentro como jugador. Un reloj suizo desde que Guardiola, atrapado por la sencillez de su f¨²tbol, lo subi¨® del filial en la temporada 2008-09. Cuando debut¨® junto a Pedrito (luego Pedro) en partido oficial contra el Racing, en la segunda jornada de Liga, algunos cr¨ªticos pusieron el grito en el cielo. Alguien lo compar¨®, incluso, con aquella cruyffada de Lucendo en Valladolid. Pero lo que estaba haciendo Guardiola era dar salida a un futbolista que se ha convertido en leyenda.

Sergio Busquets es parte de la espina dorsal del mejor Bar?a de la historia, el de Messi. Excepto con Rijkaard, al argentino lo acompa?¨® en todo su viaje. Ganador de una treintena de t¨ªtulos, se hizo grande en el centro del campo aprendiendo de Xavi e Iniesta; y ha terminado alumbrando y dando clases a Pedri y Gavi. Entre medias, ha visto pasar a centrocampista de todos los colores. Desde Yaya Tour¨¦, al que termin¨® pasando por la izquierda, a Frenkie de Jong, pasando por Keita, Mascherano, Cesc, Song, Rakitic, Paulinho, Arthur, Arturo Vidal, Kessi¨¦, y alg¨²n canterano como Thiago que, tal vez, nunca debi¨® haberse marchado.

Busquets nunca ha enga?ado a nadie. De sus 699 partidos en el Bar?a ha jugado m¨¢s de 620 como mediocentro defensivo. Cuando el Bar?a tuvo una urgencia en el puesto de central en la temporada 2010-11, con Puyol y Abidal fuera de combate, advirti¨® a Guardiola de que no se ve¨ªa ah¨ª. No era el m¨¢s fuerte ni tampoco el m¨¢s r¨¢pido. Su f¨²tbol ten¨ªa otras virtudes. La aparici¨®n de Mascherano en la vuelta de los octavos contra el Arsenal en esa posici¨®n, gol salvado incluido en el ¨²ltimo minuto, le evit¨® ese problema.

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Sol¨ªa decir Johan Cruyff que ¡°jugar al f¨²tbol es sencillo, pero jugar un f¨²tbol sencillo es lo m¨¢s dif¨ªcil que hay¡±. Y en eso el holand¨¦s deb¨ªa estaba orgulloso de Busquets, amante de simplificar el juego lo m¨¢ximo posible, a uno o dos toques. Casi siempre en corto, aunque en las dos ¨²ltimas temporadas se le ha visto prodigarse m¨¢s a media y larga distancia. Cruyff lo vio r¨¢pido. ¡°Parece un veterano, hace f¨¢cil lo dif¨ªcil. Juega a uno o dos toques y defensivamente da lecciones todo el rato porque siempre est¨¢ en el sitio justo¡±, dijo ya en septiembre de 2008 adelantando una carrera memorable.

Ha sido siempre Busquets un jugador rodeado de un halo de normalidad espectacular. Pese a relacionarse con los pesos pesados de la plantilla, que arrastran focos y luces de ne¨®n donde van, siempre ha mantenido un perfil espectacularmente discreto. Como en los inicios, cuando consigui¨® desvincularse de la figura de su padre, pol¨¦mico portero en los 90 que fue recambio fallido de Zubizarreta, como ahora al final, siempre ha preferido vivir en segundo plano y que sus n¨²meros hablen por ¨¦l.

Se ha cuidado tanto que las lesiones le han respetado hasta el punto de haberse perdido solo 13 partidos durante su carrera en el Bar?a por temas f¨ªsicos. Sus fotos m¨¢s recordadas, tal vez, son su primer gol en Basilea en Champions, su ¡®asistencia¡¯ a Messi en el 0-2 de la semifinal europea del Bernab¨¦u; la final que jug¨® en Wembley en el a?o 2011, excelsa, acompa?ado de Iniesta y Xavi; el Bar?a de los locos bajitos que pulveriz¨® al Santos en la final del Mundial de Clubes de ese a?o. Tambi¨¦n hizo carrera su sociedad con Rakitic en el doble pivote que Valverde se encontr¨® para ganar las Ligas de las temporadas 2017-18 y 18-19, aunque luego le sorprendi¨® una suplencia en San Mam¨¦s en la primera jornada de la temporada 2019-20 que erosion¨® la relaci¨®n¡­

Por su manera de jugar, Busquets siempre ha sido un jugador m¨¢s de entrenadores que de aficionados. Aunque ha sido un jugador con est¨¦tica propia, no se le encontrar¨¢n goles ni regates para el recuerdo. S¨®lo pragmatismo para su equipo. Aquella frase de Del Bosque (¡°si volviese a ser jugador, me gustar¨ªa haber sido Busquets¡± traspas¨® fronteras. Menotti habl¨® de una ¡°especie en extinci¨®n¡± y para Guardiola y Luis Enrique fue uno de los faros de su triplete. En 2018, el actual entrenador del City ya dijo estar seguro de que ser¨¢ entrenador: ¡°Tarde o temprano lo veremos en los banquillos¡±. El ¨²ltimo elogio de Luis Enrique fue justo antes del Mundial: ¡°Todav¨ªa no veo en el panorama internacional ning¨²n pivote mejor que Busquets para lo que a nosotros queremos jugar¡­¡±.

Busquets llega a su partido 700 con el futuro en el aire. Si el Bar?a avanza en todas las competiciones, podr¨ªa acercarse a los 740 a final de temporada y tener la posibilidad de pulverizar el r¨¦cord de Messi en la temporada 2023-24. Xavi le ha pedido que contin¨²e un a?o m¨¢s. El escenario, llegar a ser el jugador con m¨¢s partidos del Bar?a en la historia, puede resultar seductor, pero si Busquets no se ha equivocado dando un pase, tampoco lo va a hacer ahora con el final de su carrera.