La quietud de Isco y Marcelo

La luz marca stand by. Ese estado electr¨®nico en el cual un dispositivo est¨¢ encendido pero, a la vez, parado; en riguroso reposo. Esperando una orden que no llega. Un movimiento que desencadene acontecimientos. Una oferta que despierte un ¡°s¨ª¡±. Isco y Marcelo han entrado en agosto y siguen sin equipo, con sus futuros en el aire y aguardando en una calma tensa. Ambos coinciden en un aspecto: su prioridad es seguir en el f¨²tbol de ¨¦lite. Y este detalle no es banal, pues las ofertas de ligas ¡®menores¡¯ como la qatar¨ª o norteamericana fueron, pr¨¢cticamente, las primeras en llegar. Pero no correspondidas. Ambos tienen propuestas sobre la mesa, pero ninguno firma. Porque ambos siguen esperando ¡®algo que llegar¨¢', pero de momento no.

Isco

Tiene menos ofertas que su compa?ero y, sin embargo, ha estado m¨¢s cerca que ¨¦l de cantar victoria. Porque su romance con el Sevilla, casi pregonado a los cuatro vientos por Lopetegui, parec¨ªa rumbo a buen puerto hace unas semanas. ¡°No voy a esconder que me encanta. Es muy competitivo y, adem¨¢s, una enorme persona. Veremos qu¨¦ ocurre¡±, fueron las palabras de el entrenador en rueda de prensa. El inconveniente, en este sentido, es que el proyecto deportivo de Monchi prioriza a futbolistas j¨®venes de los que se pueda sacar un gran rendimiento deportivo -y econ¨®mico-. Sin embargo, a orillas del Guadalquivir se habla mucho de Isco, pues el Betis tambi¨¦n lo tiene marcado en su agenda y, de hecho, lleg¨® a cerrar un preacuerdo con el jugador en caso de que se clasificasen para Champions. Pero eso no sucedi¨®.

La oferta m¨¢s en firme que ha recibido ha sido de la Roma. Como cont¨® AS, el propio Mourinho se puso en contacto con ¨¦l para transmitirle de manera personal todo el inter¨¦s que ten¨ªa en que sus caminos se volviesen a cruzar. ?Problema? La Roma no juega Champions. E Isco tiene claro que quiere jugar la m¨¢xima competici¨®n europea, porque siente que su nivel todav¨ªa est¨¢ para esas cotas. Y que si tiene alguna opci¨®n de volver al cenital y mostrarse ante Luis Enrique en a?o de Mundial, pasa por ese escenario. La oferta de la Roma, voluminosa, recibi¨® un ¡°no¡± por respuesta. Y hasta hoy. Mientras, el futbolista no cesa de compartir en sus redes sociales la dureza de los entrenamientos a los que se est¨¢ sometiendo en solitario. El hambre que tiene de estar al 100% desde el primer d¨ªa del que sea su nuevo proyecto. El problema es que este, de momento, no llega.

Marcelo

Tampoco el del ex capit¨¢n del Real Madrid, cuyo presente es mucho m¨¢s enigm¨¢tico. En sus redes sociales no hay constancia diaria de qu¨¦ trabajo est¨¢ realizando para mantener la forma f¨ªsica mientras se cierra su futuro. Le han llovido ofertas, pero no quiere renunciar al f¨²tbol de ¨¦lite. Esto descarta una de las mejores ofertas -si no la mejor- que ha entrado en su buz¨®n: Qatar. Marcelo considera que todav¨ªa no es el momento de dar el paso a una liga de ese escal¨®n, cree que a¨²n puede dar zancadas en el m¨¢s alto. Otra de las propuestas m¨¢s firmes que ha recibido fue de su compatriota, Ronaldo Nazario, actual propietario del Real Valladolid. La cercan¨ªa del Jos¨¦ Zorrilla con Madrid (apenas dos horas por carretera) sumaba puntos a la carta, pues Marcelo tambi¨¦n tiene claro que no quiere mover a su familia de la capital. Su hijo juega en La F¨¢brica y el resto vive, muy asentada, en la capital de Espa?a.

Esto no descarta, pero s¨ª resta puntos a todo lo que le llega desde fuera. Pero la balanza es caprichosa, porque las opciones de jugar Champions pasan por salir de Espa?a. Dif¨ªcil dilema. El Milan present¨® sus credenciales hace algunas semanas, como el Olympique de Marsella. Desde Turqu¨ªa tambi¨¦n han llamado a su puerta, con clubes como Fenerbah?e o Trabzonspor. En Espa?a, el Getafe sonde¨® su fichaje como una posibilidad, lo que le permitir¨ªa seguir viviendo en Madrid con su familia, pero supondr¨ªa decir adi¨®s a Europa. Mucha miga y poco pan. Agosto avanza a un ritmo fren¨¦tico y sigue sin sellar sus futuros. D¨®nde jugar¨¢n la pr¨®xima temporada. Tanto Marcelo como Isco est¨¢n en stand by. Encendidos, pero parados.