Koke, capit¨¢n legendario

Koke lleg¨® al borde de las ocho y media de la tarde al Hotel Palace. De la mano, su mujer, Beatriz Espejel. Detr¨¢s, a su espalda, ese lugar que conoce tan bien: la fuente de Neptuno bajo una lluvia intensa, Madrid colapsado, el tr¨¢fico. Hay quien dir¨¢ que es solo piedra pero Koke sabe bien que no. La ha tocado con sus propias manos, la ha sentido latir. La ¨²ltima vez hace no tanto, una noche de mayo de 2021. Era la segunda vez que sub¨ªa. La primera que lo hac¨ªa solo. Porque el chico de Vallecas que ha recibido el Premio AS del Deporte por su trayectoria, por alcanzar a Adelardo en un r¨¦cord con 47 a?os de historia, sus 553 partidos con la rojiblanca, se subi¨® la primera vez en 2018 acompa?ado, con dos hermanos (Gabi y God¨ªn) y el ¨ªdolo (Torres) para celebrar la Europa League. Entonces eran casi 400 sus partidos. Hoy ya son 560. Alcanz¨® ese 553 el 18 de septiembre, en el derbi ante el Madrid. Lo super¨® el 1 de octubre, en el Pizju¨¢n. El 20 de diciembre recog¨ªa de la mano de Leopoldo Satr¨²stegui, director general de Hyundai Motor Espa?a, el AS del Deporte que se lo reconocer¨¢ siempre.

Debut¨® en 2009, lo alcanz¨® en 2022. Son diez sus t¨ªtulos con la rojiblanca, es legendaria su figura, tan buena gente, siempre ah¨ª para ayudar a los dem¨¢s, en el campo y fuera. Un pilar, un futbolista de ¨¦poca, un capit¨¢n a la altura del escudo que lleva cosido justo al lado del coraz¨®n, en el pecho, el del Atl¨¦tico.

Orgullo y emoci¨®n

Se emocion¨® al recoger el premio y hablar del sufrimiento del deportista de ¨¦lite. ¡°Todos sufrimos para llegar al ¨¦xito¡±. Sonre¨ªa Beatriz, una vida a su lado, bien sabe lo que lleva dentro el Atl¨¦tico, las noches sin cenar cuando pierde, el dolor cuando las cosas no salen, la alegr¨ªa de cuando s¨ª. El peque?o Leo, su hijo que hace unos d¨ªas cumpli¨® tres a?os, vive rodeado de balones, jugando al f¨²tbol, como hac¨ªa su padre en los pasillos de la casa de Sierra Madro?a en el barrio de Vallecas en la que creci¨®, en las finales de Mundiales que all¨ª jugaba contra su hermano Borja. Pero Koke solo ten¨ªa uno, con el que dorm¨ªa cada noche, que no sacaba a la calle para que no se ensuciara de barro, de tierra, del verde del parque en el que jugaba con su hermano, al que cuidaba como Gollum al anillo, su tesorooo.

Todos esos recuerdos agolpados en su cabeza cuando se dirig¨ªa al escenario a recoger su premio. Un paso, dos, la cabeza bullendo de recuerdos desde ese primer partido en el Camp Nou en el que Abel le dio la alternativa y ¨¦l comenz¨® a construir ese r¨¦cord que le ha hecho eterno. ¡°Estoy muy orgulloso y muy feliz de recibir este premio¡±, dijo el rojiblanco que ya se entrena desde hace una semana en el Cerro tras el Mundial de Qatar.

Van pasando los d¨ªas, qued¨¢ndose atr¨¢s. ¡°En la vida todo sigue. Ten¨ªamos un gran grupo. Lo hab¨ªamos hecho muy bien en la Eurocopa, en la Liga de Naciones... Ahora es un poco rara la vuelta, pero hay que adaptarse. Pasamos del Mundial de Qatar a jugar en dos d¨ªas contra el Arenteiro, la Copa¡±. Y aqu¨ª se detuvo. ¡°Tenemos ilusi¨®n, ganas. Es un torneo muy bonito y la gente se merece que pelemos por ella¡±, dijo. Y no solo es palabra de capit¨¢n. Es promesa de leyenda.