El Espanyol, un d¨®berman
Las ideas de Diego Mart¨ªnez ya se vieron ante el Montpellier: la presi¨®n alta, el juego por las bandas o las tres alturas en el mediocampo. Un boceto que debe convertirse en realidad en breve.
Desde la tribuna de prensa de Sant Adri¨¤, a la sombra en una tarde calurosa, llam¨® la atenci¨®n una imagen en la primera parte del Espanyol-Montpellier. Era una jugada banal, un bal¨®n largo a la espalda del lateral izquierdo franc¨¦s que no encontr¨® ning¨²n jugador blanquiazul. El portero lleg¨® c¨®modamente, fuera del ¨¢rea, pero de golpe Joselu Mato se activ¨® y fue a impedir que tuviera tiempo para despejar tranquilamente. Esprint¨® y lleg¨® a su altura. El golpeo del meta le rebot¨® y se fue a saque de meta. Diego Mart¨ªnez lanz¨® el mayor grito y aplauso de todo el encuentro. Era lo que quer¨ªa. Es lo que quiere. ¡°La intensidad no se negocia¡±, dijo Brian Oliv¨¢n tras el encuentro.
Aunque solamente ha sido un encuentro y ha estado condicionado por ausencias como las de Ra¨²l de Tom¨¢s, tanto Diego Mart¨ªnez como los futbolistas han dejado claro que han puesto en pr¨¢ctica ¡°los conceptos trabajados¡± estas dos semanas. Presi¨®n alta, intensidad y personalidad con el bal¨®n fueron los aspectos m¨¢s destacados. El boceto del Espanyol ante el Montpellier ir¨¢ cogiendo forma en las pr¨®ximas tres semanas, pero a grandes rasgos estos son los aspectos m¨¢s fundamentales.
Presi¨®n y defensa adelantada
Quiz¨¢s porque fue el aspecto del juego que m¨¢s se ech¨® en falta la temporada pasada o por la insistencia de Diego Mart¨ªnez desde el banquillo, pero la presi¨®n alta del Espanyol fue el sello del primer partido de pretemporada. El equipo perico se activ¨® cuando perd¨ªa el bal¨®n en campo rival o cuando el oponente sacaba el bal¨®n jugado despu¨¦s de saque de meta. Y lo hizo con todas las consecuencias. La defensa se situ¨® en el centro del campo y todos los jugadores persiguieron recuperar el bal¨®n cuanto antes. La implicaci¨®n fue b¨¢sica y efectiva ante el Montpellier. La l¨ªnea de cuatro qued¨® m¨¢s fija y fueron los mediocentros los que saltaron. Los centrales necesitar¨¢n ganar los duelos individuales porque quedan muy expuestos.
Darder y las tres alturas
Cuando el Espanyol tiene el bal¨®n, los tres mediocentros del sistema 4-3-3 se sit¨²an a tres alturas distintas. Darder es el que ayuda en la base de la jugada. El futbolista es el m¨¢s dotado para ello, mientras que Vinicius y Bare en la primera mitad se sit¨²an en dos escalones diferentes para fijar rivales y activarse a la presi¨®n en caso de que haya un bal¨®n largo. El mallorqu¨ªn, capit¨¢n en el estreno, ser¨¢ omnipresente, creador, canalizar y finalista del juego, se situar¨¢ donde est¨¦ el bal¨®n y sus compa?eros ir¨¢n cubriendo los otros pelda?os. Estas tres alturas, con jugadores menos dotados por delante del mallorqu¨ªn, favorece que el equipo blanquiazul juegue m¨¢s por fuera que por dentro.
M¨¢s banda que juego interior
Especialmente Nico Melamed, Adri¨¢n Embarba y Rub¨¦n S¨¢nchez fueron protagonistas en el juego de ataque. Todos ellos actuando de extremos. El Espanyol atac¨® por los costados m¨¢s que por dentro, donde solamente la entrada de Villahermosa o el cambio de posici¨®n de Melamed le dieron m¨¢s presencia en el segundo tiempo. Pero la idea de Diego Mart¨ªnez es favorecer m¨¢s la relaci¨®n lateral- extremo que la de lateral-interior-extremo. Eso tendr¨¢ como consecuencia que se multipliquen los centros al ¨¢rea para buscar a los delanteros, ya sea Joselu, Puado o RdT los arietes. El t¨¦cnico insisti¨® en ocupar todas las zonas de remate, incluso anim¨® a los mediocentros a sumarse a ellas o a la zona de rechace, otra manera de favorecer la presi¨®n en caso de p¨¦rdida al acumular muchos jugadores cerca de la zona del bal¨®n.
Repliegue intensivo en 4-5-1
Aunque el Montpellier apenas tuvo ataques posicionales, hubo momentos en los que el Espanyol se vio obligado a defender en su propio campo. En esas fases, el equipo se repleg¨® con cinco centrocampistas, pues los extremos se incrustaban cerca del lateral para evitar situaciones de superioridad y facilitar las ayudas. Era Darder o Melamed cuando jugaba por dentro los que se descolgaban cerca del delantero en caso de buscar r¨¢pidas transiciones. Una manera, en los m¨²ltiples partidos de Liga en los que el rival desactive la presi¨®n del Espanyol, de acumular jugadores por detr¨¢s del bal¨®n y protegerse.
Todas est¨¢n ideas son est¨¢ticas, aunque cambiar¨¢n en funci¨®n del sistema. El Espanyol de Diego Mart¨ªnez es un d¨®berman, que sale a morder y no se refugia en su campo. La implicaci¨®n de los jugadores en esta faceta ser¨¢ b¨¢sica desde el primer minuto.