El caos reina en Almer¨ªa

Almer¨ªa y Sevilla pusieron de manifiesto muchas de sus virtudes y tambi¨¦n un amplio carrusel de carencias, sobre todo defensivas, que dieron pie a un partido loco y explican el porqu¨¦ de sus respectivas temporadas, en ambos casos muy decepcionantes. Las continuas alternativas en el juego y el aluvi¨®n final de goles hicieron vibrar a los aficionados y pusieron de los nervios a los entrenadores a partes iguales.

Del 1-0 al 1-2 en cinco minutos para terminar con un empate final obra de Marezi en el 95¡ä. Las pizarras saltaron por los aires casi de salida y el partido se convirti¨® muy pronto en un intercambio de golpes en el que el primero en acertar fue el Almer¨ªa. Y lo hizo gracias a varias paradas salvadoras de Maximiano, que amarg¨® el primer tiempo a Isaac Romero y al resto de atacantes del Sevilla. El canterano de Nervi¨®n se top¨® hasta en cuatro ocasiones con el meta portugu¨¦s, dos de ellas en sendas ocasiones muy claras. El portero sostuvo a los ind¨¢licos y Embarba aprovech¨® una contra iniciada por Luka Romero y Viera para castigar la espalda de Bad¨¦ y dar esperanzas a la parroquia almeriense. 1-0.

Pudo ser a¨²n peor para el Sevilla si Viera hubiese aprovechado otra r¨¢pida transici¨®n cortes¨ªa de Bad¨¦ para poner el 2-0. Solo ante Nyland, el canario err¨® en la definici¨®n y los de Quique se fueron al descanso con vida y a¨²n en el partido. Antes del trepidante desenlace del primer acto hubo trabajo para De Burgos Bengoetxea y el VAR, que decidieron no entrar a valorar dos acciones muy al l¨ªmite que pudieron acabar en penalti: primero una mano de Radovanovic y luego un agarr¨®n de Kike Salas a Lozano.

Al Sevilla le toc¨® remar de nuevo a pesar de su buena puesta en escena. El Almer¨ªa sigui¨® lanzando contras muy peligrosas y roz¨® el segundo gol en varias ocasiones. La m¨¢s clara la tuvo Viera, pero envi¨® a las nubes una gran jugada trazada por Embarba y Centelles. Sin embargo, la contra buena la firmaron Isaac Romero y Lukebakio tras una p¨¦rdida de Embarba. El belga reapareci¨® con una excelente definici¨®n para igualar en el 81¡ä un partido que pintaba a drama para el equipo de Quique.

Isaac volvi¨® a ser decisivo en el resurgir sevillista, aunque esta vez no tuvo a En Nesyri como socio ni al gol como aliado. El canterano encontr¨® en la recta final su lugar en el partido con dos asistencias (ya suma cuatro), la segunda de ellas fue un disparo que Ocampos convirti¨® en pase de gol para hacer el 1-2 tras un saque de esquina.

El golpe no tumb¨® al Almer¨ªa, que aun sabi¨¦ndose desahuciado y condenado a Segunda, contin¨²a compitiendo con orgullo y determinaci¨®n. Tampoco le dio ante el Sevilla para ganar, pero al menos s¨ª para empatar y sumar su d¨¦cimo punto de la temporada. Arribas puso un centro medido desde la derecha y Marezi la puso con la cabeza en la red con la connivencia de Bad¨¦.

Gan¨® el caos. El 2-2 no dej¨® satisfecho a nadie. El Almer¨ªa se vio otra vez muy cerca de lograr su primera victoria y el Sevilla se dej¨® empatar despu¨¦s de hacer lo m¨¢s dif¨ªcil, remontar un resultado adverso.