Dani Olmo, al 33,4%

Indiscutiblemente brillante cuando est¨¢ en la hierba por su categor¨ªa futbol¨ªstica, el Bar?a est¨¢ viendo, sin embargo, poco a Dani Olmo esta temporada de su regreso al club azulgrana. El delantero de Terrassa, firmado este verano procedente del RB Leipzig, apenas suma 962 minutos oficiales de los 2.880 potenciales que podr¨ªa haber disputado. Eso supone apenas un 33,4% del tiempo que podr¨ªa haber estado en la hierba. El porcentaje, adem¨¢s, bajar¨¢ al 32,3% porque, previsiblemente, tambi¨¦n se perder¨¢ el partido contra el Atalanta. Adem¨¢s de perderse 14 partidos (ocho por lesi¨®n, dos por decisi¨®n t¨¦cnica en los que no se movi¨® del banquillo, y cuatro por sus problemas con la inscripci¨®n, primero en agosto y luego a principios de enero), que ser¨¢n 15 por su ausencia ante el Atalanta, Olmo solo ha jugado un partido completo, el de Copa contra el Betis en el que, por cierto, se estren¨® con ¨¦xito como falso nueve a las ¨®rdenes de Flick.

No est¨¢ siendo una temporada f¨¢cil para Dani Olmo, pese a que desde el principio desprendi¨® aroma de jugador especial. Su aparici¨®n en Vallecas, donde cambi¨® el partido, anunci¨® un fichaje de una dimensi¨®n especial. En sus tres primeros partidos marc¨® tres goles, todos espectaculares, especialmente el de Girona. Su encaje en el juego del grupo y su entendimiento con Raphinha, Pedri y Lamine permit¨ªa (y permite) so?ar con sociedades m¨¢gicas. Pero precisamente se lesion¨® muscularmente en Montilivi. Desde entonces, sus mejores partidos (el derbi contra el Espanyol y Dortmund) ya han sido m¨¢s contados.

El delantero del Bar?a tambi¨¦n pas¨® unos d¨ªas dif¨ªciles en Navidad. Pese a que intent¨® desconectar con un viaje a Estados Unidos, concretamente a Wisconsin, para ver en directo a Damian Lillard, quien inspir¨® su celebraci¨®n toc¨¢ndose una mu?eca (Dame Time), los reveses fueron permanentes. Primero, del Juzgado de lo Mercantil, luego del Tribunal de Primera Instancia. Y, finalmente, de LaLiga, que decidi¨® desinscribirlo, y la RFEF, que confirm¨® la baja de su licencia, luego revocada por la cautelar¨ªsima del CSD.

Dani Olmo lleva a?os trabajando para luchar contra problemas f¨ªsicos que, curiosamente, siempre se manifiestan en los inicios de temporada. En la 2021-22, sufri¨® dos roturas de fibras que le dejaron sin jugar en octubre y diciembre. En la 2022-23, fue castigado por una rotura de ligamento de la rodilla izquierda; y el curso pasado, atacado por una voladura acromioclavicular. Sin embargo, el de Terrassa suele terminar las temporadas sano y, sobre todo, en forma. No hay mejor ejemplo que el pasado verano, cuando lleg¨® fresco de piernas a la Eurocopa y fue a recital por partido desde octavos. Contra Georgia, marc¨® en Colonia. En los cuartos de final, jug¨® un partido memorable contra Alemania, con gol y asistencia en el momento hist¨®rico de Mikel Merino. En la semifinal le marc¨® el 2-1 a Francia; y en la final tuvo un momento hist¨®rico cuando salv¨® bajo palos el 2-2 de Inglaterra cerca del minuto 90.

Cerca de reaparecer, y aunque pendiente a¨²n de que haya o no alg¨²n tipo de resoluci¨®n acerca de la cautelar¨ªsima concedida por el CSD, Olmo tiene fe en regresar fuerte y convertirse en un factor clave en lo que queda la temporada. Condiciones tiene de sobra. Para jugar de enlace, su posici¨®n natural, de falso nueve, como en el partido ante el Betis. Pero tambi¨¦n para sacrificarse y defender con los dientes en una banda cuando el equipo est¨¢ con uno menos, como hizo en Yeda en la final de la Supercopa. Su 100% est¨¢ lejos de lo que ha demostrado a¨²n. Porque es mucho.

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