Carboni: ¡°Marc¨® Vicente... y ya me v¨ª en este balc¨®n festejando el Doblete¡±

Hoy se cumplen 20 a?os de la Liga, su sexta, que conquist¨® el Valencia con su victoria en el S¨¢nchez Pizju¨¢n. Diez d¨ªas despu¨¦s, aquel equipo de leyenda levant¨® tambi¨¦n la Copa de la UEFA en Gotemburgo. Radio Valencia Cadena SER y Diario AS conmemoran esta tarde aquel hist¨®rico Doblete con un emotivo acto en el espacio cultural La Rambleta (19:30 horas, en directo por As.com) y, como pre¨¢mbulo, Amedeo Carboni (Arezzo, 1965), para muchos el mejor lateral izquierdo de la historia blanquinegra, recuerda aquellos a?os desde el balc¨®n del Ayuntamiento de Valencia, ¡°donde cierro los ojos y a¨²n veo a miles y miles de personas felices por lo que hicimos¡±.

Lleg¨® al Valencia con 31 a?os y no dijo adi¨®s hasta los 40. Entre medias gan¨® 7 t¨ªtulos. Quien pensara que usted vino a Espa?a para retirarse se equivoc¨®.

Yo vine a Espa?a a competir y, la verdad, sali¨® todo muy bien. Cuando llegu¨¦ (1997) ven¨ªa tocado del tend¨®n. F¨ªsicamente no estaba bien. Pero aterric¨¦ un jueves y el domingo me dijo Valdano: ¡°Juega en el Camp Nou¡±. Me expulsaron. Sum¨¦ dos rojas en los cinco primeros partidos... y nadie me reprochaba nada por la calle. Yo ven¨ªa de Italia, que por menos ni sal¨ªas de casa. Recuerdo que le dije a mi mujer: ¡°Si con el respeto que tiene la gente aqu¨ª no acabo siendo leyenda... qu¨¦ mal lo habr¨¦ hecho¡±.

Pues s¨ª, se hizo leyenda...

Valencia era un para¨ªso. Yo viv¨ªa la ciudad. Era jugador en Mestalla y ciudadano en la calle. Ese fue uno de los secretos del vestuario, que palp¨¢bamos el sentimiento de la gente. Al principio me cost¨® entender la forma de vivir el f¨²tbol aqu¨ª. En Italia en los 90 hab¨ªa mucha m¨¢s disciplina, rigor. Recuerdo que en El Saler, horas antes de jugar un partido, nos daban paella para comer. El primer d¨ªa fui al cocinero y le dije: ¡®A m¨ª, arroz blanco, por favor¡¯. Despu¨¦s, yo estaba acostumbrado al silencio, a una concentraci¨®n m¨¢xima, y aqu¨ª en el autob¨²s todo eran risas, el vestuario era una discoteca... A los dos meses me di cuenta de que el tonto era yo, que ese buen rollo era clave.

?Cu¨¢l es su recuerdo de aquel Doblete de 2004?

El gol de Vicente de penalti en Gotemburgo. Tras las dos finales de Champions que perdimos, la UEFA era una final europea que no se nos pod¨ªa escapar. Cuando Vicente lo marc¨®, aunque todav¨ªa quedaba toda la segunda parte, ya me ve¨ªa festejando el Doblete en el balc¨®n del Ayuntamiento. Sab¨ªa que no se nos iba ese t¨ªtulo.

Valencia era un para¨ªso. Yo viv¨ªa la ciudad. Era jugador en Mestalla y ciudadano en la calle¡±

Carboni

?Qu¨¦ destacar¨ªa de ese Valencia de Ben¨ªtez?

Muchas cosas. Solo as¨ª le pod¨ªas competir al Madrid de los Gal¨¢cticos, al Barcelona de Rivaldo y Ronaldinho, a un gran Deportivo... Una mezcla excelente de juventud y veteran¨ªa; much¨ªsimo talento: Aimar, Mista, Vicente, que era el mejor extremo del mundo... Y una afici¨®n que nos empuj¨® al cielo. La ciudad era feliz, por el Valencia CF y tambi¨¦n porque en esos a?os el crecimiento de Valencia fue brutal, un ¡®boom¡¯ econ¨®mico y social.

Una de las im¨¢genes de aquella celebraci¨®n fue la suya con la peluca naranja.

La peluca la hizo famosa Jaume Ort¨ª, que fue un presidente encantador, una sensacional persona. ?l siempre ten¨ªa su hombro preparado para nosotros si lo necesit¨¢bamos. No recuerdo como acab¨® una peluca en mis manos, pero me la puso nada m¨¢s llegar en el autob¨²s y ya no me la quit¨¦. Ese d¨ªa, en el trayecto del aeropuerto al centro, alguno pudo perder la cabeza en los puentes de entrada a Valencia (r¨ªe). Yo ten¨ªa casi 39 a?os, si no viv¨ªa al m¨¢ximo esa celebraci¨®n¡­ Y lo hice. Yo y todos. Miles de personas. Fue precioso.

?Ese Valencia jugaba de memoria?

Jug¨¢bamos con rigor, compitiendo siempre al m¨¢ximo. Fue un Valencia que empez¨® a construirse con Ranieri, despu¨¦s con C¨²per y fue el mejor con Ben¨ªtez. Con ¨¦l jug¨¢bamos un poquito m¨¢s al ataque y menos al contragolpe. Era un vestuario muy responsable. Como te dec¨ªa antes, la combinaci¨®n de gente joven y veterana fue muy buena. El bloque se mantuvo durante muchos a?os: Ca?izares, Ayala, Albelda, Kily, Angulo¡­ y a ¨¦l se fueron incorporando grandes jugadores como Marchena, Baraja, Mista, Vicente, Aimar¡­ Era un equipo muy competitivo.

?Imaginaba vivir en Valencia todo lo que vivi¨®?

Te mentir¨ªa si te dijera que s¨ª¡­ pero s¨ª te digo que cuando lleg¨® Ranieri empec¨¦ a pensar que se estaba creando algo que con tiempo pod¨ªa tener buena pinta. Y mira que estuvo a punto de irse a la calle antes de tiempo, porque de no ser por un gol de Mendieta en San Sebasti¨¢n¡­ Pero Ranieri sab¨ªa perfectamente lo que quer¨ªa y lo que ten¨ªa que hacer. Si algo bueno tiene como entrenador es que hace grupo y para ello ten¨ªa antes que hacer limpieza. Hab¨ªa muy buenos jugadores, pero no sent¨ªan el club, jugaban para s¨ª mismos. No era un equipo f¨¢cil: Romario, Ariel Ortega, Sa?b¡­ mis amigos de Italia me llamaban y me dec¨ªan: ¡°All¨ª necesit¨¢is cinco o seis balones para jugar todos, porque alguno necesita un bal¨®n para ¨¦l solo¡±.

Fue un Valencia que empez¨® a construirse con Ranieri, despu¨¦s con C¨²per y fue el mejor con Ben¨ªtez¡±

Carboni

En la temporada 2003/2004, a sus casi 39 a?os, jug¨® 48 partidos. Su segunda mejor cifra en sus 9 a?os en Valencia, ?las rotaciones de Ben¨ªtez no iban con usted?

Bueno, me conservaba bien (r¨ªe). Mira, recuerdo que cuando lleg¨® Rafa, en el primer entrenamiento, me dijo: ¡°No te preocupes que te voy a ir dosificando¡±. Durante toda la ma?ana le di vueltas a esa frase, as¨ª que antes de irme a casa entr¨¦ a su despacho y le dije: ¡°M¨ªster, que yo tenga 35 o 25 a?os es lo de menos. No me trate como a un viejo que solo est¨¢ aqu¨ª para retirarse y hacer vestuario. Si ve que pudo jugar, me pone, si no, no¡­¡±. Y fui titular en sus tres a?os en el Valencia.

Antes de terminar y aprovechando que estamos en el balc¨®n del Ayuntamiento, cierre los ojos y d¨ªgame que ve¡­

(Los cierra) Veo a miles y miles de personas felices por lo que hicimos. Me veo feliz. ?Y sabes de qu¨¦ me estoy acordando?

?De qu¨¦?

Pues es curioso lo que me viene a la mente. Recuerdo que los jugadores ten¨ªamos que pedir al club las entradas para nuestros compromisos con 15 d¨ªas de antelaci¨®n, porque de lo contrario nos qued¨¢bamos sin ellas porque Mestalla estaba siempre lleno. Aquellos a?os fueron tremendos.

Para muchos, los mejores de nuestras vidas.

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