Aspas atraviesa la peor sequ¨ªa de su carrera

Uno de los motivos que explican el mal arranque del Celta se puede encontrar en la sequ¨ªa goleadora que atraviesa Iago Aspas, la peor de su carrera deportiva. El ¨²ltimo tanto del moa?¨¦s data del pasado 18 de marzo, cuando bati¨® a Pacheco desde el punto de penalti. Desde entonces han transcurrido un total de 1.500 minutos sin llevarse el dedo al pecho para se?alarse el escudo, una de las celebraciones m¨¢s ic¨®nicas de la Liga. De esas 25 horas sin festejar un tanto, una hora y media fue con la Selecci¨®n y el resto con su bien querida camiseta celeste. Hoy se cumplen siete meses y tres d¨ªas de aquel gol en Cornell¨¤, un periodo de tiempo que ha ido llenando el vaso de la ansiedad de la estrella celeste.

Si bien es cierto que ya super¨® etapas de sequ¨ªa m¨¢s largos al fichar por el Liverpool, en aquellos tiempos no ten¨ªa la continuidad de la que goza ahora. Pasaron siete meses y diez d¨ªas desde su ¨²ltimo gol celeste en la primera etapa hasta su ¨²nico tanto con el conjunto ingl¨¦s y nueve meses de ese gol en Anfield a su primera diana como sevillista. Pero por entonces Aspas jugaba a cuentagotas, por lo que no fueron sequ¨ªas tan pronunciadas.

La ansiedad empieza a invadir al moa?¨¦s cuando se acerca a porter¨ªa, tal y como se pudo ver en el penalti fallado en el anterior partido liguero frente al Getafe o en otras ocasiones claras que la estrella celeste acostumbra a marcar con los ojos cerrados. Es la ansiedad quien le pone la zancadilla en cada remate.

Creaci¨®n.

La finalizaci¨®n es el ¨²nico pero que se le puede poner a Aspas en este inicio de Liga. De hecho, el moa?¨¦s ha sido el mejor de su equipo en muchos partidos y dispone de un dato que habla por s¨ª solo: es el jugador de la Liga que m¨¢s ocasiones genera. Suma dos asistencias, una en Almer¨ªa y otra en Montj¨¹ic frente al Barcelona, donde se march¨® aplaudido por la afici¨®n rival hacia el banquillo mientras observaba el 0-2 en el videomarcador. A ra¨ªz de su salida, lleg¨® la fat¨ªdica remontada.

Ese buen rendimiento del moa?¨¦s hace que su mala racha goleadora no levante preocupaci¨®n en el entorno c¨¦ltico. Tanto los compa?eros como el cuerpo t¨¦cnico y, sobre todo, la afici¨®n saben que los goles de Aspas son como la lluvia, al final siempre acaban llegando.

Adem¨¢s, los problemas de espalda que tanto le lastraron en el final de la temporada anterior parecen ser cosa del pasado. Iago Aspas ha participado en todos los partidos sin ning¨²n tipo de molestia y prueba de ello es el buen rendimiento ofrecido de forma continuada. El partido de esta noche ante el Atl¨¦tico es una nueva oportunidad para acabar con ese mal fario de cara a puerta y vaciar de una vez por todas el vaso de la ansiedad.

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