Jos¨¦ Rodr¨ªguez vuelve a Israel: ¡°Si me pasa algo ser¨¢ responsabilidad de la FIFA¡±

El pasado 7 de octubre, mientras Israel celebraba la festividad del Sucot, grupos armados de milicianos palestinos, principalmente de Ham¨¢s, lanzaron un ataque contra Israel desde la Franja de Gaza. Fue el comienzo de un conflicto que parece no tener fin. Un enfrentamiento armado que, como no pod¨ªa ser de otra manera, afect¨® al deporte, llevando a la suspensi¨®n de la Ligat ha¡¯Al y provocando la salida del pa¨ªs de pr¨¢cticamente todos los futbolistas y entrenadores extranjeros. Es el caso de Jos¨¦ Rodr¨ªguez (Villajoyosa, 1994), que huy¨® de Israel junto a su mujer y sus tres hijos pero se ha visto obligado a regresar ante el inminente regreso a la competici¨®n de su club, el Hapoel Tel Aviv. ¡°No me quedaba otra. Hemos tenido la mala suerte de que la FIFA no se ha pronunciado y tengo que cumplir mi contrato¡±, descubre en AS Rodr¨ªguez, quien lanza un mensaje a la instituci¨®n que gobierna las federaciones de f¨²tbol a nivel global: ¡°Si a alg¨²n futbolista extranjero le pasa algo, ser¨¢ responsabilidad de la FIFA. Hablamos de un pa¨ªs que se ha declarado en guerra. Conozco a mucha gente que no quiere regresar¡±.

¡°Todo el mundo sabe que yo amo a Israel y no tengo ning¨²n problema en volver. De hecho, aqu¨ª estoy. El contrato me podr¨ªa haber dado igual. Podr¨ªa haber ido a tribunales y creo que habr¨ªa ganado, pero no voy a llegar a ese punto y menos con un pa¨ªs y un club que me han tratado tan bien. Una parte de m¨ª se siente israel¨ª¡±, aclara Jos¨¦ Rodr¨ªguez, que ¡°esperaba que a los jugadores extranjeros se nos hubiera dado la oportunidad de elegir¡±. ¡°Me habr¨ªa gustado tomar la decisi¨®n por m¨ª mismo y no porque me ¡®obligaran¡¯¡±, a?ade el centrocampista alicantino horas despu¨¦s de tomar tierra, esta vez en solitario, en Tel Aviv. ¡°Aqu¨ª la vida es totalmente normal. Cuando est¨¢s aterrizando miras por la ventana temiendo ver algo raro, pero ni mucho menos. S¨ª que vi algo diferente y son las fotos de los secuestrados, que est¨¢n puestas todas en el aeropuerto. Casi se me caen las l¨¢grimas al verlos. Al llegar me junt¨¦ con mi ¡®familia¡¯ de aqu¨ª, recogimos unas pizzas y nos las tomamos en la terraza de casa. Si no ves la televisi¨®n ni las redes sociales, no te enteras de que est¨¢s en un pa¨ªs en guerra¡±.

Jos¨¦ Rodr¨ªguez define su regreso a Israel con una palabra: normalidad. Lo que no es normal es que un futbolista espa?ol vuele a un pa¨ªs en guerra del que huy¨® hace poco m¨¢s de un mes. ¡°Poco despu¨¦s de aterrizar me par¨® la polic¨ªa para hacerme un control. Se sorprendieron cuando me vieron. Me dijeron que c¨®mo pod¨ªa volver a Israel en este contexto¡±, detalla el futbolista vilero. Su mujer y sus tres hijos permanecen en Villajoyosa, ¡°el mejor pueblo de Espa?a¡±. ¡°Se tomaron muy mal mi marcha. Son conscientes de que he regresado a un lugar del que tuvimos que salir corriendo hace solo unas semanas, mientras no paraban de sonar sirenas y alarmas¡±, confiesa Rodr¨ªguez, cuyos padres son los que m¨¢s sufren: ¡°Ellos y mis hermanos no conocen el pa¨ªs y se sintieron muy mal al saber que ten¨ªa que volver. Me escriben a todas horas, pero saben que estoy bien. Si estuviera mal, no se lo dir¨ªa porque no quiero preocuparlos, pero la verdad es que hasta ahora todo est¨¢ bien¡±.

¡°Admiro la entereza de los israel¨ªes. En Espa?a saldr¨ªamos por patas¡±

La Ligat ha¡¯Al, primera categor¨ªa del f¨²tbol de Israel, se retomar¨¢ el ¨²ltimo fin de semana de noviembre, aunque la Segunda Divisi¨®n celebra partidos desde el pasado viernes. ¡°Supongo que servir¨¢ como test de cara a la reanudaci¨®n de Primera¡±, prev¨¦ Jos¨¦ Rodr¨ªguez, que es consciente de que los planes de la Federaci¨®n podr¨ªan cambiar en cualquier momento: ¡°Yo digo que todo est¨¢ normal porque es como lo siento, pero nadie me asegura que no vayan a caer 30 bombas ma?ana. Supongo que, si sucede algo grave, el f¨²tbol israel¨ª volver¨¢ a parar¡±. La Ligat ha¡¯Al regresar¨¢ sin p¨²blico, pero cada equipo jugar¨¢ en su estadio y es dif¨ªcil prever si los partidos entre clubes estrechamente relacionados con la derecha israel¨ª, como es el caso del Beitar Jerusal¨¦n, y equipos con sede en ciudades de mayor¨ªa ¨¢rabe, como el Bnei Sakhnin, podr¨¢n desarrollarse con normalidad. ¡°Yo tuve una peque?a discusi¨®n con el club porque quer¨ªa viajar m¨¢s tarde. Si se retrasa el regreso de la competici¨®n, ?qu¨¦ hago yo un mes aqu¨ª sin jugar?¡±, cuestiona Jos¨¦ Rodr¨ªguez, que agradece no haber escuchado a¨²n las sirenas que advierten sobre el lanzamiento de cohetes hacia suelo israel¨ª: ¡°Un compa?ero me dijo que suenan pr¨¢cticamente todos los d¨ªas, pero yo no las he escuchado todav¨ªa¡±.

Jos¨¦ Rodr¨ªguez s¨ª oy¨® el aviso de que Israel estaba siendo atacada el pasado 7 de octubre, un d¨ªa que describe como ¡°una pel¨ªcula de terror¡±. ¡°En mis cuatro a?os en Israel, apenas me hab¨ªa refugiado en el b¨²nker una o dos veces. En los ataques del 7 de octubre lanzaron 9.000 cohetes e impactaron cuatro; cuando lanzan uno o dos, ni te preocupas, el peligro es nulo. Pero cuando nos informaron que el ej¨¦rcito no ten¨ªa la situaci¨®n controlada, sentimos miedo. La Mosad (inteligencia israel¨ª) siempre sabe lo que va a pasar, pero en esta ocasi¨®n perdi¨® el control. Al meterte en el b¨²nker durante los ataques de misiles, lo normal es que no te pase nada; sin embargo, al ver en la televisi¨®n que entraron a pie sientes escalofr¨ªos. Y cuando ves que matan a todo el mundo, que entran en las casas, queman los b¨²nkeres... No sabes d¨®nde est¨¢n y eso da mucho miedo¡±, explica Rodr¨ªguez, quien tambi¨¦n lamenta la escasa ayuda recibida por parte del Gobierno de Espa?a: ¡°La Embajada pr¨¢cticamente no me ayud¨®, aunque es verdad que cuando se trata de pagar impuestos son los primeros en llamar. Pero, ?por qu¨¦ se van a preocupar por los ciudadanos que estamos en Israel cuando est¨¢n centrados en pactar con un pr¨®fugo de la justicia? No es algo que me sorprenda¡±.

A Jos¨¦ Rodr¨ªguez le ¡°sorprende¡± que el f¨²tbol de ¨¦lite vaya a regresar a Israel el pr¨®ximo fin de semana, as¨ª como ¡°la tranquilidad que hay en Tel Aviv cuando a 40 kil¨®metros se vive una guerra total¡±. El centrocampista espa?ol confiesa admirar ¡°la entereza de los israel¨ªes¡± porque cree que, ¡°si pasara algo parecido en Espa?a, a todos nos faltar¨ªan piernas para correr¡±. Sin embargo, eso no evita que los israel¨ªes con los que comparte vestuario est¨¦n ¡°tristes¡± por la cantidad de bajas que ha sufrido Israel, ya que ¡°para ellos, sus compatriotas lo son todo¡±. Rodr¨ªguez revela que el vestuario est¨¢ ¡°ansioso¡± por jugar ¡°y poder darle alegr¨ªas a la gente¡±. ¡°Nuestros aficionados necesitan distraerse un poco y el f¨²tbol, al fin y al cabo, es un espect¨¢culo y sirve para entretener. Esperamos que puedan dejar de pensar en la guerra al menos durante las dos horas que dura el partido¡±, agrega el futbolista, que pone su casa y sus manos al servicio de Israel: ¡°Yo no me voy a poner en el frente, pero si me tengo que poner a cocinar o tengo que abrir las puertas de mi casa para que los soldados puedan descansar, estoy dispuesto a hacerlo. Yo en mi vida he cogido un arma y si la tuviera que coger creo que me disparar¨ªa a m¨ª mismo¡±.