¡°Quer¨ªa plasmar en una novela todo lo que en el f¨²tbol no se cuenta¡±
La periodista Lorena Gonz¨¢lez aborda en su primera novela, ¡®Guarda Silencio¡¯, un tema prohibido en el f¨²tbol masculino como la homosexualidad para hablar de las personas que habitan a los jugadores. El resultado es una obra tot¨¦mica, que edita Plaza y Janes, y presentar¨¢ en Madrid el viernes 13 de septiembre.
Lorena Gonz¨¢lez (Barcelona, 1984; 39 a?os) tiene una voz c¨¢lida, de esas que abrazan. Quiz¨¢ por ello, su puerta al mundo del periodismo fue ese: el de la radio. En el verano de 2010, cuando Iniesta marc¨® el gol en Sud¨¢frica que hizo a Espa?a campeona del mundo y en el equipo de Paco Gonz¨¢lez reci¨¦n aterrizado en la Cadena Cope. Despu¨¦s llegar¨ªa Onda Cero y la televisi¨®n (colabora en Estudio Estadio desde hace 13 a?os). Pero tambi¨¦n la prensa escrita. Marca entonces, ahora Relevo, lugares que llenar de reportajes y entrevistas humanas, en las que se tocan las personas que habitan los futbolistas, y que casi nunca se ven, se atreven a dejarse ver. M¨ªtico fue aquel reportaje en el que Santi Cazorla mostr¨® sus tatuajes en el pie desfigurados por los injertos que necesit¨® para recuperarse de una largu¨ªsima lesi¨®n de tobillo. Sus reportajes en Uruguay y/o Argentina, las otras tierras que habita, aunque est¨¦n a un oc¨¦ano. Su forma de escribir, entre la prosa y la poes¨ªa. Un c¨®ctel que solo pod¨ªa tener un final: una novela en la que conjugar todo. Se llama ¡®Guarda silencio¡¯ (Plaza y Janes) y, adem¨¢s de afrontar un tema que solo se puede imaginar, que pasar¨ªa si una gran estrella del f¨²tbol sale del armario, algo que nunca ha sucedido, conjuga muchos temas m¨¢s all¨¢. La salud mental, las injusticias, los entresijos de un vestuario, el miedo... Entre los diez libros m¨¢s vendidos de ¡®Ficci¨®n de F¨²tbol¡¯ en Amazon, la autora lo presentar¨¢ el pr¨®ximo viernes 13 de septiembre en el Corte Ingl¨¦s de Castellana en un acto de entrada libre hasta completar aforo presentado por el periodista Juan Carlos Rivero. Antes charla con AS.
Hablemos de libros. ?Cu¨¢l es su favorito de f¨²tbol?
Esa es f¨¢cil (sonr¨ªe, inmenso): ¡®F¨²tbol a sol y sombra¡¯, de Eduardo Galeano.
¡®Guarda Silencio¡¯ es su primera incursi¨®n como escritora, ?c¨®mo lo ha afrontado? Porque usted ha hecho muchas entrevistas, muchos reportajes, muchas historias humanas, pero una novela son palabras mayores, y un terreno desconocido. ?C¨®mo ha sido ese salto a la ficci¨®n?
No me ha sido tan complicado porque ten¨ªa la idea muy clara y eso me ha ayudado. Ten¨ªa claro el principio, el desarrollo y el desenlace. Luego no han parado de salir un mont¨®n de experiencias personales, profesionales y vitales propias en la novela. Me iba acordando sobre la marcha. Iban apareciendo personajes, que tomaban m¨¢s fuerza, o lugares. He estado escribiendo, por ejemplo, en Argentina y la novela se desarrolla ah¨ª. Y en Madrid y Uruguay, que es el sitio de calma para el protagonista, como para m¨ª.
¡°Si alguien el d¨ªa de ma?ana antes de juzgar o prejuzgar se lo piensa dos veces, esta novela habr¨¢ merecido la pena¡±
Lorena Gonz¨¢lez
?De d¨®nde le surge la historia? Porque lo que cuenta ¡®Guarda silencio¡¯ es algo que puede ocurrir en el f¨²tbol masculino pero nunca nadie lo ha hecho p¨²blico.
En un primer momento me propusieron escribir una novela sobre f¨²tbol femenino. Pero yo no he tenido el suficiente contacto, s¨ª con el masculino. Y ah¨ª que cre¨ªa que ten¨ªa muchas historias que contar. Sent¨ªa, al haber hecho muchas entrevistas con futbolistas, que hab¨ªa un lado que apenas se contaba. A veces te lo proh¨ªbe el club, a veces los asesores de prensa, a veces el propio jugador o el agente... Y dejamos de conocer, cada vez m¨¢s, el otro lado, el m¨¢s humano del futbolista. Y yo ten¨ªa ganas de plasmar precisamente eso en un libro. Despu¨¦s la novela te permite imaginarte un mont¨®n de cosas y ponerte en situaciones extremas, a ver qu¨¦ pasar¨ªa en ese tipo de circunstancia.
En ¡®Guarda silencio¡¯ realmente se toca al futbolista por dentro. Al futbolista persona. M¨¢s all¨¢ del tema central, una gran estrella masculina que sale del armario, que es muy valiente y algo que solo desde la ficci¨®n se ha abordado, ¡®11¡ä de David Cano es otro ejemplo, tiene un valor humano brutal porque te permite conocer a las personas que hay detr¨¢s de los futbolistas. Eso le da mucho valor.
Yo no ten¨ªa ganas de escribir sobre f¨²tbol o futbolistas en s¨ª. Pero si sacaba el lado persona, y todos los estamentos: esta novela puede tocar, remover conciencias o conmover porque al final todos estamos representados. To-dos. Para bien y para mal. Los medios, las directivas, los jugadores, la sociedad, las redes sociales¡ Todos podemos sentirnos identificados y nos puede hacer reflexionar. Y, si alguien el d¨ªa de ma?ana antes de juzgar o prejuzgar se lo piensa dos veces, esta novela habr¨¢ valido la pena. Este es un momento en el que cada vez tenemos menos acceso al futbolista-persona porque, si bien las redes sociales nos acercan mucho a ellos, en realidad nos est¨¢n alejando. Son un escaparate. Al final todos mostramos el lado bueno. Entonces, creo, ahora estamos equivocados al pensar que tenemos m¨¢s contacto con los futbolistas. Todo lo contrario. No acabamos de conocerles. Y tiene que aparecer un Morata, o un Iniesta, o un Ricky Rubio, para contar lo que realmente pasa, sucede.
?Cu¨¢ntos futbolistas homosexuales cree usted que puede haber hoy en el f¨²tbol masculino? Y que no son capaces de salir del armario.
Muchos (resopla). Por estad¨ªstica tiene que haber. Hay varias teor¨ªas al respecto. Dicen que cuando hay mucha testosterona en un deporte no hay tanta homosexualidad entre hombres, pero yo creo que todo se ci?e a que falta libertad para uno aceptarse y descubrirse, m¨¢s all¨¢ de que luego lo hagan p¨²blicamente. Yo me he encontrado futbolistas que, seguramente, si estuvieran en otro espacio en el que desarrollarse, probablemente lo reconocer¨ªan. Y creo que estamos muy cerca de que eso suceda.
El libro lleva casi dos meses en la calle, ?cu¨¢l es la felicitaci¨®n que m¨¢s te ha llegado de gente del f¨²tbol?
Mira, hay varios futbolistas y entrenadores a los que, en un principio, cuando le cont¨¦ la idea de lo que estaba escribiendo, algunos me dec¨ªan que no era un tema que hiciera falta tocar. Como que les quedaba muy lejos. Se quedaban con que estaba escribiendo una novela de la homosexualidad en el f¨²tbol, y en realidad se tratan un mont¨®n de temas. Todos los que tengan que ver con lo que no se cuenta. La salud mental, el desarraigo, las injusticias, la inseguridad, el duelo. Y el machismo, el racismo, los entresijos de un vestuario, el miedo¡ Un mont¨®n de subtemas, pero se quedaban con lo de la homosexualidad. Y una vez la han le¨ªdo, lo que han visto es que al futbolista se le humaniza. Y creo que eso s¨ª que les ha gustado. A lo mejor algunos no han empatizado con la situaci¨®n de la homosexualidad, porque no lo son, pero s¨ª con todo lo que hay detr¨¢s. Incluso me han dado las gracias, por decir: ¡°Joe, es que es verdad, es que esto es lo que vivimos, y es muy injusto y la gente no lo sabe¡±.
Es cierto que el t¨®pico que se tiene de los futbolistas es que no leen, no van al cine, que son fr¨ªvolos m¨¢s bien¡ Nada que ver con su personaje, Gabriel.
(R¨ªe) S¨ª (silencio). Por eso aparece Gabriel.
La ant¨ªtesis. Se me viene a la cabeza Forl¨¢n, que iba a los entrenamientos del Atl¨¦tico con libros de Kapuscinski bajo el brazo, o Azpilicueta cuyo hobby en las concentraciones es leer, o Juan Mata, cuyo autor favorito es Murakami¡
Gabriel derriba el estereotipo de futbolista fr¨ªvolo, que no se interesa m¨¢s all¨¢ de lo que no es el f¨²tbol, que no tiene inquietudes, ni por el teatro, la m¨²sica o el cine, que no lee, que solo escucha reggaeton¡ Pero s¨ª es cierto que yo me he encontrado m¨¢s el perfil de futbolista como Gabriel en Argentina, en Sudam¨¦rica, y por eso todo gira mucho tambi¨¦n en torno a esos lugares. Quer¨ªa plasmar que los hay. Futbolistas as¨ª. Con inquietudes. No s¨¦ si tiene que ver con que en Argentina, que es un pa¨ªs muy, muy lector, hay mucha conciencia de la terapia psicol¨®gica, conviven m¨¢s con ello y viven m¨¢s la calle tambi¨¦n. Gabriel lo primero que hace al llegar a Madrid es conocer la ciudad. Muchas veces vemos a jugadores llegar a Madrid, hospedarse a las afueras y no tener ni idea de la ciudad en la que est¨¢n. Que a veces tampoco pueden. Tambi¨¦n quer¨ªa contar a que a veces est¨¢n obligados a encerrarse en un hotel por el que dir¨¢n, por el acoso que pueden sufrir en las calles, por el miedo.
En el libro tambi¨¦n hay una cr¨ªtica al modo de actuar de los medios en la actualidad, focalizados en Pablo, un becario. ?Ha visto mucho cambiar la profesi¨®n desde que usted lleg¨®, en 2010?
A m¨ª me encanta el personaje de Pablo, el becario que en la primera p¨¢gina de la novela cuenta que ha habido un suicidio. Quer¨ªa destacar a trav¨¦s de ¨¦l la figura del periodista que a¨²n no est¨¢ corrompido, el que no tiene esa prisa de titulares, de hacerse famoso, que antepone primero los intereses de la persona-futbolista a los suyos. Me parec¨ªa que era importante hacerlo.
¡°Al final yo creo que esta novela puede tocar, remover conciencias o conmover, porque al final yo creo que todos estamos representados. To-dos. Para bien y para mal¡±
Lorena Gonz¨¢lez
?Por?
?l se preocupa de tener con el futbolista siempre una relaci¨®n de sumar, un v¨ªnculo desde lo humano. No desde la noticia, la carnaza. Por eso luego, cuando hay que dar una noticia, le ocurren a ¨¦l, porque los futbolistas saben que les van a cuidar. Y aqu¨ª tambi¨¦n quer¨ªa contar un poco la desconfianza que tienen los jugadores hacia los medios, que nos la hemos ganado, a pulso pero todav¨ªa conf¨ªo en que se puede recuperar siempre y cuando hagamos las cosas con ¨¦tica, tacto y susceptibilidad.
?Lo m¨¢s dif¨ªcil de este proceso?
La presi¨®n que yo misma me impon¨ªa. De estar a la altura. No es lo mismo cuando escribes y tienes un feed-back al instante, y adem¨¢s no es ficci¨®n, no es tan subjetivo. Aqu¨ª era ir escribiendo, escribiendo, escribiendo. Hab¨ªa d¨ªas que me sent¨ªa en el buen camino y, otros, en los que quer¨ªa borrarlo todo.
Me ha contado antes el feed-back precisamente de la gente del f¨²tbol. ?Y m¨¢s all¨¢ de esta? ?Qu¨¦ recibimiento est¨¢ teniendo ¡®Guarda Silencio¡¯?
Mejor de lo que me esperaba, la verdad. Yo no quer¨ªa era que solo la leyese o le interesara a la gente a que le gusta el f¨²tbol. Y personas a las que no me han escrito para decirme que han llorado con ella. Y a m¨ª con eso, que haya quien se haya emocionado con la historia, sin que les interese la competici¨®n o la vida en s¨ª del futbolista en lo deportivo, a m¨ª con eso ya, ?qu¨¦ mas? (sonr¨ªe, de nuevo inmenso, pero ahora un poquito m¨¢s).
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