¡®Hogar F¨²tbol¡¯ de Gabino S¨¢nchez: ¡°Un homenaje a los que no han llegado¡±

Una vida llena de lujos, regada con contratos millonarios y colmada con comodidades de todo tipo. As¨ª es como se tiende a imaginar al arquetipo de futbolista profesional. Parece dif¨ªcil ubicarlos en un plano m¨¢s terrenal. No se habla tanto de la dificultad del camino ni de los escenarios tan complicados a los que se tienen que enfrentar algunos de ellos. V¨ªctimas de dictaduras, de guerras, de hambre. Sufridores en silencio del racismo, de la xenofobia o de la homofobia. Hombres y mujeres que eligen aferrarse a un bal¨®n cuando su mundo se cae a pedazos.

Gabino S¨¢nchez Llamazares (Badajoz, 1981) ha querido darle su justo reconocimiento a estas personas, a estas v¨ªctimas de estos dramas. Lo ha hecho con Hogar F¨²tbol. Este libro, de la Editorial La Moderna y publicado en 2024, es el tercero que publica el escritor extreme?o tras la novela ?Olvidar¨¢s mi nombre? y el poemario Todav¨ªa las palabras. Hogar F¨²tbol, en sus 216 p¨¢ginas, recoge 15 relatos de futbolistas que sufrieron discriminaci¨®n. No obstante, m¨¢s all¨¢ de narrar sus historias, plantea problemas sociales a trav¨¦s del f¨²tbol. Era el objetivo de Gabino S¨¢nchez, economista, profesor y activista aparte de escritor y que tuvo a bien charlar con AS sobre este libro y sobre cuestiones como el racismo, la homofobia y, en suma, sobre preguntas que deber¨ªa plantearse cualquiera y que ¨¦l plasm¨® con maestr¨ªa y con el bal¨®n como hilo conductor.

-Lo primero de todo, enhorabuena por la publicaci¨®n de este libro. La primera pregunta es obligada: ?Qu¨¦ es lo que le movi¨® a escribirlo?

-Lo que me movi¨®, hace ya cinco a?os, fue una dualidad que existe en el deporte: que en ¨¦l encontramos lo mejor, como los valores de compa?erismo y de esfuerzo; y tambi¨¦n lo peor, como los insultos, el racismo, la xenofobia¡­ Yo, como aficionado al f¨²tbol, ve¨ªa que hab¨ªa personas con comportamientos o comentarios racistas que, al mismo tiempo, alababan o ten¨ªan de ¨ªdolos a futbolistas de su equipo que hab¨ªan pasado por esa misma situaci¨®n. No s¨¦ si es el desconocimiento lo que mueve ese tipo de comportamientos. Pens¨¦ que, a trav¨¦s del f¨²tbol, era un buen camino para dar visibilidad a esas personas que han sufrido muchas penurias y que han llegado a ser futbolistas.

-Algunos de esos futbolistas que fueron v¨ªctimas del racismo fueron Lamine Yamal y Nico Williams, dos de las estrellas de Espa?a en la pasada Eurocopa. ?Qu¨¦ opini¨®n le merece esto?

-En el libro aparece la historia de los hermanos Williams, que trata este tema. Es curioso c¨®mo, al inicio de la Eurocopa, hubo una pol¨¦mica racista con dos jugadores espa?oles como lo son Nico y Lamine. En cambio, en la misma Selecci¨®n, ten¨ªamos dos jugadores franceses (Le Normand y Laporte) nacionalizados y a Joselu, que naci¨® en Alemania. Se podr¨ªa haber generado pol¨¦mica por los cinco jugadores o por alguno de ellos y, en cambio, se mir¨® simplemente a los dos jugadores de color. Es curioso. No s¨¦, se le puede llamar de muchas maneras, pero es un ejemplo de racismo. Todas las cr¨ªticas se centran en los jugadores de color, cuando nacieron en Espa?a y, seg¨²n nuestra legislaci¨®n, son espa?oles.

-?Cree que los estamentos del f¨²tbol, como la UEFA o la FIFA, est¨¢n haciendo lo suficiente como para ponerle coto a estos comportamientos?

-Creo que hay avances. Pero, a lo mejor, a las personas que esperamos que los avances sean m¨¢s significativos nos parecen pocos. En los ¨²ltimos meses, se han recogido las primeras condenas por insultos racistas en las gradas espa?olas. Ya hay cierta conciencia de buena parte de la afici¨®n de que no son comportamientos aceptables dentro de una democracia en el siglo XXI.

-El libro recoge historias de todo tipo. Relatos de hambre, de guerras, de persecuciones, de dictaduras¡­ ?Cu¨¢l es la historia que m¨¢s le conmovi¨® conocer y contar?

-A m¨ª la que m¨¢s me conmovi¨® fue la de ?rp¨¢d Weisz. Es una historia que tiene un final tr¨¢gico. De c¨®mo una persona sin significarse religiosamente, simplemente por tener ascendencia jud¨ªa, termin¨® huyendo de diferentes pa¨ªses. Primero de Italia, luego de Francia y, por ¨²ltimo, de Holanda para acabar en un campo de concentraci¨®n y, finalmente, ir a Auschwitz para fallecer all¨ª. Aunque en el libro se menciona brevemente, Weisz tambi¨¦n pas¨® por la Primera Guerra Mundial, donde tambi¨¦n fue capturado. Vivi¨® las dos grandes guerras.

-¡®Hogar F¨²tbol¡¯ tambi¨¦n habla de Zamora, de Pusk¨¢s y de Kubala, que sufrieron la guerra en sus carnes. ?Cree que el f¨²tbol, en cierto modo, les sirvi¨® como un refugio?

-A algunos de ellos, s¨ª. Por ejemplo, Kubala o Pusk¨¢s encontraron una vida mejor fuera de su pa¨ªs, salieron de la pobreza y huyeron del estatus de exiliados gracias al f¨²tbol. Ricardo Zamora fue encarcelado por ambos bandos de la Guerra Civil. Eso le permiti¨® estar vivo, asesinar a un ¨ªdolo de masas era m¨¢s complicado. Otros, como Perico Escobal, son un ejemplo de que el f¨²tbol no les sirvi¨® para nada. De hecho, a Escobal apenas se le recuerda en Espa?a tanto a nivel de instituciones como a nivel de clubes.

-El caso de Zamora evoca a un t¨®pico muy repetido: el de no mezclar f¨²tbol y pol¨ªtica. ?Qu¨¦ opina al respecto?

-Yo pienso que somos personas antes que futbolistas, escritores o periodistas. Las personas, como bien dec¨ªa Caszely, tienen que opinar. Pertenecen a una sociedad y tienen que mostrar su opini¨®n. Adem¨¢s, los referentes de la poblaci¨®n tienen que encabezar esa lucha contra las injusticias. Parten de una situaci¨®n privilegiada y creo que deber¨ªan utilizar este altavoz como hacen, por ejemplo, los hermanos Williams.

-En general, ?piensa que los futbolistas se implican lo suficiente en las luchas sociales? ?O considera que pasan muy de puntillas?

-Hay de todo. Tenemos a los hermanos Williams, que son defensores de la lucha contra el racismo y tenemos a Xabi Alonso, que el curso pasado mostr¨® su apoyo en Alemania a todas las personas migrantes, a aquellas que buscan una vida mejor. Despu¨¦s, hay otros futbolistas que no opinan y tambi¨¦n hay personas que no tienen en cuenta las luchas sociales. Aunque en el libro no aparece, est¨¢ el caso de Dejan Lovren, el ex del Liverpool. ?l tiene mucha conciencia en el tema de los refugiados de la guerra que sufri¨®, pero no tiene conciencia en la defensa de la diversidad LGTBI. No abandera esa lucha, sino todo lo contrario.

Son personas antes que futbolistas, tienen que opinar.

Gabino S¨¢nchez Llamazares, autor de 'Hogar F¨²tbol'

-Ahora que alude a los derechos LGTBI, recordemos el cap¨ªtulo dedicado a Justin Fashanu. ?l acab¨® suicid¨¢ndose debido al acoso que recib¨ªa por no esconder su homosexualidad. ?Cree que alg¨²n d¨ªa se normalizar¨¢ este tema?

-La de Fashanu es una historia que impacta mucho. Cuando hablamos de otros protagonistas, como a los que les intentaron fusilar o como a ?rp¨¢d Weisz, que muri¨® en Auschwitz, parece que lo de Justin Fashanu no es para tanto. Pero, m¨¢s de treinta a?os despu¨¦s, sigue siendo el ¨²nico jugador de una gran liga que ha declarado su homosexualidad estando en activo. Esto nos hace pensar que no debe ser f¨¢cil, en un mundo del f¨²tbol tan masculinizado, que los jugadores declaren que son gays. Pienso que, m¨¢s temprano que tarde, esto se tendr¨¢ que normalizar. Si alg¨²n jugador declara que es gay, espero que los clubes y los jugadores lo apoyen. La diversidad existe en la sociedad y tiene que estar reflejada en el f¨²tbol.

-En cambio, en el f¨²tbol femenino est¨¢ mucho m¨¢s aceptado. Hay muchas jugadoras que s¨ª se han declarado abiertamente homosexuales. ?Por qu¨¦ cree que cuesta tanto en el f¨²tbol masculino?

-Es una pregunta complicada. Yo creo que el f¨²tbol siempre ha sido un deporte muy masculinizado. Los insultos a los rivales siempre han ido en ese sentido, siempre se ha dicho ¡®corres como una chica¡¯. Mucha gente lo dice sin pensar lo que significa, pero son actitudes que se han ido quedando en buena parte de la poblaci¨®n. Es posible que, parte del p¨²blico de los estadios, no aceptase esas declaraciones, que no aceptase a un futbolista declar¨¢ndose gay. Eso es lo que hace que los jugadores se retraigan y no confiesen la verdad. En cambio, el mundo del f¨²tbol femenino es m¨¢s reciente y tambi¨¦n puede que las mujeres sean m¨¢s abiertas de mente. Eso ha hecho que, desde el principio, la homosexualidad se viva con naturalidad y que nadie le ponga ninguna pega. En este caso, el f¨²tbol femenino es un ejemplo para el masculino. Que cada profesional del deporte pueda mostrar su afecto hacia el tipo de persona que quiera.

-Retomando a Dejan Lovren, hablemos de alguien con quien comparti¨® selecci¨®n: Luka Modric. Hace unas semanas, anunci¨® que dejaba el Real Madrid. ?C¨®mo cree que influy¨® la Guerra de los Balcanes en su posterior carrera en la ¨¦lite?

-En el libro figura que, seg¨²n sus entrenadores, la dura infancia que tuvo le hizo estar mal alimentado. Eso le impidi¨® ser tan corpulento como su padre o su t¨ªo. En ese sentido, esos entrenadores dicen que le vino bien para ser un futbolista. Me gustar¨ªa pregunt¨¢rselo alg¨²n d¨ªa en persona, pero supongo que esa infancia que vivi¨®, desde los seis hasta los 17 a?os en un hotel de refugiados y sufriendo los bombardeos, tuvo que forjar su car¨¢cter. Y tambi¨¦n que le permiti¨® relativizar los problemas, tener una mentalidad muy fuerte y ser uno de los mejores jugadores de este siglo.

-Mir¨¢ndolo desde otro prisma, ?no cree que la gente que sufre m¨¢s contratiempos en su vida tiene m¨¢s dificultades para triunfar en el deporte? ?Que partir desde una situaci¨®n menos privilegiada hace todo m¨¢s dif¨ªcil?

-Sin duda. Pero s¨®lo nos quedamos con los que han llegado. Por eso yo siempre he dicho que este libro no es s¨®lo un homenaje a los futbolistas que aparecen en ¨¦l, sino un homenaje a todas las personas an¨®nimas que no han llegado a triunfar. Nos quedamos con Modric, con los hermanos Williams, con Pusk¨¢s, con Kubala¡­ pero son uno entre mil. Seguro que en el mundo ha habido muchos potenciales Balones de Oro que, por m¨²ltiples circunstancias, ni siquiera han llegado a jugar en divisiones inferiores.

Supongo que esa infancia tan dura forj¨® el car¨¢cter de Modric. Que le permiti¨® relativizar los problemas, tener una mentalidad muy fuerte y ser uno de los mejores.

Gabino S¨¢nchez Llamazares, autor de 'Hogar F¨²tbol'

-?Su trabajo como activista le ha permitido conocer alguna historia que se haya quedado fuera de este libro?

-Cuando empec¨¦ a plantear el libro, llegu¨¦ a escribir cuarenta historias, de las cuales se han publicado quince y hemos intentado que sean lo m¨¢s diversas posibles. Me hubiese gustado un libro m¨¢s paritario, s¨®lo hay cinco historias de las quince cuyas protagonistas sean mujeres. Hay historias muy bonitas que se han quedado fuera. Quer¨ªamos tambi¨¦n introducir nuevas problem¨¢ticas, como la incorporaci¨®n laboral de las mujeres y c¨®mo afecta al deporte. Actualmente, tengo localizados 210 nombres. Es cierto que hay algunos casos en los que hay poca informaci¨®n o ¨¦sta es difusa. Pero hay historias muy interesantes que se han quedado fuera del libro y que perfectamente podr¨ªan haber entrado. En algunas, la realidad supera a la ficci¨®n.

-Para terminar: ?Cree que el f¨²tbol puede contribuir a crear una sociedad mejor?

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-Soy una persona optimista y creo que el deporte en general tiene que ser part¨ªcipe en los cambios en la sociedad, en los cambios a mejor. La idea de este libro era esa, poner en conocimiento de los aficionados a esas personas que han sufrido discriminaci¨®n y que piensen que, ahora mismo, hay muchas personas en el mundo en esa situaci¨®n. Que no tenemos que esperar diez o quince a?os para ver si esas personas son buenas jugando al bal¨®n o son buenas en otras disciplinas. Hay que empatizar con todas las personas que sufren independientemente de que lleguen a ser futbolistas famosos y adem¨¢s, sean de nuestro club. Muchas veces, este tipo de personas se aceptan m¨¢s si est¨¢n en nuestro equipo que si est¨¢n en el equipo contrario.

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