El C¨®rdoba gana y encadena un a?o como l¨ªder de su categor¨ªa

Los goles de Simo y Kike M¨¢rquez dejaron en nada el buen comienzo del Fuenlabrada y colocaron m¨¢s l¨ªder a un C¨®rdoba que quiere volver al f¨²tbol profesional. Su afici¨®n, que firm¨® una entrada de 12. 789 espectadores, llev¨® en volandas a un equipo que se sabe su manual de la victoria al dedillo.

Como no pod¨ªa ser de otra manera, los locales empezaron volcando el campo sobre el ¨¢rea defendida por Pol Freixanet impulsados por una afici¨®n que enton¨® el himno califa a pleno pulm¨®n. El f¨²tbol de siempre en un campo hist¨®rico como El Nuevo Arc¨¢ngel. Sin embargo, el Fuenlabrada ha vuelto a lo que le hizo ascender: un equipo trabajado y solidario.

Tan bien construy¨® el Fuenlabrada de Mere su muro que sus futbolistas dieron la vuelta a la din¨¢mica del partido e inclinaron el c¨¦sped sobre la meta califa a los quince minutos del pitido inicial. Primero, Diam¨¦ err¨® un 1 vs 1 contra el cancerbero rival; despu¨¦s, Crist¨®bal mand¨® alta una volea y, por ¨²ltimo, Cubero estrell¨® en el palo un cabezazo. Si la pelota hubiese entrada, el final hubiese sido otro, pero el f¨²tbol, como la vida, no vive de ' y si¡¯ y el Fuenlabrada pag¨® con creces todo lo que perdon¨®.

Simo caz¨® un rechace tras una de las vertiginosas contras de los locales y pon¨ªa a los suyos en ventaja en el 23¡ä. El plan de Crespo ejecutaba a la perfecci¨®n la primera parte: adelantarse. Les tocaba a los suyos la parte de remangarse y poner tierra de por medio vali¨¦ndose de la rapidez de sus estiletes: Carracedo, Casas, Kike M¨¢rquez y Simo. El Fuenlabrada, al verse con la obligaci¨®n de llevar el peso del partido, entr¨® en p¨¢nico y donde antes hubo aciertos y confianza, reinaban los lamentos y los fallos.

El paso de los vestuarios trajo un Fuenlabrada rebelde, charla de Mere mediante. Con m¨¢s arrojo que cabeza, los azulones intentaron poner la igualdad en el mercado guiados por Crist¨®bal y Diam¨¦. Este ¨²ltimo abandon¨® el terreno lesionado a la hora de juego. Sin embargo, el destino y la fortuna quiso que el duelo se acabara de la manera m¨¢s inesperada posible.

Un centro de Kike M¨¢rquez, un bote envenenado delante de Pol Freixanet y un gol cordob¨¦s que puso distancia de por medio en el 59¡ä. La condena definitiva del Fuenlabrada tras la lesi¨®n del Diam¨¦ y la entrada de unos suplentes que no agitaron el partido lo suficiente.

Tras este tanto, el equipo del sur de Madrid desapareci¨® y el C¨®rdoba jug¨® a su antojo rematando la faena Diarra con un gol en el 90¡ä. El C¨®rdoba sue?a en grande y presenta su candidatura ante uno de los equipos fuertes de la categor¨ªa. El Fuenlabrada se lleva una goleada inmerecida pero una derrota justa.