La Real dice adi¨®s a jugadores que dejaron huella por diferentes motivos

Algo se muere en el alma de la Real Sociedad cuando un canterano tiene que abandonar el club despu¨¦s de haber hecho carrera desde abajo hasta llegar al primer equipo. Pero es ley de vida. Unos deben salir para hacer hueco a los que viene pegando fuerte desde abajo y son capaces de derribar la puerta de la plantilla profesional. Es lo que ha pasado este verano con Joseba Zaldua y Jon Guridi. Hace unos a?os, ambos llegaron con fuerza para lograr establecerse en el primer equipo. Zaldua debut¨® en 2013 con la Real. Y Guridi en 2017. Y ahora la Real les dice adi¨®s despu¨¦s de haber dejado huella, por diferentes motivos. El primero se marcha al C¨¢diz, con el que firma por tres temporadas. El segundo, al Alav¨¦s para las cuatro pr¨®ximas campa?as. Junto a ellos tambi¨¦n sale Modibo Sagnan, cedido al Utrech holand¨¦s. El jugador franc¨¦s es la operaci¨®n de la que m¨¢s ¡®culpable¡¯ se siente Roberto Olabe de todos sus fichajes, reconocido por el mismo Director de f¨²tbol realista, porque no ha conseguido amortizar sobre el c¨¦sped los cinco millones que se pagaron por ¨¦l.

A Joseba Zaldua le saca de la Real Sociedad la apuesta del club por Alex Sola para el lateral derecho. Le quedaba un a?o de contrato y era lo m¨¢s f¨¢cil para desbloquear el tap¨®n en ese puesto. Pero con el donostiarra se marcha uno de los capitanes de la primera plantilla, uno de los que manten¨ªa la estabilidad en el vestuario, un peso pesado que segu¨ªa aportando sobre el terreno de juego. Con 200 partidos en la Real, es un jugador que hab¨ªa crecido en la cantera de Zubieta completando una trayectoria casi intachable, en todos los sentidos. Su pujanza acab¨® con Carlos Mart¨ªnez, otro lateral que dej¨® huella, con Alvaro Odriozola de por medio y que le llev¨® a ser cedido al Legan¨¦s, donde se gan¨® por derecho propio su regreso a la Real. Y ahora Sola es quien le obliga a buscarse la vida lejos de su casa, donde so?aba con retirarse. El C¨¢diz le permite seguir jugando al m¨¢s alto nivel con un contrato por tres temporada cuando acaba de cumplir 30 a?os.

El caso de Jon Guridi es parecido, desde el punto de vista de que tambi¨¦n es un jugador ¡®made in Zubieta¡¯, porque tambi¨¦n complet¨® toda su formaci¨®n en todas las categor¨ªas inferiores del club, hasta cumplir su ¡°sue?o¡± de debutar con el primer equipo. Pero detr¨¢s tiene una historia de superaci¨®n importante. El azpeitiarra es uno de esos canteranos que ha estado en todos esos torneos de relevancia que han jugado las categor¨ªas interiores. Particip¨® en Brunete, form¨® parte de la Real juvenil que disput¨® la Youth League, e incluso fue el capit¨¢n del equipo realista que disput¨® la final de la Copa de campeones juvenil en 2013. Y m¨¢s tarde, cuando todo apuntaba a que iba a triunfar como profesional, una serie de lesiones desafortunadamente graves casi le apartan para siempre del mundo del f¨²tbol. Roberto Olabe, uno de sus grandes valedores, que le conoce desde peque?o porque jugaba en la generaci¨®n de su hijo, apost¨® por Guridi con un tratamiento especial que le sirvi¨® para reengancharse al f¨²tbol con una gran a?o en el Mirandes, tras lo que lleg¨® incluso a renovar. La pena es que luego no pudo hacerse con un sitio en la plantilla, y ¨¦l mismo quer¨ªa buscar m¨¢s protagonismo y el club necesitaba que saliera para hacer hueco al prometedor Turrientes. Y ahora se marcha al Alav¨¦s, curiosamente el club contra el que debut¨® en Primera, y ante el que sufri¨® su ¨²ltima lesi¨®n de consideraci¨®n. All¨ª debe recuperar ese tono f¨ªsico envidiable por el que tanto destaca su juego. Se marcha libre, aunque la Real puede llevarse casi un mill¨®n de euros en variables como con un posible ascenso a Primera. Y tambi¨¦n se reserva un porcentaje de un futuro traspaso. Es todo un ejemplo de superaci¨®n, de c¨®mo debe afrontar los problemas un jugador formado en la cantera de la Real. Son dos canteranos modelo. Por eso, algo se muere en el alma cuando dos ¡¯potrillos¡® como Zaldua y Guridi tienen que dejar el club txuri-urdin, pero se merecen ser felices cuando ya no tienen sitio en su Real. Y el club as¨ª lo ha entendido facilit¨¢ndoles todo lo posible su salida.