?Xabi Alonso es inmortal!

En un duelo de gran tensi¨®n e intensidad, casi como si Stuttgart y Leverkusen se tuvieran ganas desde el a?o pasado, las dos grandes revelaciones de Alemania demostraron que siguen vivos en una Supercopa que se llev¨® Xabi Alonso el inmortal, el de siempre, el que, salvo la Europa League del pasado curso, cuenta casi sus torneos por t¨ªtulos. Es el tercero que levanta el t¨¦cnico espa?ol.

El Leverkusen inici¨® el primer partido oficial del curso con la inercia del pasado curso. Boniface, el nueve de Xabi Alonso cuando f¨ªsicamente ha estado bien, adelant¨® a los de la Aspirina, que jugaban en casa y ante su gente tras haber ganado la Bundesliga y la Copa la pasada campa?a. Todo parec¨ªa indicar que los tiempos de alegr¨ªa en el Bay Arena se prolongar¨ªan en el primer t¨ªtulo en juego de la temporada, pero la historia no fue tan pl¨¢cida. Ni mucho menos.

El Stuttgart, un equipo brillantemente dirigido por Sebastian Hoeness, empat¨® casi a continuaci¨®n gracias a Millot. El tanto de la igualada hizo da?o a Xabi Alonso, pero especialmente la expulsi¨®n, antes del descanso, de uno de sus fichajes para esta temporada, Martin Terrier, que vio la roja directa tras una dur¨ªsima entrada sobre Demirovic en el centro del campo. Una acci¨®n absurda que condicion¨® el resto del encuentro, pues el Levekusen tuvo que plegar velas y dedicarse a defender cuando en realidad se hab¨ªa mostrado mucho m¨¢s c¨®modo atacando.

Movimientos

Xabi retir¨® a su delantero centro, Boniface, para introducir a otro central, Tah. El final del primer tiempo fue un tormento. El t¨¦cnico vasco fue amonestado y Millot se top¨® con el larguero en lo que pudo ser la remontada del Stuttgart antes de concluir la primera mitad. La angustia, en cualquier caso, prosigui¨® tras el descanso. Los de Hoeness fueron claros dominadores y el Leverkusen, sin Wirtz ni Grimaldo sobre el campo, se dedicaron a esperar alguna contra con Tella y Adli como puntas de lanza.

Sobrevivi¨® el conjunto local como pudo hasta que los cambios desnivelaron el marcador. Uno de ellos, el sensacional Undav, hizo el 1-2 en el primer bal¨®n que toc¨® en el partido tras una asistencia desde la izquierda de Kratzig. La reacci¨®n de los de Xabi, en cualquier caso y estando sobre la lona, fue extraordinaria. A punto estuvieron de empatar tras la incorporaci¨®n de una tacada de Frimpong, Schick y Wirtz, toda una revoluci¨®n en el choque.

Fue tras la entrada de Grimaldo, ya sobre la bocina, c¨®mo el Leverkusen encontr¨® un empate ag¨®nico, uno m¨¢s de un equipo que nunca se rinde. La asistencia del lateral espa?ol la aprovech¨® Schick para llevar la final a los penaltis, aunque la remontada pudo ser total si Frimpong no hubiera fallado un gol clar¨ªsimo en la ¨²ltima jugada antes de la tanda.

En la ronda fat¨ªdica, el Leverkusen no fall¨® (Grimaldo y Aleix Garc¨ªa anotaron) y s¨ª el Stuttgart con errores de Kratzig y Silas, lo que da un nuevo t¨ªtulo a Xabi Alonso, el m¨¢s sufrido de todos, la Supercopa que tuvo perdida y acab¨® conquistando. Es inmortal Xabi.

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