Palo al campe¨®n

La tensi¨®n en Costa de Marfil era enorme. Alcanzaron los octavos de rebote tras una fase de grupos decepcionante y enfrente estaba Senegal, la ¨²nica que hab¨ªa ganado todos los partidos que hab¨ªa jugado y la vigente campeona. Costa de Marfil se la jugaba en un ambiente nada sencillo.

Emerse Fa¨¦ apost¨® por Kossounou, Aurier, Max Gradel y Krasso... adem¨¢s de Seri, que, aunque no hab¨ªa jugado ni un minuto, dej¨® en el banquillo a Kessi¨¦, indiscutible hasta ahora. Una revoluci¨®n del asistente de Jean-Louis Gasset, el seleccionador destituido por Costa de Marfil antes de saber que pasar¨ªan como uno de los mejores terceros. Senegal, por su parte, se reforz¨® con una defensa de cinco, algo in¨¦dito en Aliou Ciss¨¦.

El equipo senegal¨¦s se puede definir a partir de dos estad¨ªsticas: es el que menos tiros recibe por partido (7, como RD Congo) y el que m¨¢s goles ha marcado (9, como Angola y Guinea Ecuatorial). Son decisivos en las ¨¢reas y por eso eran, hasta el d¨ªa de hoy, la ¨²nica selecci¨®n que hab¨ªa ganado todos los partidos.

Y el partido no pudo empezar mejor para Senegal, que se adelant¨® en el minuto 4. Fue un inicio arrollador en el que Man¨¦ pudo encontrar a Diallo dentro del ¨¢rea. Le peg¨® fort¨ªsimo de volea y super¨® a Fofana. Un golazo que, a partir de entonces, defender¨ªan a toda costa. Y se salvaron de tener que hacerlo con diez cuando el ¨¢rbitro solo le mostr¨® la amarilla a Man¨¦ en una jugada en la que le clav¨® los tacos en el tobillo a Sangar¨¦.

Senegal no ha sido una selecci¨®n que se ha caracterizado por dominar sus partidos, aunque s¨ª ha sido muy s¨®lida. Sin embargo, se not¨® que Costa de Marfil ten¨ªa el orgullo dolido tras todas las cr¨ªticas recibidas por su decepcionante fase de grupos. Muchos jugadores que quer¨ªan reivindicarse y una grada que ped¨ªa m¨¢s. Lo obtuvieron. Mendy se pudo la capa de h¨¦roe para salvar varias ocasiones claras, incluidas un remate muy cercano de Haller (que debutaba en esta Copa de ?frica) y una gran volea de P¨¦p¨¦. Pero poco despu¨¦s, su excesiva intensidad saliendo le cost¨® caro. P¨¦p¨¦ se encontr¨® dentro del ¨¢rea en un mano a mano, regate¨® a Mendy y este le arroll¨®. El ¨¢rbitro fue al monitor, pero seguramente fuese la ¨²nica persona del mundo que lo necesitase. Un penalti clar¨ªsimo que no perdon¨® Kessi¨¦, tirando de galones.

La pr¨®rroga se dio como suelen darse la mayor¨ªa de pr¨®rrogas en estos torneos. Dos equipos cansados en los que el miedo a perder era m¨¢s poderoso que la ilusi¨®n por ganar. Lleg¨® la tanda. Y Niakhat¨¦ la tir¨® al palo. Haller, Aurier y Kessi¨¦ no fallaron. Y se desat¨® la locura en el Charles Konan Banny de Yamoussoukro.