Osi-Gol, Cholito y el N¨¢poles se va

El N¨¢poles sigue reforzando su liderato jornada tras jornada. La Roma de Mourinho siempre le hizo sufrir y lo volvi¨® a conseguir pero, como en el partido de ida, Spalletti se llev¨® la victoria por la m¨ªnima gracias a Osimhen y, esta vez, tambi¨¦n a Gio Simeone, decisivo sobre la bocina. Ahora marcha con 13 puntos de ventaja sobre su primer perseguidor, el Inter, y 15 sobre Lazio, Atalanta y Milan. Nunca, bajo el Vesubio, sintieron el tercer scudetto tan posible.

El plan de los giallorossi se repiti¨® una vez m¨¢s: dos l¨ªneas cerradas atr¨¢s y, cuando se pod¨ªa, presi¨®n agresiva. La organizaci¨®n de los romanos desconcert¨® a los napolitanos, que tardaron un cuarto de hora en tomar el control del choque. En el 17¡ä, tras un susto en su ¨¢rea por un cabezazo de Kim que casi acaba en propia puerta, los de Spalletti rompieron el partido con un aut¨¦ntico golazo. Kvaratskhelia combin¨® con Mario Rui y centr¨® para Osimhen, que control¨® el bal¨®n con el pecho y el muslo, y fulmin¨® a Rui Patr¨ªcio con un latigazo. Un tanto a lo Batistuta que reforz¨® al Capocannoniere (14 goles, 43 en 82 presencias como azzurro) y cambi¨® el rumbo del choque.

La Roma, ante la obligaci¨®n de atacar, empez¨® a coger ritmo y ganar campo. Spinazzola le dio trabajo a Meret justo antes del descanso y Mourinho arranc¨® la segunda parte reforzando la delantera, con El Shaarawy en lugar del lateral. Fue una decisi¨®n acertad¨ªsima: los romanisti encerraron a en su ¨¢rea a los sure?os, que casi nunca sufrieron as¨ª en su estadio en los ¨²ltimos meses, y desperdiciaron dos ocasiones para sentenciar. El empate, merecido, lo marc¨® justo el ¡®Fara¨®n¡¯, aprovechando un centro de Zalewski a espaldas de Lozano. Quedaba un cuarto de hora y Spalletti sorprendi¨® a todos: fuera Kvaratskhelia y Osimhen, dentro Raspadori y Gio Simeone. El Cholito ya hab¨ªa sido decisivo para batir al Milan en San Siro, salt¨® al campo con su habitual garra y le dio la raz¨®n a su entrenador, anotando otro tanto hist¨®rico. En el 87¡ä recibi¨® el bal¨®n en el coraz¨®n del ¨¢rea, se deshizo de Smalling y con un potente zurdazo hizo enloquecer al Maradona. Su rendimiento es impresionante: ocho goles en 526 minutos, uno cada 65¡ä. El Cholito demostr¨® que se puede ser un ¨ªdolo tambi¨¦n jugando poco.

En el descuento les toc¨® sufrir, pero los azzurri aguantaron bien y celebraron con los tifosi una victoria inolvidable, quiz¨¢s decisiva. Lo hicieron cantando ¡°el l¨ªder se va¡±: con una ventaja tan larga, la superstici¨®n deja el paso a la alegr¨ªa hasta en N¨¢poles.