M¨²nich dictar¨¢ sentencia

Parafraseando a Jos¨¦ Bordal¨¢s, aunque contextualizando su ya ic¨®nica frase en las grandes noches europeas, ¡°esto es la Champions League, pap¨¢¡±. De poco importan las rachas, buenas o malas, y las din¨¢micas cuando el bal¨®n echa a rodar entre semana. El Bayern de M¨²nich, en plena crisis, no solo plant¨® cara al l¨ªder de la Premier League en su casa y sin seguidores b¨¢varos en las gradas del Emirates Stadium, sino que consigui¨® darle la vuelta al 1-0 local, obra de Bukayo Salka. Obra de arte, incluso. Eso s¨ª, el equipo de Mikel Arteta no ha llegado a los cuartos de final de la m¨¢xima competici¨®n continental, ni lidera la liga inglesa, por casualidad.

Serge Gnabry, en su d¨ªa canterano del Arsenal, hizo el empate y Harry Kane, exdelantero del eterno rival de los gunners, puso por delante al equipo de Thomas Tuchel. Ning¨²n jugador, sin haber vestido la el¨¢stica del Arsenal, ha marcado nunca tantos goles (seis) como el ahora ¡®9¡ä muniqu¨¦s. A¨²n quedaban 45 minutos y, a falta de 15 para el final, Gabriel Jes¨²s puso la magia y Leandro Trossard, el empate.

Tanto londinenses como b¨¢varos merecieron, por tramos, el triunfo. De ah¨ª que el empate sea, a fin de cuentas, el resultado m¨¢s justo. Ambos las tuvieron, pero solo algunas de las ocasiones m¨¢s claras terminaron dentro. Dentro de una semana, en el estadio que volver¨¢ a te?irse de rojo, pero de ¡®rojo Bayern¡¯, conoceremos al semifinalista de la Champions League. Este Arsenal no tiene nada que ver con el que perdi¨® en 2017 por 1-5 ante el conjunto muniqu¨¦s, pero el equipo de Thomas Tuchel no est¨¢ tan mal, al menos en Europa, como muchos pensaban.

Kane es Kane, en M¨²nich o en Pek¨ªn

Con un Emirates Stadium lleno hasta la bandera ¨Cla UEFA sancion¨® sin viajar a los seguidores b¨¢varos y los gunners colgaron el cartel de ¡°no hay billetes¡± con un lleno solo de seguidores locales¨C y un ambiente propio de una gran noche de Champions League, las cosas empezaron muy bien para los pupilos de Mikel Arteta. Adem¨¢s de la amarilla que vio Alphonso Davies, se perder¨¢ el encuentro de vuelta por acumulaci¨®n de tarjetas, el cuadro local asest¨® el primer golpe a los muniqueses.

Bukayo Saka, tras una p¨¦rdida del lateral canadiense en la autopista que le puso al ¡®7¡ä local durante el primer tiempo, termin¨® adentr¨¢ndose en el ¨¢rea para batir a Manuel Neuer con un disparo de rosca ajustado al palo. Por fin, el extremo ingl¨¦s aparec¨ªa en una gran cita para situar por delante a los gunners en los cuartos de final de la Champions League. El 2-0, escasos minutos despu¨¦s, pudo correr a cargo de Ben White, pero su disparo en el mano a mano fue directo al pecho del arquero alem¨¢n. Una ocasi¨®n muy clara que el Arsenal, m¨¢s pronto que tarde, lamentar¨ªa haber fallado.

Gabriel Magalh?es y William Saliba llegaban a la eliminatoria europea como la gran pareja de centrales del momento. Juntos han elevado a los gunners al siguiente nivel, pero, tambi¨¦n juntos, permitieron la remontada del Bayern de M¨²nich en los primeros 45 minutos. Una p¨¦rdida del brasile?o en el minuto 18 propici¨® el 1-1, obra de Serge Gnabry. Poco m¨¢s de 10 minutos despu¨¦s, tras un eslalon interminable de Leroy San¨¦ desde la l¨ªnea del medio campo, el franc¨¦s trab¨® al extremo visitante en el interior del ¨¢rea. El gol del 1-2 fue doblemente doloroso. Primero, porque desinfl¨® el souffl¨¦ del Emirates Stadium. Pero, sobre todo, porque lo convirti¨® Harry Kane.

La leyenda del Tottenham, ahora ¡®9¡ä del Bayern de M¨²nich, volvi¨® a marcar a los gunners en su regreso al norte de Londres. En total, con el anotado en la ida de los cuartos de final de la Champions League 2023-2024, son 15 los goles que le ha marcado el ariete ingl¨¦s al Arsenal en 20 partidos. Para Harry Kane lo de marcarle a su eterno rival es una cuesti¨®n de rutina.

Samba de Gabriel Jes¨²s

Muchas cosas no le gustaron al t¨¦cnico espa?ol despu¨¦s del primer tiempo, y es que lo primero que hizo nada m¨¢s reanudarse el encuentro fue a introducir a Oleksandr Zinchenko. Aunque el ucraniano devolvi¨® el control del bal¨®n al cuadro local, el Arsenal comenz¨® los 45 minutos impreciso y precitado. Como si a¨²n no restase toda la segunda parte, as¨ª como los 90 minutos del Allianz Arena.

Tras un tramo en el que no pasaron demasiadas cosas en el Emirates Stadium, algo ciertamente positivo para los intereses visitantes, todo lo acontecido a falta de 15 minutos para el final fue perjudicando a los pupilos de Thomas Tuchel. Primero, la lesi¨®n muscular de Serge Gnabry. Segundo, el gol del empate de Leandro Trossard. Y tercero, por si no fuera suficiente, el disparo al palo de Kingsley Coman cuando la megafon¨ªa del estadio ya anunciaba el tiempo a?adido.

Aunque el tanto del 2-2 bien merece detenerse en ¨¦l. Gabriel Jes¨²s, introducido por Mikel Arteta, bail¨® en el interior del ¨¢rea con el bal¨®n en los pies. Matthijs De Ligt termin¨® por los suelos y el brasile?o, en vez de culminar la jugada, cedi¨® el bal¨®n al atacante belga para que fuera ¨¦l quien devolviera las tablas al marcador en el 76¡ä. Pidi¨® al un¨ªsono el feudo gunner un penalti de Manuel Neuer sobre Bukayo Saka en la ¨²ltima acci¨®n del partido, pero fue el extremo ingl¨¦s quien busc¨® el contacto con el arquero visitante. Ni penalti ni victoria para ninguno de los dos equipos. M¨²nich dictar¨¢ sentencia.

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