Indirecta de Gabriel Jesus a Guardiola: ¡°No soy tan robot...¡±

Gabriel Jesus ha empezado lanzado en el Arsenal. Tras las bajas de Aubameyang en enero y Lacazette este verano, Mikel Arteta quer¨ªa comenzar una nueva era en la delantera gunner y el brasile?o fue el elegido. Este tambi¨¦n buscaba un cambio y han encajado a la perfecci¨®n.

El delantero se mueve con facilidad en un ataque tan joven como gr¨¢cil formado por Saka y Martinelli como pu?ales por las bandas y con Odegaard como director de orquesta. Cuatro talentosos atacantes que permutan posiciones y dan alas a los gunners, que suman seis goles a favor en dos encuentros que han valido ya seis puntos.

Este s¨¢bado, Gabriel Jesus fue clave para la victoria por 4-2 en el primer partido de la temporada en el Emirates Stadium. El punta abri¨® el marcador y su cuenta particular como jugador del Arsenal con un aut¨¦ntico golazo. Un golpeo fino con su diestra, algo bombeado, para batir a Ward. En 34 minutos y cazando un c¨®rner en el segundo palo cerr¨® su doblete. Adem¨¢s, ofreci¨® otros dos tantos a Xhaka y Martinelli para evitar la remontada de los foxes tras un gol en propia de Saliba y otro de Maddison.

Terminado en el encuentro con tres puntos m¨¢s en el casillero y como segundo m¨¢ximo goleador de la Premier, Gabriel Jesus no dud¨® en expresar su alegr¨ªa y felicidad en el Arsenal, dejando entrever que viv¨ªa encorsetado en el City, donde hac¨ªa tiempo que no luc¨ªa tanto.

¡°Ahora tengo otra cabeza, creo mucho m¨¢s en m¨ª, he vuelto a sonre¨ªr, tengo confianza jugando y por eso las cosas han ido saliendo, y cuando no salen tambi¨¦n, seguir¨¦ siendo el mismo. Lo que est¨¢ en mi control son mis actuaciones, la forma de afrontar las cosas, as¨ª que ?por qu¨¦ no? Durante mucho tiempo pens¨¦ que s¨ª, pero he vuelto, el Gabriel de siempre¡±, asegur¨®.

El brasile?o destac¨® su renovada confianza y dej¨® una indirecta al City y Pep Guardiola sobre su estilo m¨¢s rob¨®tico frente a la mayor libertad que ha encontrado en el Arsenal. ¡°Soy el 9 y estoy ah¨ª para acabar, para ayudar y no s¨®lo para marcar goles, sino tambi¨¦n para bajar, para jugar. Ahora he vuelto. Como he dicho antes, soy un poco como un jugador de campo, que no es tan robot y que se queda ah¨ª m¨¢s. Yo salgo, quiero luchar, disputar¡±, sentenci¨®.

El de Sao Paulo vuelve a disponer de la receta de la felicidad, que no es otra que expresarse, crear y explotar su mejor virtud, marcar goles.