El Marsella vuelve a estrellarse

El Olympique de Marsella ha vuelto a la realidad esta semana. Despu¨¦s de un inicio de temporada sobresaliente, el conjunto marsell¨¦s empat¨® a uno ante el Rennes despu¨¦s de haber sufrido una dolorosa derrota entre semana en Champions ante el Eintracht. Los de Tudor consiguieron empatar el gol inicial de Guendouzi en propia puerta, pero el agotamiento f¨ªsico termin¨® por imponerse en el Velodrome.

El Marsella lleva ya varios partidos, concretamente tres, en los que le cuesta bastante superar al rival. Parece un aspecto f¨ªsico, aunque tambi¨¦n futbol¨ªstico, ya que el 3-2-4-1 de Tudor, que busca, sobre todo, la verticalidad por las bandas, se ha vuelto previsible y un caldo de cultivo para los adversarios. El Rennes avis¨® muy pronto, mediante un cabezazo de Rod¨®n que sac¨® Pau L¨®pez a bocajarro, que el partido en el Velodrome iba a ser una guerra muy dura para el conjunto marsell¨¦s.

A pesar de la insistencia de Tavares, un oasis en el desierto en el primer tiempo, obligando a Mandanda a intervenir e incluso estando a punto de hacer un golazo con la pierna derecha, el Rennes se adelant¨® en el ecuador del primer tiempo. Tras una gran salida de bal¨®n de los bretones, Traor¨¦ centr¨® en la banda derecha y su bal¨®n toc¨® en Guendouzi, sorprendiendo a Pau L¨®pez, que ya se hab¨ªa tirado para repeler el centro. El 0-1 no hizo m¨¢s que aumentar las prisas del Marsella, incapaz de generar peligro en el ¨¢rea rival y esperando a que Tavares obrara el milagro en la banda izquierda.

Tras la reanudaci¨®n, el Marsella mengu¨® f¨ªsicamente al Rennes, que hab¨ªa jugado el jueves y, por tanto, hab¨ªa tenido dos d¨ªas de descanso menos para preparar el encuentro. El bal¨®n parado, ese ant¨ªdoto tan utilizado por los equipos para contrarrestar sus carencias en el juego, fue un salvavidas para un OM al borde de la lona. Guendouzi, omnipresente, aprovech¨® un extraordinario centro de Veretout para poner las tablas en el marcador.

El ¨ªmpetu del Marsella fue cada vez mayor, a tal punto de que los ataques acababan, casi siempre, en precipitaciones fruto de las prisas. El Rennes, mostrando su amplia plantilla, gan¨® frescura con los ingresos de Doku, Sulemana y Majer, que sirvi¨® al extremo derecho belga en bandeja el 1-2, pero ¨¦ste lo fall¨® de forma incomprensible ante Pau L¨®pez. Ingresaron, a su vez, Payet y ?nder en los locales, aunque no tuvieron el efecto deseado.