Arteta saca la apisonadora

Los atacantes que tiene en liza el Liverpool, como Mohamed Salah, Darwin N¨²?ez o Diogo Jota, hacen comprensible el liderato de los reds. As¨ª mismo, mirando la plantilla del Manchester City, y viendo que Kevin de Bruyne y Erling Haaland est¨¢n de vuelta, parece dif¨ªcil que a los pupilos de Pep Guardiola se le escape alg¨²n t¨ªtulo esta temporada. Pero a nadie se le deber¨ªa olvidar que el Arsenal de Mikel Arteta es el tercer clasificado de la Premier League, empatado a 52 puntos con los citizens y con tan solo dos menos que los reds, porque cuando el conjunto decide meter miedo, lo mete. Un equipo, el gunner, tan capaz de arrasar a sus rivales como Liverpool o Manchester City.

Mucho ha cambiado la situaci¨®n en ambos conjuntos desde el ¨²ltimo partido de 2023. Si bien el West Ham se hab¨ªa erigido como la ¡®bestia negra¡¯ de los gunners en este inicio de curso, elimin¨¢ndolos de la Carabao Cup y asaltando el Emirates Stadium en diciembre (0-2), el equipo de Mikel Arteta le devolvi¨® sendas derrotas con un repaso de ¨¦poca que mand¨® a los seguidores locales m¨¢s pronto de lo esperado a casa.

El Arsenal se asegur¨® los tres puntos en unos primeros 45 minutos que empezaron siendo aburridos pero terminaron convirti¨¦ndose en una tortura para la parroquia hammer. William Saliba, Bukayo Saka, Gabriel Magalh?es y Leandro Trossard vieron porter¨ªa antes de que la mitad de los aficionados presentes en el London Stadium pusieran rumbo a casa. Ellos al menos se ahorraron presenciar, al menos en vivo y en directo, c¨®mo Bukayo Saka y su exjugador Declan Rice redondeaban una bochornosa tarde en clave hammer. El equipo del oeste de Londres a¨²n no sabe lo que es ganar en 2024 y la continuidad de David Moyes pende de un hilo.

Avalancha y a casa

El ambiente del London Stadium, donde se debat¨ªan entre los abucheos y los aplausos para su exjugador Declan Rice, ya era fr¨ªo de por s¨ª, pero los primeros compases de partido tampoco ayudaron. Las posesiones inocuas y est¨¦riles, con un ritmo y velocidad en la circulaci¨®n que estuvieron a punto de dermir al m¨¢s fan¨¢tico de los seguidores hammers y gunners, marcaron la primera media hora de ecuentro.

Menos mal que, a falta de 15 minutos para poner rumbo al tunel de vestuarios, los pupilos de Mikel Arteta decidieron, adem¨¢s de darle emoci¨®n al choque, encarrilar su asalto al feudo del West Ham. Leandro Trossard fue el primero en agitar el ataque visitante, pero se top¨® con un gran Alphonse Ar¨¦ola, que sac¨® su volea con un parad¨®n.

A partir de ah¨ª, el meta franc¨¦s fue incapaz de sostener el aluvi¨®n de ocasiones y, sobre todo, goles gunners. William Saliba estren¨® el marcador en el 32¡ä en un saque de esquina, pero es que, en apenas seis minutos, del 41¡ä al 47¡ä, el Arsenal arras¨® con todo signo de vida local dejando las gradas del London Stadium pr¨¢cticamente vac¨ªas. Bukayo Saka provoc¨® y anot¨® un penalti, Gabriel Magalh?es cabece¨® al fondo de la red la segunda asistencia de la tarde de Declan Rice y, para poner el broche de oro a la avalancha del Arsenal, Leandro Trossard marc¨® un golazo con un gran disparo de rosca. Los aficionados visitantes despidieron el primer tiempo entre ¡°ol¨¦s¡± mientras la retransmisi¨®n del estadio mostraba c¨®mo cientos de aficionados hammers pon¨ªan rumbo a casa.

Rice pone la puntilla

Lejos de no hacer m¨¢s da?o, el Arsenal, a¨²n con alguna marcha menos que en el tramo final del primer tiempo, continu¨® engrosando su casilla de goles en el marcador. Bukayo Saka, tras un primer intento en el se interpuso Alphonse Ar¨¦ola, marc¨® su gol n¨²mero 13 de la temporada. Eso s¨ª, el tanto que m¨¢s doli¨® de todos, y no por ser el 0-6, fue el de Declan Rice.

Un par de minutos despu¨¦s que su compatriota, pasada la hora de encuentro, el exjugador del West Ham arm¨® un zapatazo desde fuera del ¨¢rea, imposible para el arquero local. Un golazo que, a pesar de su belleza, ni mucho menos pens¨® en celebrar. El centrocampista ingl¨¦s pidi¨® disculpas a la que fue su afici¨®n durante tantos a?os, los pocos seguidores hammers que permanec¨ªan en el London Stadium, y esta le despidi¨®, al un¨ªsono, entre aplausos cuando fue sustituido. Ahora s¨ª, la tortura del Arsenal hab¨ªa terminado. ¡®Set¡¯, partido y tres puntos para el Arsenal, que se mantiene fuerte en la carrera por el t¨ªtulo liguero.