Tere, la ni?a que asombraba en la playa de A Lanzada
Los arenales y las pachangas en A Caeira empezaron a forjar el juego de Abelleira. Su padre, Milo, y su hermano, Tom¨¢s, tambi¨¦n est¨¢n ligados al f¨²tbol.
Los or¨ªgenes futbol¨ªsticos de la pontevedresa Teresa Abelleira podr¨ªa ser narrados como si de un cuento se tratara. ¡°?rase una vez una ni?a a una pelota pegada cada vez que iba a la playa. Pegada a ella y a su hermano mayor, como ella, amante del f¨²tbol. Y como su padre, a la saz¨®n, entrenador de equipos modestos¡± podr¨ªa ser el inicio, aunque no fuera solo la arena donde jugara.
¡°Viv¨ªamos en A Caeira, en un sitio debajo del cual hab¨ªa un campito, y jugaba siempre en ¨¦l con los amigos¡±, narra su hermano Tom¨¢s, cinco a?os m¨¢s mayor y tambi¨¦n futbolista. Siendo ni?os, Tom¨¢s empez¨® a jugar en la Juvenil de L¨¦rez, un club modesto pero hist¨®rico de Pontevedra, y Tere iba a sus partidos. Pronto empez¨® a asimilar lo que ve¨ªa y a imitarlo en las pachangas de A Caeira. ¡°Le gustaba mirar y luego repet¨ªa lo que ve¨ªa, muchas veces, haci¨¦ndolo mejor¡±, dice Tom¨¢s, centrocampista tambi¨¦n, con quien pasaba tardes eternas jugando a que no se les cayera el bal¨®n en la playa.
¡°La gente se nos quedaba mirando, sobre todo a ella. Se sorprend¨ªan mucho por lo bien que le daba al bal¨®n. Pas¨¢bamos horas all¨ª¡±, en arenales como los de Covelo (Poio) o el de A Lanzada (O Grove), una de las playas m¨¢s emblem¨¢ticas de las R¨ªas Baixas, en las que, en ocasiones, se les sumaba su padre, Milo, exentrenador de Pontevedra, Cultural Leonesa o Celta B, donde hizo debutar a Denis Su¨¢rez con 16 a?os, y toda una instituci¨®n dentro del f¨²tbol provincial.
De ¨¦l aprendieron los hermanos cosas tan importantes como los c¨®digos del vestuario, aunque Milo ¡°siempre fue muy comedido¡±. ¡°Era respetuoso con lo que hac¨ªan nuestros entrenadores y nunca nos presion¨®, aunque si pregunt¨¢bamos nos aconsejaba¡±, explica Tom¨¢s, actual jugador del Villalonga de la Preferente gallega, despu¨¦s de militar en el Pontevedra o en el Compostela, que bromea: ¡°Tampoco es que hiciera falta decirnos mucho. Sobre todo a ella¡±.
Normalmente, en edades formativas, tener un referente que te abra el camino sirve para fijarte en detalles, tal y como hac¨ªa la centrocampista del Real Madrid, y m¨¢s cuando Tom¨¢s se ha desenvuelto durante a?os en la misma posici¨®n que Teresa. Puede que, por ello, desde que iba a verle jugar con ¡®La Juve¡¯, ella se fijase en aspectos que desarrollaba ¨¦l. Pero la cosa ha cambiado. ¡°Desde hace varios a?os aprendo mucho de ella. En la posici¨®n en la que est¨¢ jugando en el Mundial juego yo tambi¨¦n ahora y me fijo mucho en lo que hace¡±, desarrolla ¨¦l.
Ya en aquellos tiempos, a Teresa se le notaba ¡°un gran talento cognitivo¡± para aplicar en el apartado t¨¦cnico y en lo t¨¢ctico lo que ve¨ªa. Desde ni?a destac¨® en la AJ L¨¦rez, equipo en el que sigui¨® el camino empezado por Tom¨¢s, y donde jug¨® con chicos hasta que fich¨® por el Deportivo de La Coru?a, hace siete a?os. Durante tres, compagin¨® el verde con la pista, militando en el potente Poio Pescamar, con el que fue varias veces campeona de Espa?a, en aquellos tiempos en los que empez¨® a ser llamada por las categor¨ªas inferiores de la selecci¨®n.
Humildad y perseverancia
La familia Abelleira es conocida en Pontevedra por la hist¨®rica panader¨ªa que Tom¨¢s y Chicha, los abuelos, regentaron hasta este enero. Su humildad ha impregnado tambi¨¦n a Teresa, que comparte los valores del esfuerzo, del trabajo y la constancia. ¡°Es t¨ªmida, pero ha ganado en confianza y car¨¢cter. Sigue siendo sigilosa y sigue trabajando para el equipo, pero a veces hace ruido con los zapatazos que pega desde fuera del ¨¢rea¡±, bromea su hermano mayor.
Ambos guardaban similitudes en el juego, m¨¢s t¨¦cnico, como interiores, aunque Tere se ha terminado de adaptar a un rol diferente, m¨¢s defensivo, al que se ha acoplado gracias a sus condiciones y a su persistencia. ¡°Siempre ha sido cabezota a la hora de lograr sus objetivos, y en el f¨²tbol, m¨¢s. Adem¨¢s, no ha sentido nunca la presi¨®n de hacer las cosas r¨¢pido o buscando el camino f¨¢cil. Sabe que es m¨¢s importante el proceso y el equipo que brillar m¨¢s ella. Se ha adaptado muy bien¡±, pondera Tom¨¢s.
Con tes¨®n, la mediocentro pontevedresa ha revertido una temporada con poco protagonismo en el Real Madrid y ha sido fundamental en el Mundial. A su lado est¨¢n sus padres y, siempre cerca, una bandera gallega, se?ales que demuestran el arraigo a su familia y a su tierra, donde se movilizar¨¢n para verla en diferentes pantallas gigantes alrededor de la provincia, en la capital, en Poio o en Sanxenxo. ¡°Desde la ¨¦poca del Poio Pescamar siento mucha ilusi¨®n al verla crecer y me emociona mucho verla. Imag¨ªnate ahora, con todo lo que est¨¢ consiguiendo¡±, confiesa quien tantas tardes pas¨® jugando en la playa con ella, su orgulloso hermano.