Rolf? y Asllani desconsuelan a Australia y visten de bronce a Suecia

Sin premio de consolaci¨®n para la coanfitriona. Pero solo en cuanto a medallas se refiere. Porque esta Australia que cuenta con m¨¢s seguidores en redes sociales que su hom¨®loga masculina, que ha batido todos los r¨¦cords de venta de camisetas, llenado estadios y pulverizado cifras de audiencia puede estar m¨¢s que orgullosa de su Mundial. Como en semifinales ante Inglaterra, las Matildas cayeron, esta vez ante Suecia, pero su afici¨®n las arrop¨® hasta el final en el Brisbane Stadium. Las l¨¢grimas de estas dos ¨²ltimas derrotas ser¨¢n puertas abiertas para las ni?as y j¨®venes del pa¨ªs ma?ana. Como en el pa¨ªs de azul y amarillo. Cuarto bronce intercontinental para una Suecia a la que le sigue faltando la corona. Rolf?, con un penalti, y Asllani, con un gran gol, dieron el triunfo a las suyas.

El ambiente era el de una final: un estadio repleto y onces de lujo en ambos equipos. No hubo ni un cambio con respecto a los equipos titulares que Gedhardsson y Gustavsson presentaron en semifinales. Quer¨ªan la medalla de bronce. El bloque compacto que es Suecia se hizo pronto con el dominio para dar el primer susto a Arnold, siempre concentrada. Las transiciones r¨¢pidas de Australia no terminaban de funcionar: Angeldal y Rubensson eran un tap¨®n en el medio. Y Rolf?, en el extremo izquierdo, un pu?al. Partidazo de la futbolista del Barcelona para acabar el Mundial con una media sonrisa. Una llegada suya por el costado estuvo a punto de ser rematada por Asllani para abrir el marcador. Quer¨ªan ser protagonistas y lo iban a conseguir.

La gran ocasi¨®n de Raso en el minuto 23 para las Matildas fue solo un espejismo. Foord no estaba especialmente inspirada y Sam Kerr, casi desaparecida. Musovic, no obstante, volvi¨® a demostrar por qu¨¦ ha sido una de las mejores porteras del campeonato neg¨¢ndole el gol a la nueva extremo del Real Madrid. Su torneo tambi¨¦n ha sido sensacional. La afici¨®n blanca tiene ganas de verla en el Di St¨¦fano...

Pero justo despu¨¦s de esa ocasi¨®n lleg¨® la acci¨®n que decidi¨® el choque. Blackstenius ca¨ªa en el ¨¢rea ante Hunt en una jugada que acab¨® siendo rematada al larguero por Rolf?. La ocasi¨®n fue clara, pero el penalti tambi¨¦n. Foster fue al VAR y lo se?al¨®. La futbolista del Barcelona lo transform¨®. Ni una duda en su ejecuci¨®n. Suecia ya acariciaba su medalla. Merecida.

La sentencia

Tuvo el segundo la propia Rolf? al filo del descanso: con la diestra, sorprendiendo. Arnold salv¨® otra ocasi¨®n clar¨ªsima de Angelsal a bal¨®n parado. El eterno peligro a bal¨®n parado de las n¨®rdicas. La pelotita no entraba y parec¨ªa que la final de consolaci¨®n tendr¨ªa un final apretado. Hasta que pareci¨® Asllani. Contrataque dirigido por la capitana que cedi¨® el cuero a Blackstenius para que esta se internara en el ¨¢rea y se lo devolviera, casi arrepentida. Ten¨ªa que ser ella.

Golpeo de empeine perfecto desde la medialuna y 2-0. Sentencia. Suecia obtuvo su cuarto bronce mundial y dej¨® sin consuelo a la Australia de Sam Kerr. Las Fowler, Foord, Carpenter y compa?¨ªa lo ver¨¢n todo oscuro ahora, pero en unas horas podr¨¢n volver a levantar la cabeza. Hicieron so?ar a todo un pa¨ªs. Y su haza?a servir¨¢ para que muchas ni?as hagan sus deseos realidad en el futuro. Tambi¨¦n los ni?os. De esto tambi¨¦n va el f¨²tbol: de transformaci¨®n social.