Caracas, de ganar la Libertadores a protagonista a lo Valderrama
La defensa del Espanyol gan¨® la Libertadores con el Atl¨¦tico Huila en 2018 y disput¨® los pasados Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs 2024.
La defensa colombiana Daniela Caracas, internacional con su selecci¨®n y campeona de la Copa Libertadores femenina con el Atl¨¦tico Huila de su pa¨ªs en 2018, se ha convertido en involuntaria protagonista en la Liga espa?ola por una escena que record¨® a la vivida tres d¨¦cadas atr¨¢s por su compatriota Carlos Valderrama. De 27 a?os, 1,67 metros de altura y un f¨ªsico poderoso, la jugadora nacida en Cali, que debut¨® en el Huila de su pa¨ªs y de ah¨ª pas¨® a la Liga F (primero el Logro?o y desde 2021 el Espanyol), el nombre de Daniela Caracas ha pasado a ocupar espacio en medios deportivos y muchos comentarios en redes sociales a ra¨ªz de una desafortunada jugada en la que fue la v¨ªctima, como en 1991 lo fuera el ¡®Pibe¡¯.
Este domingo, en el marco del partido de la decimoctava jornada de la Liga F de Espa?a que el conjunto blanquiazul disputaba en casa contra el Barcelona, l¨ªder de la competici¨®n, la futbolista azulgrana Mapi Le¨®n toc¨® las partes ¨ªntimas de Caracas. Pese a que inicialmente el asunto no trascendi¨®, un comunicado del Espanyol encendi¨® las alarmas y las im¨¢genes de televisi¨®n del partido confirmaron lo que el club denunciaba: que Mapi Le¨®n hab¨ªa hecho un tocamiento ¡°inaceptable¡±, un gesto ¡°que vulnera la intimidad¡± de la colombiana.
Seg¨²n puede verse en las im¨¢genes, un video que se hizo viral en las redes sociales, en un t¨ªpico forcejeo de este deporte en el que dos futbolistas buscan la mejor posici¨®n, Le¨®n encara a Caracas, le dice una frase y, posteriormente, lanza su mano hacia las partes ¨ªntimas de la cale?a.
Valderrama y la ¡°broma¡± de M¨ªchel
En septiembre de 1991, en una ¨¦poca en que no exist¨ªa Internet ni mucho menos las redes sociales, el entonces centrocampista del Real Madrid -hoy entrenador del Al-Qadisiyah saud¨ª- Jos¨¦ Miguel Gonz¨¢lez ¡®Michel¡¯ toc¨® de forma reiterada los genitales al colombiano Carlos Valderrama, que en aquella ¨¦poca jugaba en el Real Valladolid.
La imagen del asombrado Pibe mirando a su rival dio la vuelta al mundo y, pese a lo desafortunado del gesto, ¨¦ste se hizo ic¨®nico. Tan es as¨ª que la estatua erigida en honor de Valderrama es el objetivo de muchos turistas que visitan Santa Marta, su ciudad natal. Llegan, ascienden al pedestal y elevan su mano para tocar las ¡°partes naturales¡± -como las llam¨® el entonces juez ¨²nico del Comit¨¦ de Competici¨®n, Jos¨¦ Javier Forc¨¦n, al incoar expediente al madridista- de la estatua. M¨ªchel se defendi¨® argumentando que ¡°fue una broma que algunos se ve que no entienden¡±, algo en lo que abund¨® uno de sus entonces compa?eros, Manuel Sanch¨ªs, quien se?al¨® que ¡°no son m¨¢s que bromas normales que se gastan los jugadores en el mundo del f¨²tbol¡±.
Pero los tiempos han cambiado. Y lo que pod¨ªa considerarse una picard¨ªa futbol¨ªstica o un gesto banal hoy pasa por el tamiz de una sociedad que ha evolucionado hacia la equidad y que, especialmente en cuestiones sexuales, cuestiona todas aquellas conductas en las que no medie el consentimiento. De hecho, en estos momentos, Espa?a vive el juicio contra el expresidente de la Real Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol (RFEF) Luis Rubiales, a ra¨ªz del beso no consentido que dio a la jugadora internacional Jenni Hermoso instantes despu¨¦s de que la selecci¨®n femenina se proclamara campeona del Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023.
Caracas, involuntaria protagonista
Campeona de la Liga Profesional de Colombia con el Atl¨¦tico Huila en 2018, mismo a?o en que ¡®Las Opitas¡¯ se proclamaron vencedoras en la Libertadores; medalla de oro con la selecci¨®n sub-20 en los Juegos Bolivarianos de 2017 y con la absoluta en los Panamericanos de Per¨² 2019, Daniela Caracas acumula un rico curr¨ªculum deportivo. Con la selecci¨®n cafetera tambi¨¦n disput¨® los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs 2024, en los que cay¨® en cuartos de final ante Espa?a en la tanda de penaltis (4-2) tras igualar 2-2 en el tiempo reglamentario.
En aquel encuentro estuvo Caracas. No as¨ª Mapi Le¨®n, ganadora de todos los t¨ªtulos habidos y por haber con el Barcelona -incluidas tres Ligas de Campeones-, quien desde 2022 abandon¨® la selecci¨®n espa?ola por problemas con el entonces t¨¦cnico, Jorge Vilda.
La escena de este domingo ha convertido en involuntaria protagonista a Caracas, quien, seg¨²n dijo el club, no reaccion¨® en el momento ¡°a causa del impacto que le caus¨® la situaci¨®n¡± y que, posteriormente, s¨ª tom¨® ¡°conciencia de la gravedad del gesto¡± y control¨® su reacci¨®n para evitar una sanci¨®n.
Las redes sociales han convertido el caso en un debate abierto, con comentarios de todo tipo -lamentablemente, la mayor¨ªa no del mejor gusto y atacando por distintos motivos a ambas- y ha llegado a Colombia, su pa¨ªs natal, donde todos los medios abren su secci¨®n de Deportes con el caso e, incluso, califican lo sucedido de ¡°agresi¨®n¡±.
Sin valorar el caso en particular, pues no lo menciona en su comunicado, la Asociaci¨®n de Futbolistas Espa?oles (AFE) expres¨® su ¡°descontento y rechazo ante cualquier conducta inadecuada, f¨ªsica o verbal, que se produzca en el ¨¢mbito del f¨²tbol¡±, ya que ¡°perjudica al colectivo de futbolistas¡± al que representa. Otro sindicato, FUTPRO, ha puesto sus ¡°servicios y profesionales a disposici¨®n de las jugadoras para esclarecer los hechos y ayudar en lo que sea pertinente¡±.
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