A octavos se va por la izquierda

Polonia y Austria ve¨ªan este partido como un ¡°partido eliminatorio¡±. Ganar no te asegura los octavos, pero perder s¨ª la (casi) eliminaci¨®n. Los austriacos se colocaron en la primera situaci¨®n y los polacos, en la segunda, despu¨¦s del 1-3 en el Ol¨ªmpico de Berl¨ªn. Se termin¨® por confirmar que Polonia era la primera selecci¨®n en caer eliminada de la Eurocopa con el empate entre Pa¨ªses Bajos y Francia unas horas m¨¢s tarde. El equipo de Rangnick aprovech¨® su banda izquierda y la clase de Arnautovic para batir a la pobre propuesta que acostumbra a ofrecer Polonia en los grandes torneos. Por algo solo ha sobrevivido en dos ocasiones a la fase de grupos en nueve participaciones entre Eurocopas y Mundiales en este siglo.

Tanto Probierz como Rangnick hicieron bastantes cambios en su once inicial respecto a la primera jornada. El primero no se atrevi¨® a poner a Lewandowski de inicio. Y el segundo decidi¨® dejar a W?ber, sobrepasado ante Francia, en el banquillo. Sus reemplazos fueron Trauner y Piatek y ambos marcaron gol. Rangnick plante¨® un equipo que atacaba mucho por la izquierda, con Mwene como absoluto protagonista y apoyado por Sabitzer y Grillitsch. Un centro colgado por el lateral izquierdo encontr¨® a Trauner en el primer palo y, con un cabezazo, col¨® el bal¨®n por la escuadra. Lejos de venirse abajo, Polonia reaccion¨® bastante bien. Sigui¨® atacando por las bandas, su plan A, y Piatek termin¨® vi¨¦ndose en el ¨¢rea con un bal¨®n suelto a tiro. Con ¨¦l bati¨® a Pentz.

Austria quer¨ªa salir r¨¢pido, pero la ocasi¨®n m¨¢s potente lleg¨® por medio de una falta en la frontal que Pentz le par¨® a Zielinski. Los dos entrenadores ajustaron a su equipo en el descanso. Rangnick quiso usar m¨¢s la banda derecha y a?adi¨® a Wimmer, renunciando a Grillitsch y retrocediendo a Laimer al centro del campo. Probierz, repiti¨® el recurso que le sirvi¨® ante Pa¨ªses Bajos: Moder.

La realidad es que ninguna de las dos ideas funcion¨® de inmediato. Una genialidad de Arnautovic fue la que propici¨® el 1-2. Prass, ya en el campo para dar descanso a un Mwene que no se cans¨® de llevar el peso en ataque del equipo, meti¨® el bal¨®n al carril central. Solo a Arnautovic se le ocurri¨® que la pod¨ªa dejar pasar, y el bal¨®n le cay¨® a Baumgartner. Con espacio para pensar por la sorpresa de Arnautovic, pudo preparar el disparo con mimo y batir a Szczesny. A Wimmer le negaron el tercero para su equipo, pero porque a¨²n no se hab¨ªa dado cuenta de que el partido solo se iba a decidir por la banda izquierda. Cuando Arnautovic prolong¨® con la cabeza un bal¨®n largo, Sabitzer apareci¨® desde all¨ª y se plant¨® mano a mano con Szczesny. El todav¨ªa portero de la Juventus le derrib¨® con el pecho y la mand¨ªbula cuando se lanz¨® al suelo. Y Arnautovic puso la distancia necesaria en el marcador como para sentenciar el partido desde los once metros. Se le saltaron las l¨¢grimas. Los octavos son posibles. No para Polonia; Lewandowski vuelve a casa.

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