El ¡®plan renove¡¯ suspendi¨® en Mallorca
Con Vinicius viaja una pol¨¦mica en la que al Madrid no le es productivo buscar culpables en actitudes ajenas que no puede controlar, sino meditar por qu¨¦ esto le pasa a ¨¦l y no otros.
En Mallorca, escenario dif¨ªcil donde los haya, Ancelotti entreg¨® la responsabilidad a los protagonistas de lo que podr¨ªamos llamar ¡®plan renove¡¯ de la plantilla. Modric y Kroos en el banquillo, Valverde-Tchouameni-Ceballos en la media, Rodrygo por Benzema y Camavinga por el ausente Mendy. Salvo el ¨²ltimo, que crece como lateral y se desempe?¨® bien en la media a partir de que entrara Alaba, el resto suspendi¨®, individual y colectivamente. El Madrid no tuvo el partido de su mano y el juego fue por los cauces que dispuso Javier Aguirre con su inc¨®modo 5-4-1, que hubiera exigido de los blancos un f¨²tbol m¨¢s r¨¢pido, con pases largos que no existieron.
El Mallorca recit¨® bien su lecci¨®n, empezando por el gigant¨®n Muriqi, el interruptor que enciende los contraataques y que igual la baja con la cabeza que la entrega con el pie. Ese juego y su radicalidad defensiva (29 faltas, diez a Vinicius), con sus l¨ªneas de cuatro y cinco superpuestas, le dio para arrancar tres o cuatro ocasiones, una de las cuales fue el gol de Nacho en propia meta sin que pueda culp¨¢rsele de nada, y para mantener a su portero pr¨¢cticamente inactivo excepto en la jugada del penalti, llegado en el ¨²nico pase largo y profundo del Madrid en todo el partido. Ah¨ª Rajkovic arroll¨® a Vinicius en su salida pero lo enmend¨® con un parad¨®n al lanzamiento de Asensio.
Como el partido se escapaba, Ancelotti dio un vuelco al equipo retirando a todo el ¡®plan renove¡¯ menos Camavinga, pero a esas alturas el Mallorca ya estaba muy seguro de s¨ª mismo y aguant¨® el chaparr¨®n, que s¨®lo fue de verdad insistente en el largo descuento. Mariano consigui¨® meter un par de remates prometedores, pero eso y una buena llegada hasta el fondo de Vinicius fue todo. ?ste, como suele, estuvo en el centro de todos los barullos. Con ¨¦l viaja una pol¨¦mica en la que al Madrid no le es productivo buscar culpables en actitudes ajenas que no puede controlar, sino meditar por qu¨¦ esto le pasa a ¨¦l y no a otros, y qu¨¦ puede hacer para evitarlo.