El d¨ªa en que el Barcelona compr¨® a Di St¨¦fano: ?pudo ser cul¨¦ ¡®La Saeta Rubia¡¯?
En 1953, el Bar?a lleg¨® a un acuerdo con River Plate para fichar al crack argentino, mientras que el Madrid hac¨ªa lo mismo con Millonarios, donde jugaba.
Era un a?o importante en la historia del Real Madrid. La entidad blanca iba a celebrar sus Bodas de Oro, los 50 primeros a?os de su existencia. Y qu¨¦ mejor manera que organizar un formidable torneo futbol¨ªstico entre sus actos. As¨ª pues, se decidi¨® invitar a dos equipos m¨¢s para festejar esa onom¨¢stica. Uno de esos equipos era el Millonarios colombiano, que vino tras no poder hacerlo el argentino River Plate. Conocido como el Ballet Azul debido a la calidad de su juego ofensivo y en honor al color azul de su uniforme. El otro conjunto que acudi¨® a participar fue el IFK N?rrkoping sueco.
En dicho torneo, y vistiendo la camiseta del equipo colombiano figuraba un jugador argentino que llam¨® la atenci¨®n a todo el mundo. Y uno de esos que qued¨® prendado de sus actuaciones fue Santiago Bernab¨¦u, que enseguida se puso en contacto con los directivos del equipo sudamericano para intentar lograr su contrataci¨®n. Los blancos hab¨ªan acabado de construir su nuevo estadio, Chamart¨ªn, pero los resultados no acababan de llegar. Bernab¨¦u pens¨® en organizar un nuevo equipo en torno a la figura de Di St¨¦fano, pero la directiva del Millonarios no iba a poner las cosas f¨¢ciles. Es m¨¢s, el gran rival de los blancos, el Barcelona, tambi¨¦n se hab¨ªa fijado en las virtudes de Di St¨¦fano, y hab¨ªa comenzado a negociar su traspaso con River Plate. ?C¨®mo era posible eso de que perteneciese a dos equipos?
Sucedi¨® en 9 de agosto de 1949. Colombia viv¨ªa en esos a?os una escisi¨®n en su f¨²tbol. Dirigentes de DIMAYOR -el equivalente a la Liga de F¨²tbol Profesional en Espa?a- se hab¨ªan separado de la Federaci¨®n Colombiana y creado la Asociaci¨®n Colombiana, que hab¨ªa comenzado a reclutar jugadores, fundamentalmente suramericanos, a golpe de d¨®lar, y Di St¨¦fano fue uno de ellos al recalar en el Millonarios. La Saeta manten¨ªa una p¨¦sima relaci¨®n con la directiva riverplatense. Por ese motivo, tanto River Plate como Millonarios pugnaban por ser los due?os de sus derechos federativos. Eso no fue ¨®bice para el inter¨¦s de los blancos: en el Madrid se conoc¨ªa perfectamente la situaci¨®n del argentino desde que maravillase en Chamart¨ªn y los directivos colombianos explicasen a Bernab¨¦u su complicada situaci¨®n contractual.
En 1953, desembarcaba en Barajas Alfredo Di St¨¦fano, con su familia y acompa?ados por Pepe Samitier, secretario t¨¦cnico del Barcelona. Pero, ?qu¨¦ hac¨ªa Di St¨¦fano en Espa?a y en compa?¨ªa de Samitier, secretario t¨¦cnico del Bar?a?
El crack argentino se hallaba inhabilitado por la FIFA despu¨¦s de que el m¨¢ximo organismo internacional recibiese la denuncia del Millonarios de Bogot¨¢ de que el jugador hab¨ªa abandonado la disciplina del club incumpliendo un contrato del que hab¨ªa recibido parte del pago, unos cuatro mil d¨®lares. Situaci¨®n ¨¦sta en la que era reincidente. Mientras, se resolv¨ªa el conflicto entre equipos colombianos y argentinos. Fue Ottorino Barassi, italiano y mandado por la FIFA al Congreso Sudamericano de Lima en 1951 quien, tras muchas y largas negociaciones, logr¨® establecer un acuerdo que reconoc¨ªa a los clubes colombianos la propiedad sobre los jugadores del conflicto hasta el 15 de octubre de 1954, con plazo m¨¢ximo hasta 31 de diciembre del mismo a?o, pero les prohib¨ªa traspasarlos a cualquier otro club. A partir de esa fecha, la propiedad de estos jugadores revertir¨ªa a sus clubes de origen. Es decir, el jugador argentino era legalmente de Millonarios hasta el 31 de diciembre de 1954 y despu¨¦s su ficha volver¨ªa a pertenecer al River Plate.
A comienzos de 1953, Di St¨¦fano se hallaba en Buenos Aires, en rebeld¨ªa con Millonarios, a quien pertenec¨ªa hasta el 31 de diciembre de 1954, y con el compromiso de retornar a River Plate a partir del 1 de enero de 1955. ?sa era la situaci¨®n de Di St¨¦fano cuando lleg¨® a Barcelona en mayo de 1953. En esos momentos en el Bar?a se viv¨ªan momentos de incertidumbre por la situaci¨®n de Kubala. ?ste hab¨ªa marcado diferencias en el f¨²tbol espa?ol, ganando una Liga y dos Copas. Pero a comienzos de la campa?a 1952-53 se le detect¨® una afecci¨®n pulmonar. Tiempo despu¨¦s, varios doctores manifestaron su pesimismo sobre el futuro deportivo del jugador, as¨ª que hab¨ªa que buscar nuevas soluciones.
El presidente azulgrana, Enrique Mart¨ª, encarg¨® al secretario t¨¦cnico, Jos¨¦ Samitier, el fichaje de un crack para paliar la baja de Kubala. Samitier entr¨® en contacto con Di St¨¦fano, quien le coment¨® la situaci¨®n en que se encontraba: contrato en suspenso con Millonarios y obligado regreso a River Plate a partir del 1 de enero de 1955. El presidente barcelonista sonde¨® a Millonarios y se dirigi¨® a River, logrando un acuerdo telef¨®nico con el presidente de la sociedad bonaerense. Por cuatro millones de pesetas se hac¨ªa con los derechos de River Plate sobre Di St¨¦fano: es decir, desde el 1 de enero de 1955. As¨ª las cosas, la familia Di St¨¦fano se instal¨® en Barcelona, pero en febrero, se produjo la reaparici¨®n de Kubala y el Barcelona volvi¨® a proclamarse campe¨®n de Liga y Copa. Enrique Mart¨ª, el presidente barcelonista, quiso aprovechar un viaje a Venezuela para participar en la Peque?a Copa del Mundo para intentar solucionar el fichaje de Di St¨¦fano. Sin embargo, la entrevista entre el m¨¢ximo dirigente azulgrana y Alfonso Senior, presidente de Millonarios, no acab¨® felizmente. Senior exigi¨® 27.000 d¨®lares (1.350.000 pesetas) por ceder los derechos de su club sobre Di St¨¦fano, cifra que a Mart¨ª le pareci¨® exagerada. Ah¨ª apareci¨® el Real Madrid, pero¡ ?fue Alfonso Senior quien contact¨® con el Madrid o fue el club merengue quien habl¨® con el presidente de Millonarios?
En su estancia en la Ciudad Condal, desde el 23 de mayo hasta el 23 de septiembre de 1953, Di St¨¦fano se sinti¨® en muchos momentos abandonado por el Barcelona. Eso a pesar de los buenos oficios de Pepe Samitier. Mientras Senior llegaba a un acuerdo con el Madrid, Enrique Pardo, presidente de River Plate, vendi¨® el pase de Di St¨¦fano al Barca. ?D¨®nde jugar¨ªa finalmente? La cierto es que ?lvaro Bustamante, vicepresidente madridista, envi¨® a Bogot¨¢ a Raimundo Saporta con los 27.000 d¨®lares que Alfonso Senior demandaba por la cesi¨®n de los derechos de su club sobre Di St¨¦fano. Hubo acuerdo y el Madrid se hizo con los derechos de la Saeta Rubia hasta el 31 de diciembre de 1954. Saporta prosigui¨® viaje a Buenos Aires y visit¨® la sede de River, donde constat¨® que el Barcelona ya hab¨ªa efectuado un desembolso de dos millones de pesetas (el 50% de los cuatro millones de pesetas) y, por tanto, no pod¨ªa dar el golpe definitivo. Lo que s¨ª logr¨® fueron garant¨ªas de no beligerancia de River en el futuro. Considerando por tanto que Di St¨¦fano era ya jugador madridista, Saporta viaj¨® a Barcelona y mantuvo una entrevista con el jugador en el Hotel Regina, donde le abon¨® sus primeras pesetas como integrante de la plantilla madridista. Ante este detalle, Di St¨¦fano, que se sent¨ªa abandonado por el club azulgrana desde que el equipo partiera hacia Caracas -no hab¨ªa disputado en todo ese tiempo m¨¢s que tres partidos amistosos en Masnou, Sitges y Palafrugell-, comenz¨® a considerar la marcha al equipo blanco. El 9 de agosto, Samitier, m¨¢ximo valedor de Di St¨¦fano, abandonaba la secretar¨ªa t¨¦cnica del Barcelona tras no renovar su contrato.
Una semana despu¨¦s, el presidente de Millonarios se reun¨ªa en Madrid con Santiago Bernab¨¦u y cerraban definitivamente la operaci¨®n del traspaso de Di St¨¦fano. A¨²n quedar¨ªa resolver m¨¢s tr¨¢mites burocr¨¢ticos. Pero viendo la situaci¨®n, la directiva cul¨¦ hizo una ¨²ltima tentativa. El 26 de agosto se reuni¨® el vicepresidente Narciso de Carreras con Alfonso Senior en Madrid. Fue Carreras, y no Mart¨ª, quien acudi¨® a esta reuni¨®n por la mala impresi¨®n que hab¨ªa dejado Mart¨ª en la reuni¨®n de Bogot¨¢. El presidente de Millonarios confirm¨® que estaba todo pactado con el Madrid. Eso hizo que Mart¨ª perdiera los nervios y negociase el traspaso de Di St¨¦fano a la Juventus, incluso pens¨® en devolverlo a River Plate. Esto molest¨® enormemente al argentino, que decidi¨® aceptar la oferta blanca. S¨®lo cab¨ªa una soluci¨®n: Madrid y Barcelona deber¨ªan ponerse de acuerdo para buscar una salida al futuro de Di St¨¦fano con el visto bueno de la FIFA. Y finalmente, ser¨ªa un acuerdo entre clubes lo que allanar¨ªa el camino. Un acuerdo que se llevar¨ªa por delante al presidente azulgrana, Enrique Mart¨ª, que dimitir¨ªa tras explicar sus fallos en el proceso. Di St¨¦fano debutar¨ªa con el Madrid el 27 de septiembre de 1953, en un c¨®modo triunfo ante el Racing c¨¢ntabro por 4-2. El resto es historia...