El d¨ªa de la VARmota
El Sevilla vuelve a sufrir un arbitraje pol¨¦mico en la Champions League y Orsato demuestra de nuevo una actitud con los andaluces que canta de lejos.
Entre la guasa y la resignaci¨®n, no eran pocos los miembros de la expedici¨®n sevillista que se preguntaban si el colegiado italiano Daniele Orsato ser¨ªa hincha de la Roma y tendr¨ªa cuentas pendientes con los andaluces por la derrota de los de Mourinho en la final de la Europa League. Sea como fuere, la actuaci¨®n del ¨¢rbitro transalpino enfad¨® y mucho a los de Nervi¨®n, puesto que su actitud no es nueva. Puede decirse que canta de lejos.
Porque el ¨²ltimo partido que Orsato pit¨® al Sevilla fue precisamente en Eindhoven y ante el PSV. Y aquella noche de hace siete meses, estim¨® que no era necesario suspender un partido que ya enfilaba el descuento despu¨¦s de que un energ¨²meno saltara al c¨¦sped a intentar agredir, con escaso ¨¦xito, a Marko Dmitrovic. El partido se complic¨® y el Sevilla se libr¨® de una pr¨®rroga sobre la bocina.
Pero lo de la noche del martes fue excesivo a todas luces. Sobre todo, porque Orsato deleg¨® en el VAR todas las decisiones pol¨¦micas y no estim¨® necesario revisar ninguna de las jugadas discutibles en el monitor. La mano de Pedrosa hay que tener muchas ganas de pitarla pero, todav¨ªa m¨¢s, el penalti de Sergio Ramos. Principalmente, porque no lo fue ya que el jugador del PSV se iba tirando antes de contactar levemente con el camero.
El remate fue la falta del 2-2. Una acci¨®n que a Ramos nunca le hubieran pitado en ninguno de sus clubes anteriores. Una acci¨®n que hasta en seis ocasiones sufri¨® Lukebakio durante el partido y que se resolvi¨® con una bronca de Orsato dici¨¦ndole que se levantara del suelo y que no protestara. Los vientos de la Champions no son los de la Europa League para el Sevilla. Y en los arbitrajes no es una excepci¨®n. El d¨ªa de la marmota, versi¨®n VAR.