El Celta despierta a tiempo de la siesta

Carlos Carvalhal caminaba cabizbajo, entre pensativo y enfadado. S¨®lo hab¨ªa transcurrido media hora de partido, pero el portugu¨¦s ya preparaba dos cambios para despertar al Celta de una siesta imperdonable. Los vigueses salieron totalmente relajados al c¨¦sped de Lorca, confiados por la abismal diferencia de categor¨ªa. Sin embargo, tambi¨¦n se not¨® la abismal diferencia de motivaci¨®n. As¨ª, el Algar se adelant¨® en un c¨®rner a los quince minutos. La may¨²scula pifia de Villar le dio una alegr¨ªa al capit¨¢n algare?o, Cristian, tan sorprendido como euf¨®rico al notar c¨®mo la pelota le golpeaba en la espalda y ver posteriormente que el bal¨®n atravesaba la l¨ªnea de cal.

El gol no hizo reaccionar a los celestes. M¨¢s bien al contrario, quedaron noqueados por un golpe tan inesperado. Fue en ese momento, pasada la media hora, cuando Carvalhal decidi¨® actuar con un doble cambio. Pudo quitar a cualquiera de los once, pero se decidi¨® por los chavales Swedberg y Dur¨¢n, que no encontraban el desborde por la banda. En su lugar entraron Larsen y Cervi y el argentino no tard¨® ni un minuto en darle la raz¨®n a su t¨¦cnico. Aprovech¨® un gran servicio de Carles P¨¦rez para controlar y batir a Juanma. Este tanto s¨ª dio alas a los vigueses, que pisaron a fondo el acelerador en la recta final de la primera parte para llegar al descanso con ventaja. Lo impidi¨® Juanma con dos paradas extraordinarias. Primero le neg¨® el gol a Mingueza, quien remat¨® a placer en el coraz¨®n del ¨¢rea y ya estaba pensando en la celebraci¨®n, y despu¨¦s impidi¨® que Cervi anotara un genial tanto de chilena.

El descanso sirvi¨® para coger fuerzas, pero no para cambiar la din¨¢mica del tramo fina de la primera parte, con el Celta lanzado a por el gol. Lo encontr¨® pronto, a los diez minutos, en una gran acci¨®n personal de Carles P¨¦rez. Sin embargo, a¨²n esperaba un ¨²ltimo susto, pues segundos despu¨¦s Carrasco consigui¨® batir a Villar, aunque el bander¨ªn en alto del linier indicaba que la jugada estaba anulada por fuera de juego. La sentencia lleg¨® en una jugada ensayada. ?scar esper¨® en la frontal el lanzamiento de un c¨®rner y desde ah¨ª bati¨® a Juanma con un potente derechazo. Dos goles en cuatro minutos que aniquilaron las esperanzas algare?as.

La ¨²ltima fase del partido sirvi¨® para que Larsen pusiera fin a su sequ¨ªa goleadora. El noruego no se deprimi¨® por fallar una ocasi¨®n clar¨ªsima de gol, con un remate de cabeza a placer que envi¨® fuera, y persisti¨® en la b¨²squeda del ansiado tanto. Una incursi¨®n de Gal¨¢n por la izquierda fue rematada por Larsen a la red, que celebr¨® el gol con rabia despu¨¦s de tanta espera. La goleada fue completada por Javi Gal¨¢n, de penalti, y Kevin V¨¢zquez.