El Andorra atropella al Lugo y hace disfrutar a Piqu¨¦

El Estadi Nacional fue una fiesta que bail¨® al son de Bundu y Bakis. Los dos jugadores tricolores, que firmaron un doblete cada uno, castigaron a un Lugo que se le hizo eterno el encuentro. Es cierto que en la primera mitad present¨® batalla e incluso hizo m¨¦ritos para ponerse por delante en el marcador, pero Ratti se hizo gigante. Tras el descanso, y con los cambios de Sarabia, el Andorra se puso a volar y fue un martillo pil¨®n que dej¨® en nada al rival. Y todo con Gerard Piqu¨¦ en el palco, que disfrut¨® al m¨¢ximo de ¡®su¡¯ Andorra y ve como se asoma por la zona alta de la tabla. A la espera de lo que haga este lunes el Cartagena, contra el Mirand¨¦s, se posiciona a un solo punto del playoff de ascenso.

Bundu dio un espect¨¢culo de f¨²tbol y pegada en los 14 minutos que estuvo sobre el terreno de juego. Apareci¨® en el 67¡ä y en el 81¡ä se march¨® lesionado. Pero le dio tiempo suficiente como para firmar un doblete y dar una asistencia. Todos los focos habr¨ªan sido para el extremo, pero Sinan Bakis se sum¨® a la fiesta con otros dos tantos. Su segundo, el 4-0, de videoteca porque su disparo desde fuera del ¨¢rea fue tremendo y se col¨® por la escuadra de Whalley. Todo sucedi¨® en una segunda mitad en la que el Lugo no apareci¨® y cada tanto en contra fue una herida imposible de cerrar. El 4-0 pudo ser un castigo excesivo para un bloque de Hern¨¢n P¨¦rez que en la primera mitad hizo m¨¦ritos para no irse de vac¨ªo. Chris Ramos disfrut¨® de dos buenas ocasiones, pero se top¨® con Ratti y Sebas Moyano, en el 28¡ä, se amarg¨® porque entre Bakis y el larguero rechazaron su cabezazo.

Fue un encuentro entretenido y en el que los cambios de Eder Sarabia fueron determinantes. La aparici¨®n de Jacobo y, como no, de Bundu electrocutaron un duelo que acab¨® encumbrando a un Andorra que suma y sigue en su primera temporada de la historia en Segunda y que est¨¢ dispuesto a dar mucho qu¨¦ hablar. En cuanto al Lugo, se afianza, peligrosamente, en la zona de descenso, ya vislumbra la salvaci¨®n a tres puntos de distancia. Hern¨¢n P¨¦rez vuelve a acaparar las miradas. El futuro del entrenador, en el aire.