El ¡®Loco¡¯ de la guarda
R¨¹diger se ha convertido en el salvador del Madrid. Sus penaltis eliminaron al City y al Atleti y su testarazo, a la Real. Si marca, el equipo blanco celebra o triunfos o clasificaciones.
En medio de la locura, el Loco impuso su ley. Su ¨²ltima v¨ªctima, la Real Sociedad. Como antes Manchester City y Atleti. Dos tandas de alegr¨ªa m¨¢xima con R¨¹diger asestando el golpe de gracia. Nunca es tarde para Rambo. Acostumbrado a apagar fuegos. En campo propio y ajeno. Cuando Ancelotti e Imanol ya echaban cuentas de lanzadores para los penaltis. Mientras caminaban sobre espinas. Ah¨ª, cuando mor¨ªa la l¨®gica, apareci¨® la ¨¦pica. Aunque a lo il¨®gico Rambo encontr¨® explicaci¨®n: ¡°Somos el Real Madrid y siempre luchamos hasta el final¡±. Una vez m¨¢s ¨¢ngel de la guarda.
Fue un Madrid guadianesco. Discontinuo. Que vio tan cerca el precipicio como la gloria. Que convirti¨® un 1-3 en un 3-3 en un pesta?eo. Y que vio c¨®mo Oyarzabal, de cabeza, te?¨ªa de txuri-urdin una zona habitualmente blanca, el descuento. 3-4. As¨ª se llegaba a la pr¨®rroga. Y en el 115¡ä G¨¹ler colgaba un c¨®rner con m¨²sica. No llegaba Bellingham, pero s¨ª el muro de Berl¨ªn, que hab¨ªa entrado al campo poco antes en lugar de un Alaba al que le pas¨® por encima el encuentro. R¨¹diger volv¨ªa a ser un p¨¢jaro disparando a una escopeta. ¡°Arda me lo puso muy f¨¢cil¡±, resum¨ªa con una sonrisa. Decisivo con gol. Otra vez. Un defensa convertido en delantero.
La retina del madridismo a¨²n diger¨ªa su ¨²ltimo zarpazo. En el Euroderbi, sin ir m¨¢s lejos. En la vuelta, llegada la tanda, tanto R¨¹diger como Ancelotti ten¨ªan claro que el penalti decisivo se conjugar¨ªa en alem¨¢n. Porque ya hab¨ªan vivido una noche de bendita locura el curso anterior en el Etihad, donde Toni puso la guinda desde los 11 metros a un milagro sobrenatural. Y, aunque con suspense, acab¨® en la red. Para poner rumbo a Londres, donde espera el Arsenal. Como su testarazo a la Real compr¨® el billete a Sevilla. Para citarse con Atleti o Bar?a en la Cartuja. Porque sin la personalidad y la punter¨ªa de R¨¹diger quiz¨¢ no habr¨ªa ni cuartos de Champions ni final de Copa esta temporada. Ni habr¨ªa habido semifinal ante el Bayern la pasada. En momentos de cabeza fr¨ªa y coraz¨®n caliente, R¨¹diger.
Talism¨¢n
Hasta ahora, el de Neuk?lln lleva siete tantos con el Madrid. La mayor¨ªa decisivos. Todos con bot¨ªn. Porque el gol de R¨¹diger no es victoria segura, pero casi. Cinco victorias (Stuttgart y Dortmund en Champions, Mallorca por dos veces en Liga y Atl¨¦tico en la pen¨²ltima Supercopa de Espa?a) y dos empates. Y ambos con sabor a gloria. El ¨²ltimo, por razones evidentes, pues es la semifinal copera contra la Real.
El anterior, con regusto tambi¨¦n a sangre. Literalmente. Y es que el alem¨¢n salv¨® un punto ante el Shakhtar en el 97¡ä, en la fase de grupos de la 2021-22. Con otro cabezazo donde se dej¨® la piel. Hasta el punto de recibir... ?20 puntos de sutura! El premio, adem¨¢s, fue la clasificaci¨®n matem¨¢tica para octavos. Porque R¨¹diger no aparece por casualidad, sino por necesidad. Como hacen los h¨¦roes.
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